Discurso "centrista" de Soares en el congreso socialista

ENVIADO ESPECIAL, La formación de una mayoría decisiva en los órganos directivos del partido, en los que las minorías también estarán representada parece ser el objetivo del secretar general del Partido Socialista Portugués, Mario Soares. Durante dos horas y media, Soares habló a los congresistas de los dos años transcurridos desde la realización del anterior congreso, de la actuación del Gobierno que preside del futuro portugués. Solicitó su apoyo al Gobierno «en bloque» pidió unidad entre los militantes, al mismo tiempo que alertó sobre el peligro de una escisión, indicando que la separa...

ENVIADO ESPECIAL, La formación de una mayoría decisiva en los órganos directivos del partido, en los que las minorías también estarán representada parece ser el objetivo del secretar general del Partido Socialista Portugués, Mario Soares. Durante dos horas y media, Soares habló a los congresistas de los dos años transcurridos desde la realización del anterior congreso, de la actuación del Gobierno que preside del futuro portugués. Solicitó su apoyo al Gobierno «en bloque» pidió unidad entre los militantes, al mismo tiempo que alertó sobre el peligro de una escisión, indicando que la separación de Manuel Serrado, ocurrida en 1974, fue una operación montada por los servicios secretos extranjeros.La existencia de una mayoría y una o varias minorías en un partido no representa ninguna tragedia. Un partido pluralista como el nuestro no puede pretender la unanimidad absoluta, agregó Soares a los 1.400 delegados reunidos en el Pabellón de los Deportes de Lisboa.

Más de 21.000 personas, ellas 150 invitados extranjeros, escucharon un discurso «centrista» pero que a juzgar por determina los observadores, se ha inclinado demasiado a la derecha. Entre los asistentes se encontraban Rafael Calvo Serer, Raúl Morodo (PSP) Felipe González (PSOE) y Santiago Alvarez (PCE), que fueron saludados por los congresistas en pie gritando «España vencerá».

Soares indicó también en su alocución que en las últimas semanas, la lucha entre las diversas «corrientes» del partido «sobrepasó los límites permitidos».

El secretario general también habló en términos especialmente duros del período «gonzalvista», criticando la actuación del Partido Comunista y de la Intersindical. No obstante, no hizo referencias al Partido Socialdemócrata ni al Centro Democrático Social, como tampoco a los intentos de golpe de Estado por parte de la derecha portuguesa.

Ayer el Partido Socialdemócrata (ex Popular Democrático) inició también un congreso nacional en Leiría (norte del país), en el que coordinará su programa y sus relaciones con el PS en el poder.