Cartas al director

Salud pública y animales domésticos

En Alemania, un país cuyo respeto al animal es secular, que tiene desde hace muchos años una ley de Protección al Animal, que incluso es criticado de que quiere más a los animales que a los niños; ese país obliga a que los perros vayan atados por la calle, y prohíbe terminantemente la entrada a los mismos en establecimientos de alimentación, los cuales exponen en lugar bien visible, sendos letreros indicando tal prohibición.Pretender que la admisión de los animales en esos establecimientos quede al arbitrio de los propietarios, es no dar suficiente importancia a un asunto tan grave como es la...

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En Alemania, un país cuyo respeto al animal es secular, que tiene desde hace muchos años una ley de Protección al Animal, que incluso es criticado de que quiere más a los animales que a los niños; ese país obliga a que los perros vayan atados por la calle, y prohíbe terminantemente la entrada a los mismos en establecimientos de alimentación, los cuales exponen en lugar bien visible, sendos letreros indicando tal prohibición.Pretender que la admisión de los animales en esos establecimientos quede al arbitrio de los propietarios, es no dar suficiente importancia a un asunto tan grave como es la salud pública, que no puede quedar supeditada a decisiones personales, sino que ha de estar regulada por estrictas normas legales.

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