Taxista negro, muerto en el jardín de la Casa Blanca

Un hombre de color, de treinta años de edad, murió en la noche del domingo al ser alcanzado en el jardín de la Casa Blanca por un disparo hecho por uno de los agentes del servicio secreto encargados de la custodia de la residencia presidencial. El intruso había saltado la verja exterior y avanzaba por el jardín en dirección a la Casa Blanca mientras blandía en su mano un trozo de tubería de plomo.El asaltante fue identificado como Chester M. Plumer Jr., taxista de profesión, y al que sus vecinos definieron como un hombre «extraño y solitario». Plumer saltó la verja, de unos dos metros de a...

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Un hombre de color, de treinta años de edad, murió en la noche del domingo al ser alcanzado en el jardín de la Casa Blanca por un disparo hecho por uno de los agentes del servicio secreto encargados de la custodia de la residencia presidencial. El intruso había saltado la verja exterior y avanzaba por el jardín en dirección a la Casa Blanca mientras blandía en su mano un trozo de tubería de plomo.El asaltante fue identificado como Chester M. Plumer Jr., taxista de profesión, y al que sus vecinos definieron como un hombre «extraño y solitario». Plumer saltó la verja, de unos dos metros de altura, que separa el jardín de la residencia presidencial de la avenida de Pennsylvania, a las nueve y media de la noche del domingo. Cuando había avanzado unos veinte metros por el jardín fue interceptado por el agente del servicio secreto Charles A. Garland, de 25 años, quien le dio el alto y, al no ser obedecido, hizo fuego con su revólver, alcanzando al intruso en el pecho. Trasladado al hospital de la Universidad George Washington, Plumer falleció una hora después.

En el momento de producirse el incidente, el presidente Ford y su familia se encontraban en el segundo piso de la Casa Blanca. Un portavoz del servicio secreto anunció que el intruso no obedeció la orden de alto, que se le dio tres veces consecutivas, y que habla hecho un gesto amenazador con el trozo de tubería que llevaba en la mano, lo que obligó al agente a disparar. Siguiendo una medida rutinaria, el autor del disparo ha sido apartado del servicio activo y destinado a un puesto administrativo hasta que un gran jurado investigue los hechos.

Este incidente es el quinto que se produce en la Casa Blanca desde que la habita el presidente Ford, hace dos años, y el que ha revestido mayor gravedad. En 1974, un hombre que pretendía entregar a Ford un ejemplar del Corán embistió con su coche la puerta del jardín de la Casa Blanca, derribándola. Ese mismo año un soldado aterrizó con un helicóptero en el jardín de la residencia presidencial, entre los disparos de los guardias de seguridad. En ninguna de las dos ocasiones se produjeron heridos.

El intento más reciente de introducirse en la Casa Blanca fue protagonizado, a primeros de junio de este año, por un veterano en estos menesteres, Gerland Gainous, de 25 años, que había saltado anteriormente en dos ocasiones la verja de la Casa Blanca. En uno de sus intentos, Gainous se acercó a muy pocos metros de la hija del presidente Ford, Susan.

El más grave incidente de este tipo tuvo lugar en 1950, cuando dos nacionalistas portorriqueños atacaron la entrada principal de la Blair House, situada frente a la Casa Blanca, al otro lado de la avenida de Pennsylvania, que era entonces la residencia temporal de presidente Truman. Un agente de seguridad murió en aquella ocasión en el tiroteo que se produjo.

Un portavoz del servicio secreto anunció que el incidente no llevaría, en principio, a una revisión de las medidas de seguridad en e interior de la Casa Blanca, que se consideran suficientes.

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