Hoy finalizan las elecciones primarias en USA

En el último round de este extraño combate de boxeo político que los norteamericanos suelen llamar elecciones primarias, el candidato Ronald Reagan dirige su mirada hacia los jueces, hacia los escaños vacíos de los jueces, mejor dicho, y grita: «señores, esa es una trampa. Ya estoy harto de los golpes bajos de Jerry Ford». ¿De qué se trata? ¿Qué le molesta tanto a Reagan? El ex gobernador piensa que de antemano la convención republica no le otorgará la investidura, y queFord puede permitirse el lujo de perder las primarias de California. Pero lo que de verdad le irrita a Reagan es la ca...

En el último round de este extraño combate de boxeo político que los norteamericanos suelen llamar elecciones primarias, el candidato Ronald Reagan dirige su mirada hacia los jueces, hacia los escaños vacíos de los jueces, mejor dicho, y grita: «señores, esa es una trampa. Ya estoy harto de los golpes bajos de Jerry Ford». ¿De qué se trata? ¿Qué le molesta tanto a Reagan? El ex gobernador piensa que de antemano la convención republica no le otorgará la investidura, y queFord puede permitirse el lujo de perder las primarias de California. Pero lo que de verdad le irrita a Reagan es la campaña de anuncios pagados por los amigos de Ford, unos anuncios que se limitan a decír: «El gobernador Reagan no puede declarar una guerra. El presidente Reagan sí la puede declarar». Los republicanos convencidos de que Ford debe permanecer en la Casa Blanca han utilizado con astucia las declaraciones formuladas por el actor de cine la semana pasada. En efecto Reagan pedía el envío de tropas norteamericanas a Rodesia. Según él, para mantener la paz y el orden y para facilitar una solución negociada del conflicto que opone la minoría blanca (integrada por varios millares de americanos) a la mayoría africana.

El candidato californiano declaró ayer a los periodistas que le acompañan que la campaña de los partidarios de Ford es «completamente deshonesta».

Esperanza bíblica de Udall

Pero Jerry Ford dijo a su llegada a Ohio, última etapa de su campaña electoral, que la Casa Blanca no tenía nada que ver con estos anuncios, redactados y pagados por el comité califomiano para la reelección del presidente. Por otra parte, Ford señaló que Reagan había insinuado el posible envío de tropas USA a Rodesia y que «la gente lo juzgaba por sus dectaraciones». Y como en este combate no hay normas establecidas ni árbitros...En todo caso, los amigos de Ford están bastante preocupados. En efecto, hace apenas unas semanas, el presidente contaba con los 97 delegados de Ohio, pero ahora parece que Ronald Reagan ha conseguido convencer a más de 20 grandes electores y que los votos que obtendrá en este Estado podrían compensar las pérdidas de California.

«Soy el único republicano capaz de ganar las elecciones», declaró ayer por última vez el candidato Ford. La verdad es que el caos reina en las filas de los demócratas y que esta situación sólo favorece al presidente.

Después de varios meses de campaña centrada en la política interna de los Estados Unidos y sus relaciones con el resto del mundo, los demócratas, todos los demócratas, finalizan el partido con una secuencia religiosa. Morris Udall anunció que el martes 8 de junio será el «día del juicio final», mientras que Jerry Brown, que había decidido terminar su campaña asistiendo a varios servicios religiosos, recordó otra vez aquello de «los últimos serán los primeros y los primeros ( ... )».

El evangelista Jimmy Carter habló en la gran sinagoga de Nueva Jersey sobre la necesidad de garantizar la supervivencia del Estado de Israel. Carter no duda de su victoria en Nueva Jersey, pero tiene gran interés en conseguir los votos judíos.