España tendrá que mejorar ciertas preferencias industriales a los "nueve"

Españoles y comunitarios se encuentran hoy, en la sede de la Comisión de las Comunidades Europeas, en Bruselas, para una segunda ronda de conversaciones destinadas a ir perfilando el futuro contenido del protocolo adicional, que adaptará el acuerdo comercial preferente España-CEE a los nueve miembros del Mercado Común.

En su último encuentro, el 28 de abril, españoles y comunitarios al término de cinco horas de diálogo, no llegaron más allá del simple intercambio de puntos de vita. Madrid planteó sus deseos de mantener «un equilibrio» en las futuras relaciones comerciales España-CEE, sa...

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Españoles y comunitarios se encuentran hoy, en la sede de la Comisión de las Comunidades Europeas, en Bruselas, para una segunda ronda de conversaciones destinadas a ir perfilando el futuro contenido del protocolo adicional, que adaptará el acuerdo comercial preferente España-CEE a los nueve miembros del Mercado Común.

En su último encuentro, el 28 de abril, españoles y comunitarios al término de cinco horas de diálogo, no llegaron más allá del simple intercambio de puntos de vita. Madrid planteó sus deseos de mantener «un equilibrio» en las futuras relaciones comerciales España-CEE, salvaguardando en especial los intereses agrícolas.Bruselas insistió en que España deberá dar mejorea preferencias a las importaciones industriales de la CEE, si,quiere que los Nueve aflojen sus barreras proteccionistas en materia agrícola.

La delegación española volverá ahora a la carga con elementos más concretos. Una serie de documentos, algunos de ellos preparados producto por producto, debería servir para demostrar a los comunitarios la necesidad de que por lo menos se conceda al agro hispano las mismas ventajas arancelarias que los «Nueve» estaban dispuestos a darles en su mandato de 1974, cuando sé intentaba negociar una zona de libre cambio industrial, acompañada de sustanciales rebajas aduaneras a favor de los pro.ductos agrícolas españoles.

Los comunitarios ya anunciaron a los españoles, en su reunión del 28 de abril, que los estados miembros, no comprendían por qué deben Conceder las mismas. preferencias agrícolas que estaban dispuestos a dar, si ahora no se habla de libre cambio industrial.

Es inevitable que España deberá conceder ciertas preferencias industriales a los «Nueve», si quiere obtener ventajas agrícolas. Las concesiones industriales españolas a favor de la CEE podrían suponer una rebaja del orden del 20 por 100 para la entrada de la mayoría de productos industriales comunitarios a España.

Actualmente los productos industriales CEE incluidos en la lista «Á» del acuerdo comercial preferente de octubre de 1970 se benefician de un 50 por 100 de reducción tatifaria (60 por 100 a partir de enero de, 1977), y los de las listas «B» y «C», de un 20 por 100 (25 por 100 a partir de enero de 1977). La idea de los comunitarios es- que, por lo menos, España debería aumentar estas,reducciones en un 20 por 100 lineal dentro de la adaptación futura del acuerdo. Insisten también para reglamentar los productos siderúrgicos.

Los comunitarios también desearían mejorar sus ventajas para la exportación de ciertos productos agrícolas a España, princialmente en lo que se refiere a quesos, mantequilla, leche y cereales. La negociación actual es técnica. Se trata de conseguir un arreglo temporal que reglamente los intercambios comerciales España-CEE de los «Nueve», en espera que una democratización de la vida política española permita la negociación de un tratado de adhesión. Sin embargo, la mayoría de observadores de la marcha de las negociaciones España-CEE coinciden en afirmar que los comunitarios se consideran en posición de fuerza política, teniendo en cuenta las múltiples declaraciones de personalidades del Gobierno español que predican la necesidad de un acercamiento al Mercado Común.

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