Djokovic colapsa, sufre y se levanta
El serbio remonta dos sets tras sufrir una desconexión contra el joven Sinner (5-7, 2-6, 6-3, 6-2 y 6-2) y se medirá en la penúltima ronda de Londres con el local Norrie
Ya se sabe, no es nuevo: en el tenis, no hay mejor jugador de póquer que Novak Djokovic. Engaña y engaña el serbio, que durante un buen rato camina sobre el alambre, pone malas caras y cede más y más terreno ante el joven Jannik Sinner. Por unos instantes, el italiano, 15 años menor que el ex número uno, se lo cree, mientras en la grada crece el runrún y no son pocos los que caen en la trampa. Hay quienes compran la escena y piensan que el serbio va a perder, que va a llegar la gran c...
Ya se sabe, no es nuevo: en el tenis, no hay mejor jugador de póquer que Novak Djokovic. Engaña y engaña el serbio, que durante un buen rato camina sobre el alambre, pone malas caras y cede más y más terreno ante el joven Jannik Sinner. Por unos instantes, el italiano, 15 años menor que el ex número uno, se lo cree, mientras en la grada crece el runrún y no son pocos los que caen en la trampa. Hay quienes compran la escena y piensan que el serbio va a perder, que va a llegar la gran campanada y va a ser eliminado de este Wimbledon, pero al final sucede lo de casi siempre: Nole se levanta, contragolpea y descubre las cartas: 5-7, 2-6, 6-3, 6-2 y 6-2, después de 3h 35m.
“Adoro esta pista, es la más importante de mi carrera”, dice el de Belgrado, que colecciona ya 84 victorias en Londres e iguala de este modo el registro del estadounidense Jimmy Connors. Suma y sigue Djokovic, el hombre a batir. Quizá no sea su mejor momento, pero ha ganado las tres últimas ediciones y no pierde en el All England Club desde hace cinco años, cuando tuvo que retirarse frente a Tomas Berdych en los cuartos por una lesión en el codo. A partir de ahí, ganar, ganar y más ganar. Son ya 26 triunfos sucesivos e irrumpe ahora en las semifinales a lomos de la cuarta racha más prolongada en el torneo desde que naciera la Era Abierta (1968).
Durante un buen rato, Djokovic jugó con fuego. Del 4-1 al 4-4 en el primer parcial, y a partir de ahí los sufrimientos. Tiene Sinner hechuras de buen competidor, aunque aún no le han salido los colmillos; de hecho, aún no ha conseguido batir a ningún top-5 (0/13). El italiano, de 20 años y verdugo de Carlos Alcaraz en la estación previa, le cercó y amenazó, pero se dio finalmente de bruces con el halo ganador del serbio en Londres. Un punto cedió Nole con su servicio en el último set. Dos mangas levantó. Es la séptima vez que lo consigue a lo largo de sus 20 temporadas como profesional, de aquella primera vez contra Guillermo García-López (Wimbledon 2005) al precedente contra Stefanos Tsitsipas (Roland Garros 2021).
“Siempre creí en que podía remontar”, aseveró. “Muchas veces, sabes que en este tipo de situaciones los jóvenes jugadores experimentan algo que nunca antes han experimentado. Siento que Sinner ha llegado al partido sin demasiado que perder, pero cuando iba dos sets arriba sí tenía mucho que perder. Estoy seguro de que va a mejorar con el tiempo porque es un jugador fantástico y muy profesional. Seguro que vamos a ofrecer mucho en los grandes torneos”, agregó.
Le faltó poner el lazo a Sinner, se enderezó Djokovic y en la próxima estación, el campeón de 20 grandes se enfrentará el viernes al británico Cameron Norrie, que se impuso en la Court 1 al belga David Goffin (3-6, 7-5, 2-6, 6-3 y 7-5) y recogió el testigo de Andy Murray (2016) como último semifinalista local. Antes, en la central, la película tantas y tantas veces vista: el Djoker tiene mil vidas. Y he aquí la penúltima demostración.
LA EXTRAORDINARIA IRRUPCIÓN DE MARIA: 34 AÑOS, 103ª Y DOBLE MATERNIDAD
En clave femenina, este Wimbledon ha destapado el nombre de Tatjana Maria. La alemana, de 34 años y madre de dos hijos, ha logrado incluir su nombre en el cartel de las semifinales contra todo pronóstico. “Supongo que hay mucha gente que creyó que nunca volvería”, decía después de batir a su compatriota Julie Niemeyer por 4-6, 6-2 y 7-5.
En 2013 dejó temporalmente el tenis tras haber sido madre por primera vez y el curso pasado repitió. Ahora, instalada en el puesto 103º del mundo, Maria ha logrado el mejor registro de su carrera y es la sexta mujer que llega a las semifinales de un Grand Slam después de haber alcanzado su edad.
La alemana se medirá con Ons Jabeur, que superó a Marie Bouzkova: 3-6, 6-1 y 6-1. La tunecina sigue regalando detalles de calidad en la pista e hizo de nuevo historia; después de haberse convertido en la primera tenista norteafricana en acceder al top 10 y en la primera en ganar un WTA 1000, este año en Madrid, ya es la primera que llega a las semifinales de un grande.
Jabeur, de 27 años, es la única cabeza de serie que sigue en el torneo tras las caídas de Iga Swiatek (1ª), Anett Kontaveit (2ª), Maria Sakkari (3ª), Paula Badosa (4ª), Karolina Pliskova (6ª), Danielle Collins (7ª), Jessica Pegula (8ª), Garbiñe Muguruza (9ª) y Emma Raducanu (10ª).
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