El presidente del PSG, imputado por “corrupción activa” en un caso relativo al Mundial de Atletismo 2017

Según el diario 'Le Parisien', Nasser Al-Khelaifi autorizó un pago de 3,1 millones de euros para intentar que la cita se se celebrase en Doha

Al Khelaifi, en 2017. FABRICE COFFRINI (AFP)

El presidente del París Saint Germain y miembro del Comité Ejecutivo de UEFA, Nasser Al- Khelaifi, ha sido imputado por “corrupción activa” en el procedimiento abierto por la justicia francesa por la atribución de competiciones internacionales, confirmaron fuentes judiciales a diversos medios en Francia. La investigación se centra en los Mundiales de Atletismo que Qatar pretendía celebrar en 2017, aunque Lo...

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El presidente del París Saint Germain y miembro del Comité Ejecutivo de UEFA, Nasser Al- Khelaifi, ha sido imputado por “corrupción activa” en el procedimiento abierto por la justicia francesa por la atribución de competiciones internacionales, confirmaron fuentes judiciales a diversos medios en Francia. La investigación se centra en los Mundiales de Atletismo que Qatar pretendía celebrar en 2017, aunque Londres acabó siendo la ciudad elegida. Doha consiguió al final el campeonato que se celebrará este mes de septiembre. Según el diario Le Parisien, Al Khelaifi es sospechoso de haber "validado" un pago de 3,5 millones de dólares (2,5 millones de euros, al cambio de la época) al entonces presidente de la Federación Internacional de Atletismo, Lamin Diack, a través de intermediarios. Algo que es "totalmente inexacto", dijo al mismo medio el abogado del poderoso catarí, Francis Szpiner.

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A la pista de Al Khelaifi llegó el juez de instrucción Renaud van Ruymbeke investigando sobre el dopaje de atletas rusos y sus ramificaciones financieras. Es entonces cuando el magistrado, según Le Parisien, descubrió las transferencias millonarias realizadas a finales de 2011 por la sociedad Oryx Qatar Sports Investment, que pertenece a Nasser Al-Khelaifi y a su hermano Khalid, a la consultora deportiva senegalesa Pamodzi Sports Consulting. El dueño de esta es Papa Massata Diack, hijo de Lamine Dicak, que presidió la IAAF entre 1999 y 2015, y presuntamente personaje central del escándalo de dopaje. En esa época, Qatar buscaba ser la organizadora de los Mundiales de Atletismo de 2017, que acabó celebrando Londres, y de los Juegos Olímpicos de 2020, que se celebrarán en Tokio. Tres años más tarde, en 2014, Doha obtuvo al fin la celebración de los Mundiales de Atletismo de 2019. Para evitar las altas temperaturas, Qatar logró que la competición, tradicionalmente celebrada en agosto, se realice en esta ocasión entre finales de septiembre y comienzos de octubre. Un cambio de fechas que fue posible gracias a una gestión de Lamine Diack, según adelantó Le Monde, que ya informó de los pagos sospechosos a finales de 2016.

La investigación busca determinar si, en contrapartida de estos pagos, Lamine Diack, presidente de la IAAF entre 1999 y 2015, trabajó para posponer las fechas, debido a las condiciones meteorológicas del país. Además, estudia la obtención de votos de miembros de la IAAF en favor de Qatar para el Mundial, señala la Agencia France Presse.

El abogado de Al-Khelaifi fue categórico. Su cliente “nunca ha estado operacionalmente implicado en la candidatura de Doha para el Mundial”, aseguró Szpiner al diario parisino. Según explicó, en las fechas en que presuntamente se produjeron los pagos, “él no era ni accionista ni dirigente de Oryx, y por tanto no puede estar implicado”. Además, estimó que, al no haber “ningún nexo entre los hechos y el territorio francés, ningún elemento justifica la competencia de la ley o la jurisdicción francesa sobre presuntas infracciones que encima han prescrito”.

No es la primera vez en este 2019 en el que los procedimientos de Al-Khelaifi se ven investigados. El PSG que él mismo dirige lleva tiempo vigilado por la UEFA, que le acusó de vulnerar el fair play financiero con los más de 400 millones de euros invertidos en los fichajes de Neymar Jr y Kylian Mbappé en 2017. El cuadro parisino se enfrentaba por esta acusación a una posible eliminación de la próxima edición de la Liga de Campeones. Sin embargo, el Tribunal de Arbitraje Deportivo a quién elevó un recurso el club francés, decidió cerrar el expediente el pasado de mes de marzo. El TAS no entró a valorar el fondo del asunto, simplemente dictaminó que no podía juzgarlo porque la UEFA no cumplió los plazos cuando solicitó que se reabriera.

En el dosier por el Mundial de Atletismo hay otra persona implicada que es próxima al dirigente del PSG. Yousef Al-Obaidly, director general de la cadena catarí de deportes beIN y antiguo brazo derecho de Al Khelaifi, además de ser miembro del consejo de administración del club parisino, fue imputado el 28 de marzo, también por “corrupción activa”. Un día antes también fue imputado por “corrupción pasiva” Lamine Diack. Su hijo tiene una orden de arresto emitida el 18 de abril por los jueces de instrucción por sospechas de “corrupción pasiva” y “blanqueamiento agravado”, según una fuente próxima al caso.

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