Crítica

‘MasterChef Celebrity’, la receta del entretenimiento

La tercera edición de la versión con famosos del formato arranca en forma y con un buen grupo de participantes, aunque la duración del programa sigue siendo demasiada

MasterChef ha dado con una receta que funciona. Que en casi todas las estaciones del año haya una edición en antena en La 1 es la prueba. La versión con famosos, que ayer estrenó su tercera entrega, explota la vertiente de entretenimiento del programa, y lo hace a las mil maravillas. Partiendo de una buena y variada selección de concursantes (más ecléctica que la del año pasado, donde predominaban los cómicos), el programa repite fórm...

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MasterChef ha dado con una receta que funciona. Que en casi todas las estaciones del año haya una edición en antena en La 1 es la prueba. La versión con famosos, que ayer estrenó su tercera entrega, explota la vertiente de entretenimiento del programa, y lo hace a las mil maravillas. Partiendo de una buena y variada selección de concursantes (más ecléctica que la del año pasado, donde predominaban los cómicos), el programa repite fórmula agarrándose a eso de que si algo funciona, no lo cambies. El espectador no puede esperar aprender demasiado de cocina, pero sí pasar un buen rato.

Algunos personajes pueden gustar más o menos, tender más al histrionismo o pasar más desapercibidos, ser más o menos competitivos, dar más o menos espectáculo. Pero al otro lado de la pantalla, el espectador tiene la sensación de que el esfuerzo y el estrés que se ve en las cocinas del programa es real, que pierden los papeles porque les importa lo que están haciendo.

Antonia Dell'Atte lo mismo parece que va a buscar un hacha para matar a alguno de sus compañeros de equipo que poco después se emociona con las palabras de reconocimiento del jurado. Óscar Higares rompe a llorar de frustración tras una mala prueba. La eliminada llora de rabia por haber fallado a las primeras de cambio. Carmen Lomana pela y corta por primera vez en su vida una cebolla. Como dice Mario Vaquerizo con su redecilla en el pelo, "cada maricón es un mundo en esto de la cocina".

Puro entretenimiento sí. Pero un entretenimiento muy largo. Porque uno de los pocos problemas de MasterChef Celebrity (y es uno importante) es el que ya hemos dicho en multitud de ocasiones: su duración. Es claramente innecesario que se alargue durante tres horas y media. Al emitirse en domingo —al menos de momento...—, su arranque se adelanta un poco, pero, aun así la gala inicial terminó a la 01.30 de la madrugada. Así, pocos descubrirían que, al final, las Retales Anabel Alonso y Bibiana Fernández estrenaron nuevo espacio comentando el programa y adelantando el de la semana siguiente. Pero no son horas.

MasterChef Celebrity 3 fue seguido por 2.944.000 espectadores (24,7% de cuota de pantalla), el mejor arranque en share de sus tres ediciones en España.

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