Robo de joyas y relojes de lujo en el exterior: “El ‘lanza’ chileno le perdió el miedo a Estados Unidos”

En diciembre de 2023, la casa del actor Keanu Reeves en Los Ángeles, en el sector de Hollywood Hills, fue robada por un grupo de asaltantes cuando estaba sin sus moradores. Casi más un año después, en una vivienda en el municipio de Peñalolén, en la zona oriente de Santiago, un Rolex con el nombre del protagonista de Matrix, Máxima velocidad y John Wick: Capítulo 4, fue encontrado por la policía chilena en manos de Jassir Barra Lastra, un delincuente de 21 años investigado por varios atracos en la capital del país sudamericano. La noticia de la recuperación del reloj, que según Barra se lo envió su hermano, dio vueltas al mundo, y puso de nuevo en el foco a las bandas de chilenos que han comenzado a delinquir aproximadamente hace cuatro años en Estados Unidos y con el mismo modus operandi: ingresan a casas deshabitadas para robar. La ‘especialidad’ suele ser, precisamente, relojes de lujo y joyas.

El caso de Reeves tuvo una connotación especial por quién es el dueño del Rolex. Pero su recuperación es una más de las varias que se han realizado en Chile. Este viernes, la Fiscalía de metropolitana occidente entregó a la Embajada de Estados Unidos en Santiago una veintena de joyas robadas en 2024 a un ciudadano norteamericano en su casa en Los Ángeles. La coordinación la realizó el fiscal jefe de Pudahuel, Eduardo Baeza, que tiene como jurisdicción el aeropuerto internacional de Santiago, junto a la Unidad de Cooperación Internacional y Extradiciones (UCIEX) del Ministerio Público chileno y a la Policía de Investigaciones (PDI).

Por décadas, de acuerdo con la historia del hampa local, los chilenos que delinquen en el exterior han sido conocidos como ‘lanzas internacionales’. El nombre viene pues corren a toda velocidad, como una lanza, tras tirar las gargantillas y bolsos a sus víctimas. Pero, aun cuando persiste este método, el fiscal Baeza cuenta a EL PAÍS que han ido mutando a los robos a casas sin habitantes, en especial en Estados Unidos, aunque este tipo delitos comenzó en Europa hace una década, aproximadamente, con violentos atracos a joyerías.

Coincide Álvaro Hernández, subdirector de la UCIEX: “Hay un fenómeno criminal creciente de chilenos que cometen delitos en el extranjero, los ´lanzas internacionales’, específicamente de robos a casas de veraneo o desocupadas y a joyerías en Europa”. Y señala que de las extradiciones solicitadas a Chile, la mayor parte han venido desde España, Dinamarca y de Francia, pero por robos hasta ahora no desde Estados Unidos pues es un “fenómeno reciente” y porque, en general, “allá los detienen y los juzgan”.

Eduardo Baeza explica que el perfil de los ´lanzas’ —todavía se les llama así— “es particular y reconocido en el extranjero. A nivel internacional los chilenos tienen esta ‘especialidad’ de delitos contra la propiedad y por eso se diferencian con delincuentes de otros países”. Señala que él ha observado, “desde hace unos hace cuatro años, un incremento en Los Ángeles, en Estados Unidos. Por eso tenemos permanente flujo de información con sus autoridades”.

El fiscal explica que el hecho que las que atacan sean viviendas sin moradores es un asunto meditado por los delincuentes. “En entrevistas que he tenido en algunas causas con ‘lanzas’ chilenos, ellos se cercioran de que estén deshabitadas porque tienen conciencia de que eso agravaría la persecución penal”. Y agrega: “Mi sensación es que el ´lanza’ chileno le perdió el miedo a Estados Unidos. (...) Pagan una fianza y muchas veces nunca más aparecen. O, transcurridos unos meses de cumplimiento de una pena, los expulsan. Entonces, les sale barato. Nosotros hemos tenidos casos en que después de ser deportados, a los meses los encuentran de nuevo cometiendo delitos. También, obtienen documentación falsa”. Al respecto, recuerda un caso que investiga donde había funcionarios del Registro Civil chileno involucrados en la emisión de pasaportes fraudulentos: “Eran sobornados, y la mayoría de los involucrados eran ´lanzas’ internacionales”.

Las investigaciones en Chile han constatado tres formas de entrada de las mercancías. La primera es por encomiendas; la segunda, a través de un acuerdo con los compradores finales a Chile, que viajan para recibir las joyas y relojes. En la tercera, el ‘lanza internacional’ se coordina con un familiar o amigo para que se realice el ingreso clandestino.

Las joyas, a su vez, son comercializadas ilegalmente en Chile por su peso en oro, para que sean transformadas en otras alhajas. “Pero es muy excepcional que acá las vendan sin alterar la pieza”, apunta el fiscal.

El último hallazgo de joyas sustraídas son las que fueron entregadas este viernes por la Fiscalía a la Embajada de Estados Unidos en Chile. Son al menos 20 piezas que Aduanas detectó en una encomienda. Las fotografías fueron remitidas a autoridades de distintos países e hicieron match con un robo a una casa en Los Ángeles, pues su dueño había denunciado. “Tuvimos la fortuna de que uno de los relojes tenía grabado el nombre y apellido de la persona, parecido a lo que pasó con el caso de Keanu Reeves. Y a través de la cooperación con Estados Unidos, el propietario lo identificó”, señala Baeza.

Tras la entrega de las joyas, el fiscal cuenta que recibieron un correo de un funcionario de Estados Unidos destacando la coordinación y la restitución de las especies a su dueño. El mensaje aludía a que “si bien no era una persona famosa, era un ciudadano común que agradecía mucho la gestión”.

La próxima restitución de especies robadas que se coordina desde Chile es el envío de joyas a España y un reloj de lujo a Nueva Zelanda.