Denuncian ante la Generalitat la falta de climatización en una residencia de ancianos

Familiares de los ancianos que viven en la residencia Mossèn Vidal i Aunòs, en el barrio de La Bordeta de Barcelona, han presentado este martes ante el secretario de Asuntos Sociales una denuncia por la falta de climatización de las instalaciones en plena ola de calor. La asociación SOS Gent Gran denuncia que la residencia, de titularidad pública pero gestionada por un privado, no solo no cuenta con aire acondicionado, sino que la pobre instalación eléctrica impide que se conecten ventiladores y sistemas de refrigeración sin que salten los plomos. El departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y...

Familiares de los ancianos que viven en la residencia Mossèn Vidal i Aunòs, en el barrio de La Bordeta de Barcelona, han presentado este martes ante el secretario de Asuntos Sociales una denuncia por la falta de climatización de las instalaciones en plena ola de calor. La asociación SOS Gent Gran denuncia que la residencia, de titularidad pública pero gestionada por un privado, no solo no cuenta con aire acondicionado, sino que la pobre instalación eléctrica impide que se conecten ventiladores y sistemas de refrigeración sin que salten los plomos. El departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia defiende que tomó las medidas pertinentes y solucionó la avería eléctrica el lunes, dando por cerrada la incidencia. Los familiares insisten en que falta inversión por parte de la Generalitat.

La residencia Vidal i Aunòs, con más de cien usuarios, fue una de las cinco residencias en las que, hace dos años, los familiares denunciaron “malos tratos”. En esa ocasión exigían más calidad a las empresas concesionarias, que consiguieron el concurso por un precio menor al presupuesto inicial. El caso llegó al Parlament, que instó a la Generalitat a rescindir los contratos. La empresa Eulen ha asumido la gestión de forma interina hasta que en junio se le adjudicó la residencia en un nuevo contrato.

“El problema ahora no es de la empresa, es la falta de inversión. En 2018 estuvimos 13 horas sin luz, ahora no podemos poner ventiladores. Exigimos la inmediata revisión y renovación de la instalación eléctrica”, señala la portavoz, María José Carcelén. La portavoz también destaca el mal estado de las cañerías en el edificio y el desgaste de los toldos para proteger del calor. "El comedor tiene unos amplios ventanales. Como se desgastaban los toldos, optaron por poner cortinas opacas, con lo que los ancianos están ahora a oscuras", lamenta.

Mediante una resolución presentada por Catalunya en Comú, el Parlament debatirá hoy en una comisión la necesidad de aumentar la inversión en las residencias públicas.