La Semana Santa aleja el temor a un retroceso turístico

Las nevadas de las últimas semanas garantizan fuerte actividad en las comarcas de montaña, pero también en la costa

Turistas en Barcelona.CARLES RIBAS

Mar o montaña. La llegada de una Semana Santa precoz, antes de que marzo toque a su fin, abre el abanico de rumbos turísticos para pasar la Pascua. Las previsiones anticipan alta ocupación en la mayoría de destinos y alejan el fantasma de la contracción turística después de una campaña 2017 que fue de récord. Las nevadas de las últimas semanas garantizan fuerte actividad en las comarcas de montaña, pero también en la costa se prevé casi un lleno gracias a la diversificación de las propuestas y a una mutación del público.

El Patronato de Turismo de Lleida define la vigente campaña de esquí como una “temporada corta”. La prontitud con que se llega a Semana Santa reduce el calendario de días esquiables, que no depende tanto de las condiciones de la nieve y del tiempo como de la concepción mental que tiene el esquiador. La Semana Santa marca el punto de inflexión y hace descender la mirada desde las cumbres hasta la orilla del mar. Temporada corta pero intensa porque la mayoría de estaciones del Pirineo presentan unos copiosos niveles de n...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El Patronato de Turismo de Lleida define la vigente campaña de esquí como una “temporada corta”. La prontitud con que se llega a Semana Santa reduce el calendario de días esquiables, que no depende tanto de las condiciones de la nieve y del tiempo como de la concepción mental que tiene el esquiador. La Semana Santa marca el punto de inflexión y hace descender la mirada desde las cumbres hasta la orilla del mar. Temporada corta pero intensa porque la mayoría de estaciones del Pirineo presentan unos copiosos niveles de nieve desde el primer día de apertura.

En el lado más occidental del Pirineo, Baqueira Beret o Boí Taüll acumulan hasta casi tres metros de nieve en algunas zonas. El Patronato de Turismo de Lleida prevé una óptima ocupación turística desde Jueves Santo hasta el Lunes de Pascua, que se podría situar entre el 90% y la plena ocupación. La situación es parecida en la vertiente pirenaica más mediterránea, y estaciones como Vallter 2000, Masella o la Molina encaran el tramo final de campaña con las instalaciones a pleno rendimiento. La nieve ha generado un buen ritmo de reservas en hoteles próximos a las pistas de esquí y en casas rurales cercanas a puntos de interés de montaña. La nevada de este fin de semana no ha hecho más que animar las reservas con vistas al momento culminante de la Semana Santa.

En Girona, la previsión de ocupación por Semana Santa se espera que sea de hasta el 85% en algunas comarcas como la Garrotxa y el Ripollès. Según los datos de la Federación de Hostelería,que aúna más de 1.550 empresas, será un poco inferior, en torno al 75%, en la playa. Solo un 70% de la planta hotelera del litoral gerundense va a abrir. Las previsiones son desiguales en función de la zona. Sobre los establecimientos abiertos, se prevé una ocupación entre el 70% y el 75% en la Costa Brava Centro y en la Costa Brava Sur y, del 60% y el 65% en la comarca del Alt Empordà. La estancia media de los visitantes será de entre dos y tres días, tanto en litoral como en montaña. Representa un descenso ya que el año pasado en la costa la media fue de entre cuatro y cinco días. Los días con mayor afluencia serán el 30 y 31 de marzo. El 40% de los visitantes que llegarán a la provincia de Girona han reservado su alojamiento a través de touroperadores o plataformas de reserva por Internet y el resto lo han contratado de forma directa con el establecimiento. En cuanto a los precios de las habitaciones, el 70% de los encuestados no han subido precios y los que sí lo han hecho, ha sido un 4%.

Barcelona prevé una ocupación del 80%

El Gremio de Hoteles de Barcelona prevé que esta Semana Santa los establecimiento hoteleros de la capital catalana registrarán una ocupación del 80%, por debajo del 85% que se registró en el mismo periodo del año pasado. La previsión de los hoteleros hace referencia a la ocupación de los días centrales de la Semana Santa, entre el Viernes Santo y el Lunes de Pascua.

La planta hotelera barcelonesa sigue sin acabarse de recuperar del impacto de los acontecimientos políticos del último trimestre de 2017, que provocaron numerosas cancelaciones y, especialmente, un descenso de reservas a corto y medio plazo.

En cuanto a los apartamentos turísticos, Apartur prevé una ocupación del 79,2%, manteniéndose en la línea del año pasado, con una estancia media de cuatro días a un precio de 51 euros por persona y noche, siendo las principales nacionalidades de visitantes Reino Unido, Estados Unidos y Canadá.

En Tarragona, destino muy ligado al sol y la playa, una Semana Santa prematura solía representar escasez de reservas. “Unos años atrás nos preocupaba que la Semana Santa cayera muy pronto en el calendario”, indica Eduard Farriol, presidente de la Federación Empresarial de Hostelería y Turismo de la provincia de Tarragona (FEHT), y señala que una Pascua adelantada, además de potenciar la montaña frente a la playa, incrementa las posibilidades de tener condiciones climatológicas adversas. “Ahora, gracias a las múltiples actividades deportivas que se celebran en la Costa Daurada podemos preparar, con antelación, una Semana Santa con cifras de ocupación óptimas”.

Turismo deportivo

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

La organización de varios torneos deportivos atrae a más de 20.000 niños y jóvenes al triángulo formado por Salou, Cambrils y la Pineda. El Mundialito de fútbol base, con 300 equipos de 50 países, desplaza a 5.000 participantes y la Mare Nostrum Cup reúne a otros 220 equipos. Han quedado sepultadas las iniciativas turísticas como el Saloufest, con el que cerca de 10.000 estudiantes británicos desembarcaban para pasar días de juerga y alcohol y generar un impacto de cinco millones de euros. Ahora se ha potenciado el concepto de Costa Daurada como destino turístico deportivo y familiar. “Va a ser una buena Semana Santa”, indica Farriol. Y concreta: “Ya podemos garantizar que la ocupación se situará alrededor del 85% de media”.En las Tierras del Ebro, la actividad se va a canalizar a través de los alojamientos rurales. Se rozará la plena ocupación entre el Jueves Santo y el Lunes de Pascua.

 

Más información

Archivado En