Ivana Guinot asume el mando del aeropuerto de Castellón con el reto de diversificar las vías de negocio

Ivana Guinot, actual directora de operaciones y mantenimiento del aeropuerto de Castellón, asumirá a partir del 1 de diciembre la dirección general de la infraestructura aeroportuaria. Es el tercer cambio de mando en la instalación desde su apertura en diciembre de 2014. Guinot releva al austriaco Alexander Schroll, actual director general de Edeis, la compañía francesa que explota la base, quien deja su cargo este mismo jueves. El primero fue Alain Russel, de SNC Lavalin. Guinot, ingeniera aeronáutica de Burriana (Castellón), ha anunciado que será la nueva directora del aeropuerto este miérco...

Ivana Guinot, actual directora de operaciones y mantenimiento del aeropuerto de Castellón, asumirá a partir del 1 de diciembre la dirección general de la infraestructura aeroportuaria. Es el tercer cambio de mando en la instalación desde su apertura en diciembre de 2014. Guinot releva al austriaco Alexander Schroll, actual director general de Edeis, la compañía francesa que explota la base, quien deja su cargo este mismo jueves. El primero fue Alain Russel, de SNC Lavalin. Guinot, ingeniera aeronáutica de Burriana (Castellón), ha anunciado que será la nueva directora del aeropuerto este miércoles, durante la rueda de presentación de un nuevo proyecto didáctico para potenciar las visitas escolares a la instalación de Vilanova-Belloch que, según ha avanzado, cerrará el ejercicio con 142.000 pasajeros, un 28% más que en 2016.

Asegura que afronta “un reto un poco complicado, pero estamos acostumbrados” y que su objetivo “a muy corto plazo” es la conversión de la certificación del aeropuerto a la regulación de la Unión Europea. Un trámite que espera alcanzar el próximo 5 de diciembre y que aprovechará para que en la instalación puedan operar aeronaves de mayor categoría para vuelos chárter. La infraestructura aeroportuaria castellonense es de clase 4-D, y tras esta adaptación normativa podrán aterrizar aviones de clase 4-E, “de 65 metros de extremo a extremo de ala”, ha indicado por su parte el director general de Aerocas, Joan Serafí Bernat. Con este paso, según han expresado los responsables del aeropuerto, la base abarcará “prácticamente todo el abanico de aviones comerciales”.

Una vez logrado este certificado, el siguiente paso que se marca Guinot en su nueva etapa como directora general –un cargo que combinará como máxima responsable de operaciones y mantenimiento en funciones, hasta que sea nombrado su sucesor- es “consolidar lo que ya tenemos y buscar nuevos caminos para desarrollar el aeropuerto desde un punto de vista eficiente y sostenible”. Consciente de que Castellón “es una gran provincia, pero necesita su tiempo”, Ivana Guinot apuesta por metas guiadas por el “poco a poco”. Metas en las que sí figura “la diversificación del negocio que pueda haber en torno al aeropuerto, aunque sin perder de vista que queremos que, ante todo, siga siendo una infraestructura para pasajeros”.

En este sentido, ha anunciado la apuesta de la escuela de pilotos Panamedia, que construirá en la base de Vilanova-Belloch un hangar para el mantenimiento de su propia flota, integrada por una veintena de avionetas.

Negociaciones con Ryanair y Blue Air

Entre los frentes con los que le tocará lidiar figuran las negociaciones con Rynair y Blue Air para amarrar los vuelos a Bristol y Bucarest, respectivamente. La aerolínea irlandesa de bajo coste ha anunciado este mismo mes la apertura de ruta a Bristol desde Valencia, con lo que quedarían en el aire los vuelos desde Castellón a la ciudad británica, operativos de marzo a octubre. Al respecto, Guinot ha dicho que continúan las conversaciones con Ryanair, que atribuye el anuncio de un posible traslado para esta ruta “a que el precio del billete no cubre sus expectativas, pero sí el número de pasajeros”. Por su parte, Blue Air dejará de comercializar vuelos a Castellón a partir del 7 de enero. “También aquí estamos en conversaciones para que los retomen a partir de marzo”, ha expresado.

A las ahora inciertas rutas a Bristol y Bucarest la base castellonense suma otras tres líneas regulares a Londres, Sofía y la ciudad polaca de Poznan. Esta última está operativa desde el pasado 1 de noviembre con la previsión de atraer a 30.000 viajeros al año. La instalación contabiliza desde enero de 2017 hasta la fecha casi 136.000 pasajeros, lo que supone un incremento de un 28% respecto a todo el ejercicio de 2016.