El Síndic: “La crisis ha normalizado situaciones de riesgo en la infancia”

Ribó considera que la congestión de los Servicios Sociales impidió seguir el caso de maltrato contra un bebé el verano pasado

Varapalo del Síndic de Greuges al Ayuntamiento de Barcelona por el caso de un bebé de 28 días golpeado por sus padres y que falleció en el Hospital de Vall d'Hebron en julio del año pasado. Ribó, que abrió una investigación de oficio, considera que la congestión de los Servicios Sociales impidió que los jóvenes padres, de 20 años de edad, tuvieran el acompañamiento necesario para abordar la paternidad. El Síndic cree que "la crisis ha normalizado situaciones de riesgo" en la infancia.

El menor fue ingr...

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Varapalo del Síndic de Greuges al Ayuntamiento de Barcelona por el caso de un bebé de 28 días golpeado por sus padres y que falleció en el Hospital de Vall d'Hebron en julio del año pasado. Ribó, que abrió una investigación de oficio, considera que la congestión de los Servicios Sociales impidió que los jóvenes padres, de 20 años de edad, tuvieran el acompañamiento necesario para abordar la paternidad. El Síndic cree que "la crisis ha normalizado situaciones de riesgo" en la infancia.

El menor fue ingresado al hospital con cuatro costillas rotas, una fractura en el fémur y diversos hematomas en la cabeza. Los padres habían llamado al teléfono de emergencias para reportar que su hijo no respiraba. El grave estado del bebé hizo que la policía detuviera a los progenitores.

El Síndic ha explicado en su resolución que las actuaciones de las diferentes administraciones "evidencian carencias en los mecanismos que han de garantizar la protección de los infantes", especialmente de los recién nacidos. Ribó considera que el CUAP Casernes debió haber revisado al menor antes de derivar la familia al hospital, días antes de la llamada al número de emergencia, pues se habría podido detectar el abuso. 

La parte más dura del análisis del defensor del pueblo catalán, sin embargo, se la lleva el Ayuntamiento. "La falta de capacidades parentales obligaba a los Servicios Sociales, en coordinación con los recursos de apoyo familiar disponibles a planificar una intervención con un seguimiento especialmente intensivo", dice el Síndic. 

"Las limitaciones con las que trabajan muchos profesionales de los Servicios Sociales y la presión asistencial que han de soportar, junto con la complejidad de los casos que han de afrontar, acaban provocando una cierta normalización de las situaciones de riesgo que padecen muchos infantes, como si el riesgo fuera menos riesgo a causa de su prevalencia entre los casos que gestionan y de la existencia de situaciones de más gravedad", apunta Ribó.

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