“Como alguien se dé cuenta, flipa”

Los pinchazos del 'caso Pokémon' revelan las sospechas por la operación de Finca do Espiño

“Esto es un pelotazo puro y duro”, denunció el exalcalde socialista de Santiago Xosé Sánchez Bugallo cuando su sucesor, Gerardo Conde Roa, anunció la recalificación de la Finca do Espiño. Era octubre de 2011 y el nuevo regidor solo llevaba tres meses en el cargo. Lo que Sánchez Bugallo afirmó en público podría interpretarse como un signo de despecho en un hombre que acababa de perder la alcaldía tras gobernar durante más de 12 años en la capital de Galicia. Pero los propios miembros del gobierno municipal del PP mantenían en privado una opinión no muy distinta. E incluso utilizaban idéntico té...

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“Esto es un pelotazo puro y duro”, denunció el exalcalde socialista de Santiago Xosé Sánchez Bugallo cuando su sucesor, Gerardo Conde Roa, anunció la recalificación de la Finca do Espiño. Era octubre de 2011 y el nuevo regidor solo llevaba tres meses en el cargo. Lo que Sánchez Bugallo afirmó en público podría interpretarse como un signo de despecho en un hombre que acababa de perder la alcaldía tras gobernar durante más de 12 años en la capital de Galicia. Pero los propios miembros del gobierno municipal del PP mantenían en privado una opinión no muy distinta. E incluso utilizaban idéntico término.

 Las extensas conversaciones telefónicas entre concejales interceptadas por los investigadores de la Operación Pokémon, bajo órdenes de la juez de Lugo Pilar de Lara, muestran que los compañeros de Conde Roa veían algo turbio en el desmedido interés que el entonces alcalde mostraba por la operación de la Finca do Espiño. La más explícita fue la entonces concejal, ahora diputada autonómica y hasta el pasado junio portavoz del PP gallego, Paula Prado, quien en una de las conversaciones privadas confiesa: “Lo poco que hace Gerardo huele a pelotazo urbanístico”. Un hermano de la diputada, el abogado Luciano Prado, muy conectado con el PP local, deja caer en otra charla a propósito de Conde Roa y la operación de Finca do Espiño: “A lo mejor los 60 millones que se va a llevar de ahí no van a ser gratis”.

El entonces jefe de gabinete del alcalde, Ángel Espadas, hace otra sorprendente revelación hablando con Paula Prado: el jefe de planeamiento urbanístico municipal fue nombrado por sugerencia de la promotora de Finca do Espiño. “Como alguien se dé cuenta, flipa”, llega a exclamar Espadas.

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