El apoyo de Urkullu a los verificadores aviva las reticencias de Rajoy a su plan

El ‘lehendakari’ da un paso al frente, muy molesto por el desinterés de Moncloa

Bilbao -
El portavoz de Amaiur, Xabier Mikel Errekondo, a su llegada este lunes a la rueda de prensa en San Sebastián.Javier Etxezarreta (EFE)

Iñigo Urkullu y Mariano Rajoy están hoy bastante más alejados que ayer respecto al proceso de paz en Euskadi. La intencionada fotografía del lehendakari respaldando en Madrid a tres de los verificadores internacionales antes de declarar en la Audiencia Nacional no ha gustado “nada” en La Moncloa porque se considera “innecesaria”. Sin embargo, Urkullu ha querido trasladar con esta imagen un nítido mensaje al presidente del Gobierno central de su evidente malestar por la distancia q...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Iñigo Urkullu y Mariano Rajoy están hoy bastante más alejados que ayer respecto al proceso de paz en Euskadi. La intencionada fotografía del lehendakari respaldando en Madrid a tres de los verificadores internacionales antes de declarar en la Audiencia Nacional no ha gustado “nada” en La Moncloa porque se considera “innecesaria”. Sin embargo, Urkullu ha querido trasladar con esta imagen un nítido mensaje al presidente del Gobierno central de su evidente malestar por la distancia que este ha adoptado a partir de los movimientos de los presos de ETA y de una manera especial con la citación judicial a los verificadores al día siguiente de conocerse el principio del desarme.

En el PNV se defiende: “No sabemos por qué les tiene que sorprender si ya saben cuál es la posición del lehendakari y se la ha dicho cara a cara”, destacó ayer un diputado jeltzale. Con su paso al frente, Urkullu ha vuelto a dividir al resto de la clase política en un tema de imposible consenso, agravado además por la decisión de los etarras de recuperar el material inventariado fuera de uso. De un lado, el lehendakari recibe el respaldo de la izquierda abertzale, mientras que PP y UPyD le lanzaron duras descalificaciones, hasta el punto de que Rosa Díez pidió su dimisión.

Cospedal ve “bochornoso”  y “lamentable” el papel de Urkullu

Como era de esperar, el gesto de Urkullu ha sido bien recibido en EH Bildu. Uno de sus portavoces, Pello Urizar, lo consideró ayer “adecuado” en Info7, después de recordar que así se lo habían solicitado. Para el líder de EA, el lehendakari “ha hecho lo debido”, añadió. Incluso el presidente de Sortu, Hasier Arraiz, dio un paso más al pedir a Urkullu que “lidere” una estrategia compartida con los partidos que reconocen a los verificadores y presionar a Rajoy en su implicación en el desarme.

El PNV, además, llevó hasta el Parlamento europeo su denuncia por el trato judicial a los verificadores. Pero es en Madrid donde Urkullu ha recibido duras críticas, sobre todo desde la cúspide del PP. La secretaria general de este partido, María Dolores de Cospedal, calificó ayer de “lamentable” y “bochornoso” el papel del lehendakari, por avalar a los verificadores ya que, a su juicio, los hechos que se han producido este fin de semana suponen una “tomadura de pelo” y un “lamentable espectáculo”.

Desde estas descalificaciones, cualquier aproximación siquiera mínima a la esencia del plan entregado por Urkullu a Rajoy se antoja ahora mismo imposible. “Nunca se sabe lo que puede pasar, pero hoy por hoy no se esperan movimientos de ningún lado, aunque de Rajoy yo no espero nada desde hace tiempo”, añadía el diputado del PNV. Este desafecto que viene mostrando de manera ostensible el Gobierno Rajoy constituye, sin duda, el principal motivo del malestar de Urkullu, que ve así ninguneados sus esfuerzos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO
Lokarri suspende su acto en Aiete porque detecta “el ambiente enrarecido”

Sin embargo, el lehendakari encontró ayer un eco favorable en la izquierda abertzale a la petición que viene reiterando sobre el impulso a la denominada vía Nanclares (Zaballa). Así, Hasier Arraiz, apostó en Radio Euskadi por explorar esta alternativa para “la resolución” del problema de los presos de ETA. El presidente de Sortu admitió que este colectivo está estudiando cómo solicitar beneficios penitenciarios de forma individualizada.

Mientras, en amplios sectores de Euskadi queda la desazón porque después de los últimos episodios en torno a los verificadores se aleja todavía más el punto de contacto entre los Gobiernos vasco y central, a expensas de los cruces dialécticos que se producirán a partir de hoy en el Congreso. Lokarri, de hecho, ha entendido que, desde luego, no se dan las condiciones necesarias para abordar, como preveía, un foro encaminado a “impulsar el proceso de paz”, anunciado para mañana en el Palacio de Aiete, en San Sebastián, con la participación entre otros del exjefe de Gabinete de Tony Blair, Jonathan Powell y el presidente del Sinn Fein, Gerry Adams. Esta red social detecta un “clima enrarecido”. 

El proceso del paz, en el Congreso

Amaiur y PNV esperan que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aluda hoy al final de la violencia en Euskadi durante su discurso de apertura del debate sobre el estado de la nación. Y si no lo hiciera, ambos grupos ya han dispuesto su estrategia para que el proceso disponga de un hueco entre los temas de referencia.

El portavoz de Amaiur, Xabier Mikel Errekondo, considera prioritario abordar el proceso de paz sobre todo por "haber recibido una aportación de calado tras el anuncio de ETA de inventariar, sellar y dejar fuera de uso operativo su armamento", dijo este lunes  en San Sebastián.

El propósito abertzale es implicar al presidente del Gobierno central en un "compromiso para dar pasos para avanzar en el desarme". Amaiur parte de la base de que el anuncio de ETA de dejar fuera de uso parte de su arsenal ha "desbordado" al PP, que continúa instalado en el "inmovilismo y el bloqueo".

En el caso del PNV, su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, también asegura que "no dejará pasar la ocasión" de plantear a Rajoy su compromiso con la nueva situación política en Euskadi. "No voy a dejar de sacarlos", admitió  aunque con escepticismo sobre la respuesta que obtenga.

Archivado En