La crisis socialista ourensana se enquista sin negociar la sucesión del exalcalde
La crisis de los socialistas ourensanos se enquista
No hay acuerdo entre las dos partes del fraccionado grupo municipal del PSOE para elegir candidato a alcalde tras la dimisión de Francisco Rodríguez, imputado en la Operación Pokémon. En realidad, ni siquiera hay negociaciones, pese a que va corriendo el plazo de los 10 días para proponer candidato al pleno antes de que gobierne la lista más votada (la del PP).
De momento,...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
No hay acuerdo entre las dos partes del fraccionado grupo municipal del PSOE para elegir candidato a alcalde tras la dimisión de Francisco Rodríguez, imputado en la Operación Pokémon. En realidad, ni siquiera hay negociaciones, pese a que va corriendo el plazo de los 10 días para proponer candidato al pleno antes de que gobierne la lista más votada (la del PP).
De momento, la alcaldesa en funciones, Marga Martín, mandó un primer aviso a los concejales fieles a la ejecutiva gallega del partido (los llamados pachistas), al dejar fuera de la junta de gobierno al representante de éstos, el veterano Antonio Penín —junto con otra concejala—- en la redistribución que hizo el lunes para cubrir las vacantes de los nacionalistas, que ya se han ido a la oposición.
Penín es, precisamente, el edil sobre el que pivota el grupo fiel a la ejecutiva gallega y el representante de este sector de cinco ediles que debe llegar a acuerdo con los seis del núcleo del dimitido Francisco Rodríguez, que lidera el segundo teniente de alcalde, Agustín Fernández. Todo hacía ver que se dirimiría entre ambos la alcaldía pero, a la vista de los acontecimientos, todo apunta a que se “pudrirá el tiempo” antes de que lleguen a sentarse siquiera a negociar. La ausencia de Penín en la junta se gobierno no ha sido el único recado que ha enviado el sector del exalcalde. Así lo entienden los pachistas después de comprobar cómo se han ido convocado y desconvocando las reuniones entre los dos representantes. “Citan a Penín para un día y al llegar allí anulan la reunión porque siempre hay alguien que se encuentra mal”, apunta un representante de los afines a Vázquez.
En este sector dan por sentado que la apuesta de Rodríguez, en la sombra, para sucederlo en la alcaldía es Marga Martín. Mientras tanto, una secretaria convoca y anula reuniones con el representante de los otros concejales. “Nosotros estamos maniatados”, sostienen los de Pachi Vázquez. Muy molestos con la actitud de sus compañeros de grupo, con los que esperaban negociar, y creen que no podrán, insisten en que solo acatarán la “imposición” de un regidor fiel a Rodríguez “si toma esa decisión la ejecutiva gallega”. “Que se moje la ejecutiva, que fue la que eligió al exalcalde” para encabezar la lista, sostienen.
En el sector fiel a Francisco Rodríguez el mutismo sobre la negociación y su candidato es total mientras la alcaldesa en funciones intenta dar una pátina de normalidad a la actividad municipal tras dos semanas de convulsión institucional y política.De momento ha convocado el pleno ordinario para el viernes y firmado la convocatoria del consejo rector del Consello Municipal de Deportes, para el día anterior, además de una junta de gobierno —en la que su grupo es mayoritario— para hoy mismo.