Negreira aprueba en solitario el cambio del plan urbanístico de A Coruña

La Unesco tendrá que pronunciarse sobre edificios cerca de la Torre de Hércules

Perfil urbano de la ciudad de A CoruñaXURXO LOBATO

El gobierno municipal de A Coruña, del Partido Popular, admite que la Dirección de Patrimonio de la Xunta y la Unesco aún no han dado su imprescindible visto bueno a su propuesta de permitir la construcción de dos edificios de considerable altura en las cercanías de la Torre de Hércules. Es uno de los cambios más polémicos introducidos por el equipo del alcalde, Carlos Negreira, en el futuro Plan Xeral de Ordenación Municipal de la ciudad, aprobado ayer de forma provisional con los únicos votos del PP. La oposición habla de “ladrillazo” por el aumento de edificabilidad (un 30% más de viviendas...

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El gobierno municipal de A Coruña, del Partido Popular, admite que la Dirección de Patrimonio de la Xunta y la Unesco aún no han dado su imprescindible visto bueno a su propuesta de permitir la construcción de dos edificios de considerable altura en las cercanías de la Torre de Hércules. Es uno de los cambios más polémicos introducidos por el equipo del alcalde, Carlos Negreira, en el futuro Plan Xeral de Ordenación Municipal de la ciudad, aprobado ayer de forma provisional con los únicos votos del PP. La oposición habla de “ladrillazo” por el aumento de edificabilidad (un 30% más de viviendas, 24.900 nuevas), de “regreso a la burbuja inmobiliaria y barra libre para primar los intereses de unos pocos”, acusó la socialista Mar Barcón, o de “regalo a los promotores de siempre”, censuró la nacionalista Ermitas Valencia.

El “oscurantismo” por presentar y aprobar en apenas una semana y en pleno agosto la nueva norma urbanística de la ciudad también enfadó a los grupos de la oposición. El gobierno de Negreira ni siquiera accedió a abrir un nuevo periodo de exposición al público ni de presentación de alegaciones a un documento que ahora, para su aprobación definitiva, deberá primero ser aceptado por la Xunta.

El edil de Esquerda Unida, César Santiso, no acudió al pleno de ayer en señal de protesta por esta celeridad del PP en tramitar este complejo documento que revisa el aprobado inicialmente en diciembre de 2009, cuando gobernaban en coalición socialistas y nacionalistas. Solo se cambió, y de acuerdo con el autor de aquel primer plan, el arquitecto catalán Joan Busquets, un 10%, sostiene el edil de Urbanismo, Martín Fernández Prado. “Lo poco que han cambiado lo cambia todo”, replicó Barcón, que era la responsable de esa área cuando el bipartito encargó la redacción del plan

PSOE y BNG votan en contra mientras EU ni siquiera asistió el pleno

La sombra de quien fue alcalde 23 años, el socialista Francisco Vázquez, y su cuestionado modelo urbanístico volvió a la palestra. “Con este plan pasamos página al urbanismo de 28 años”, aseguró Fernández Prado que incluye el último mandato del bipartito PSOE-BNG. “Es un plan continuista con el modelo fracasado de Paco Vázquez”, censuró el Bloque.

El proyecto de construir “cinco mamotretos”, según la definición del PP, en el entorno de la Torre, en la Agra de San Amaro, data precisamente del inicio de esta década, cuando el PSOE del exregidor gozaba de mayoría absoluta. El BNG siempre se opuso. Y el titulo de Patrimonio de la Humanidad otorgado al faro en 2009 llevó al entonces gobierno bipartito a anular el proyecto. Pero para compensar a los promotores, que reclaman en los tribunales indemnizaciones millonarias, el PP pretende reducir de cinco a dos los edificios y alejarlos a Adormideras, la península edificada anterior a la que alberga el monumento. Vecinos de ese barrio rodeado por el mar interrumpieron ayer el pleno a gritos de “No a la especulación”. Fueron desalojados por la policía local.

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Fernández Prado reconoció que el proyecto para solucionar “la herencia incómoda” dejada por Vázquez es solo “una propuesta con directrices” al plan especial de protección de la Torre. “No ordena nada”, ni tampoco “tocará las vistas” del faro, insistió. Y admitió que serán necesarios los informes favorables tanto de Patrimonio como de la Unesco.

No es el único cambio introducido por el PP para construir edificaciones en altura, incrementando el número de plantas inicialmente previstas, en lugares privilegiados de la fachada marítima de A Coruña. Como en los céntricos muelles del puerto cuando se trasladen los tráficos petroleros a la nueva dársena exterior de Punta Langosteira. O el también muy cuestionado proyecto denominado As Percebeiras, en Labañou, en el lado opuesto de la bahía a la Torre de Hércules.

La previsión de vivienda de protección oficial es otra gran incógnita y polémica de este plan. El PP asegura que mantiene que el 40% de la edificación nueva en el conjunto de la ciudad (14.000 viviendas) será de precio tasado. Pero concentra ese tipo de pisos en cinco polígonos considerados los menos privilegiados y céntricos. Y nada quiso aclarar el edil de Urbanismo sobre la entrada en vigor, dentro de 15 días, de la nueva Ley de Vivenda de Galicia: reduce al 8% el mínimo de reserva para pisos de protección oficial.

El teniente de alcalde de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Martín Fernández Prado ha informado, en rueda de prensa, que el Ayuntamiento de A Coruña enviará esta semana a la Xunta de Galicia el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) para su aprobación definitiva, tras la aprobación provisional del documento este lunes en pleno. El edil popular ha señalado que el Consistorio informará a los vecinos "barrio por barrio" sobre el contenido del documento y organizará jornadas con todos los agentes sociales de la ciudad.

El Plan General aprobado en pleno, destaca Fernández Prado, mejora "enormemente" tanto el documento vigente desde 1998 como la revisión inicial del bipartito y ha explicado que el planeamiento se remitirá esta semana a la Xunta, que tendrá tres meses para analizarlo y decidir si le da el visto bueno. En caso de que el Gobierno gallego solicite alguna aclaración, el Ayuntamiento podrá incluir las modificaciones oportunas en un texto refundido y, una vez cuente con la aprobación definitiva de la Xunta, el Plan General entrará en vigor.

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