El PSE y los nacionalistas piden legalizar Batasuna y el acercamiento de presos
Los socialistas suman en las Juntas de Gipuzkoa sus votos a Bildu, PNV y Aralar para aprobar un texto que defiende el diálogo "sin exclusiones"
El PSE-EE sumó ayer sus votos a Bildu, PNV y Aralar para aprobar en las Juntas Generales de Gipuzkoa una iniciativa que aboga por la legalización de Batasuna, el diálogo “entre diferentes y sin exclusiones” y el traslado de los presos de ETA a cárceles cercanas a sus entornos familiares. El portavoz del PP, Juan Carlos Cano, única formación que votó en contra de la moción, aseguró en un comunicado que se trata de “un error monumental ubicar hoy la política penitenciaria en el centro del debate político porque fortalece a quienes se niegan a desaparecer”.
El texto aprobado ratifica el co...
El PSE-EE sumó ayer sus votos a Bildu, PNV y Aralar para aprobar en las Juntas Generales de Gipuzkoa una iniciativa que aboga por la legalización de Batasuna, el diálogo “entre diferentes y sin exclusiones” y el traslado de los presos de ETA a cárceles cercanas a sus entornos familiares. El portavoz del PP, Juan Carlos Cano, única formación que votó en contra de la moción, aseguró en un comunicado que se trata de “un error monumental ubicar hoy la política penitenciaria en el centro del debate político porque fortalece a quienes se niegan a desaparecer”.
El texto aprobado ratifica el compromiso al que el Parlamento dio el visto bueno el 6 de octubre de 2006, entonces con los votos en contra del PSE-EE y el PP, en el que además del acercamiento de los reclusos, se pide el respeto a los derechos fundamentales de todos los presos vascos y la transferencia a Euskadi de la competencia de prisiones, informó Efe.
Se reclama asimismo excarcelar a los presos enfermos y de quienes hayan cumplido la mayor parte de la condena. Esta enmienda, transaccionada con PNV y PSE tras una propuesta de resolución presentada por Bildu y Aralar sobre el cambio de política penitenciaria.
En la misma sesión, Bildu y el PNV mantuvieron una encendida discusión cuando se trató la aprobación de la cuenta general de Gipuzkoa de 2009, sometida a una fiscalización por el Tribunal de Cuentas y en la que se revelaron millonarios desvíos presupuestarios en la construcción de carreteras y la condonación de sanciones fiscales a la Real Sociedad por 6,4 millones, además de una subvención de seis millones al club de fútbol. El PNV aseguró que todas las decisiones estuvieron fundamentadas en informes técnicos y que dejaron las cuentas saneadas a sus sucesores. Bildu criticó que solo hicieran caso a los “técnicos de las constructoras”.