Manifestación en L’Ametlla de Mar contra el parque eólico marino
La protesta congregó a unas 500 personas entre vecinos, políticos, pescadores y empresarios de la zona
Unas 500 personas se han manifestado hoy en L’Ametlla de Mar (Baix Ebre) para rechazar el proyecto Zèfir, que prevé construir frente a la costa del municipio el primer parque eólico marino experimental de España. La protesta, convocada por la Coordinadora Antiparque Eólico, congregó a vecinos, políticos, pescadores y empresarios de la zona. Los manifestantes recorrieron el paseo Marítim de L’Ametlla hasta la playa Pixavaques, donde algunos se zambulleron en el agua con pancartas reivindicativas.
El parque, impulsado por el Instituto de Investigación en Energía de Cataluña, tiene el apo...
Unas 500 personas se han manifestado hoy en L’Ametlla de Mar (Baix Ebre) para rechazar el proyecto Zèfir, que prevé construir frente a la costa del municipio el primer parque eólico marino experimental de España. La protesta, convocada por la Coordinadora Antiparque Eólico, congregó a vecinos, políticos, pescadores y empresarios de la zona. Los manifestantes recorrieron el paseo Marítim de L’Ametlla hasta la playa Pixavaques, donde algunos se zambulleron en el agua con pancartas reivindicativas.
El parque, impulsado por el Instituto de Investigación en Energía de Cataluña, tiene el apoyo de la Generalitat y se encuentra en fase de información pública. El proyecto Zèfir se ubicaría entre la urbanización Les Tres Cales y Cala Nova mar adentro. Si se lleva a cabo, en una primera fase se instalarán cuatro aerogeneradores a menos de tres kilómetros de la playa y cada molino sobresaldrá 195 metros del nivel del agua con una potencia de 20 MW. En una segunda fase se instalarán a 30 kilómetros mar adentro hasta ocho molinos más, que duplicarán la potencia de los primeros.
La coordinadora ha presentado alegaciones al proyecto ante el Servicio de Costas y todos los grupos del Ayuntamiento de L’Ametlla de Mar, gobernado por CiU, exigen a la Generalitat que retire el plan porque, sostienen, dañará los dos pilares económicos del municipio: el turismo y la pesca.