El equipo del ultraderechista Milei se retracta de su denuncia de “fraude colosal”

El candidato extremista a la Presidencia de Argentina, Javier Milei, ha tardado 24 horas en desdecirse de la denuncia de “fraude colosal” que su equipo presentó la víspera y que apuntaba un supuesto robo de votos por parte de la Gendarmería, nada menos, en la primera vuelta electoral para perjudicarle y favorecer a su rival. La retractación ocurre a dos días de que el electorado decida si entrega el timón para los próximos cuatro años al ultraderechista Milei o al peronista Sergio Massa. Los apoderados del partido La Libertad Avanza estaban convocados este viernes en el juzgado por un fiscal electoral para ratificar la denuncia interpuesta el jueves —la primera oficial tras varias que solo fueron a los medios— y presentar las pruebas en su poder, informa el diario La Nación.

Karina Milei, hermana del candidato y jefa de su estrategia electoral, ni se presentó con el argumento de que anoche estuvo en Córdoba en el cierre de campaña. Y el otro apoderado declaró allí que en realidad “no se trató de una denuncia sino de una presentación efectuada con el objetivo de que se extremen los recaudos en el traslado de urnas”. El candidato y su equipo pretenden desplegar todo un ejército de apoderados del partido en miles de mesas electorales para fiscalizar la votación y el recuento.

El resultado de estas maniobras, denuncia va, denuncia viene, sea formal o no, es que el supuesto fraude está en el centro de la recta final a la elección aun cuando en cuatro décadas de democracia no ha habido ningún caso relevante de irregularidades en el proceso de votación en Argentina. Tanto Donald Trump, en Estados Unidos, con Jair Bolsonaro en Brasil, hicieron campaña sembrando dudas sobre el sistema de votación y, al caer derrotados, ambos intentaron agitar el fantasma de que les habían robado las elecciones. En el país vecino, ese fue el argumento esgrimido por miles de bolsonaristas para tomar al asalto las sedes de los tres poderes el pasado enero.

Karina Milei hizo llegar el jueves a una jueza electoral un escrito en el que detallaba el presunto sistema usado por la Gendarmería para perpetrar el fraude. Afirmaba la denuncia que los uniformados cambiaron papeletas y adulteraron las actas para beneficiar a Sergio Massa en la primera vuelta, hace un mes. El candidato oficialista dio entonces la sorpresa al sacar un 37% frente al 30% de su adversario, que iba por delante en las encuestas.

El apoderado del partido que este viernes fue a desdecirse ante el tribunal explicó en qué se basó la denuncia presentada ante la justicia electoral. “La presentación se efectuó en virtud de comentarios en redes sociales y algunas notas periodísticas y testimonios recabados personalmente que hacían referencia a los hechos puestos en conocimiento” de las autoridades.

Las encuestas dibujan un panorama reñidísimo para el recuento del viernes por la noche. Prácticamente todas dan un empate técnico y el promedio de las principales ofrece una ligera ventaja a Milei.

Los colegios electorales cerrarán el domingo a las seis de la tarde. En Argentina las encuestas a pie de urna están prohibidas y los primeros resultados oficiales se deben conocer a partir de las nueve de la noche. El recuento dominical es provisional; el definitivo se realiza después.