La Fábrica de ‘jingles’: cuando Argentina se toma con humor la campaña presidencial
Cientos de usuarios crearon canciones para los precandidatos que este domingo se presentan a las elecciones primarias. Políticos de izquierda y derecha se hicieron eco
Tres humoristas y militantes políticos lanzaron una consigna en medio de la campaña electoral argentina: propusieron a los usuarios que los siguen en su programa de streaming grabar jingles para los candidatos. Les llegaron cientos de melodías modificadas. Hasta el economista libertario Javier Milei, en las antípodas de los tres, coreó la canción que un usuario creó para él. La melodía era la de Provócame, de C...
Tres humoristas y militantes políticos lanzaron una consigna en medio de la campaña electoral argentina: propusieron a los usuarios que los siguen en su programa de streaming grabar jingles para los candidatos. Les llegaron cientos de melodías modificadas. Hasta el economista libertario Javier Milei, en las antípodas de los tres, coreó la canción que un usuario creó para él. La melodía era la de Provócame, de Chayanne, pero la letra estaba modificada: “Votalo en agosto, votalo en octubre, porque estoy harto de Peróoon”. De la izquierda y de la derecha se hicieron eco de las canciones. La Fábrica de jingles, como los tres llamaron el segmento, se convirtió en un fenómeno de humor político en una de las elecciones más inciertas del país.
“En un momento en que la Argentina prima la apatía, baja la participación electoral, sube el voto en blanco, en Tres Estrellas generamos un espacio que produce el efecto contrario: ¡ganas de votar a todos!”, dijo en el inicio de una de las transmisiones en vivo Pedro Rosemblat, que conduce el programa Tres Estrellas con Ivana Szerman y Marcos Aramburu. En el marco de ese programa surgió el segmento de canciones de campaña. Este jueves, hicieron la última transmisión en vivo de la Fábrica de jingles antes de las primarias del domingo. En 24 horas, los habían visto casi 90.000 personas en YouTube, un público que según sus métricas tienen entre 18 y 40 años.
El segmento, que se transmite por la plataforma digital Gelatina, creada por Rosemblat en 2022, resultó tan exitoso que candidatos de todo el espectro político retomaron las canciones. Rosemblat contó en una entrevista que incluso partidos políticos les mandaron jingles “como si fueran caseros”. “Pero se les notaba. No tenían ni corazón ni alma, y carecían de picaresca. Los que manda la gente tienen poesía”, contó el conductor al diario Perfil. Se trata, explicó en otra entrevista, de “contenido político colaborativo”. “Son buenísimos en términos estéticos, mucho mejores que los de las campañas oficiales, y tienen niveles zarpados [muy buenos] de interpretación y expresión de la realidad política”, dijo a la revista Rolling Stone.
Uno de los precandidatos que más jingles inspiró es el dirigente social peronista Juan Grabois, que disputará la interna de Unión por la Patria con Sergio Massa. Grabois los visitó en el programa y escuchó en vivo la letra de dos canciones escritas para él. “Voy a tomar por vos otro trago para olvidar que la Jefa lo eligió a él, que fue un facho neoliberal”, decía la reversión de El satánico Dr. Cadillac, de Los Fabulosos Cadillacs. La “Jefa” era la vicepresidenta Cristina Kirchner y “él” era Sergio Massa, designado precandidato a último momento por la alianza peronista Unión por la Patria. Grabois aplaudió e hizo una salvedad, con humor: “¡No lo eligió! Es mentira, nos eligió a nosotros. Lo que pasa es que todavía no lo puede decir”.
Milei es otro de los que más canciones recibe. Una de las últimas que enviaron para el precandidato de ultraderecha fue una versión de Hasta siempre, Comandante, del cubano Carlos Puebla, que en su versión original glorifica la figura del Che Guevara. “Aprendimos a quererte pese a tu baja estatura. No importa la desmesura ni tu doctrina incoherente. Así, cantamos al brillo y a la pura rebeldía de tu peluca bravía. Che, Milei, nuestro caudillo”, arranca el jingle. Rosemblat, Szerman y Aramburu aplaudieron de pie la creación: “La creatividad popular del pueblo argentino se expresa así”.
Rosemblat, que tiene 33 años, contó en un podcast que encontró “la potencia del humor para hacer política” hace una década. “Quiero usar la herramienta [el humor] porque es muy potente y por reírnos un poquito nosotros y de la realidad cuando se vuelve abrumadora”, dijo en otra entrevista radial. Desde que en 2012 creó en Twitter el personaje satírico que llamó El pibe trosko, ha trabajado en radio, televisión y teatro. En junio, además, presentó una precandidatura a jefe de Gobierno de Buenos Aires que al final bajó. Siempre se define como militante peronista antes que humorista. A él también le hicieron un jingle: “Pero entonces terminó, alguien nos viene a salvar, el legado de Cristina [Kirchner] está en Pedro Rosemblat”, dice la letra reversionada de Muchachos, el himno dedicado a la selección campeona del último mundial de fútbol –que está, a su vez, basada en una canción de La Mosca Tsé-Tsé– .
El sábado, en la previa de las primarias, los tres comunicadores harán una transmisión especial para premiar los mejores jingles por candidato elegidos por el público. Compiten, por ejemplo, una reversión de Olvídame y pega la vuelta, de los Pimpinelas, dedicada al peronista Sergio Massa; una de Yellow Submarine, de The Beatles, para Patricia Bullrich y una de Rasguña las piedras, de Sui Generis, la banda de rock de Charly García y Nito Mestre, para su oponente en la interna de la centroderecha, Horacio Rodríguez Larreta; está nominado también el jingle hecho a partir de Provócame de Chayanne que Milei cantó en la calle rodeado de sus seguidores y que después hizo sonar en el cierre de su campaña, y uno hecho para el precandidato de la izquierda Gabriel Solano a partir de Salvaje de Nathy Peluso. Se entregará, también, un premio al “jingle de oro”.
La siguiente semana no habrá Fábrica de jingles “por un tiempo”, avisó Rosemblat en el programa del jueves e hizo un chiste sobre lo que podría ocurrir con el dólar tras las elecciones: “Vamos a estar todos en la city porteña frenando el dólar así, agarraditos de las manos”. En Argentina, en medio de una campaña que ha estado centrada en la crisis económica y que ha virado hacia la inseguridad después de la muerte violenta de una niña de 11 años, queda algo de espacio para el humor. A la broma, le siguió una hora de jingles en directo. Y al final, los agradecimientos para todos los que enviaron sus canciones: “No creemos que la gente le escape a la política. Nos hace muy felices ser argentinos, ser peronistas, poder reírnos de nosotros”. Más de 2.000 creaciones enviadas por los usuarios habían quedado afuera.
Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS América y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la región.