‘Influencers’ latinas usan sus redes sociales para defender a los migrantes: “Yo también pasé por esa situación y comprendo el temor”
‘Tiktokeras’ con millones de seguidores en redes sociales pausan su contenido habitual para hablar sobre las redadas migratorias que se están dando a lo largo del país y los derechos que tienen los migrantes en caso de ser detenidos o deportados
Estas influencers son todas amas de casa mexicanas que viven en California, algunas por décadas. Ganan dinero compartiendo sus rutinas y consejos en videos de TikTok, YouTube o Facebook: desde recetas de cocina y tips de limpieza, hasta anécdotas familiares. Todas tienen millones de seguidores, que responden a sus posts con centenares de miles de likes y comentarios diarios. Son famosas y queridas en sus comunidades binacionales: llenan foros y les piden autógrafos en las ciudades donde viven y cuando visitan sus pueblos natales. Comenzaron a crear contenido durante o después del encierro de la pandemia y con los años han logrado monetizar en las plataformas, vender productos y publicidad y generar ingresos mientras cuidan de sus familias en casa. Ninguna solía postear sobre política o inmigración hasta que lo pidió su audiencia este último mes, cuando el miedo a las detenciones de inmigrantes crispó a las comunidades latinas digitales.
Raquel Hernández suele preparar recetas típicas mexicanas en los fogones al aire libre de su rancho, en el valle central de California, mientras su hija la graba. También postea historias de cuando regresa a su pueblo en Michoacán y cocina para vecinos y parientes. El 28 de enero le habló a la cámara sin delantal, con las ollas de barro limpias en el fondo: “Hoy no voy a cocinar, hoy quiero hablar de lo que está pasando con las redadas de migración, que están afectando a mi comunidad hispana, a mi audiencia (...) Yo también pasé por esa situación y comprendo el temor, el miedo. No me siento a gusto de subir un video de cocina, que es mi contenido, como si nada estuviera pasando”, dijo con la voz quebrada.
Su cuenta, “Cocinando con Raquel”, tiene 8,1 millones de seguidores en TikTok y otros 1,1 millones en YouTube. En ese video, que recibió 1,2 millones de likes y fue compartido por más de 55.000 personas, Hernández contó que había llegado a Estados Unidos sin visa hace 24 años y que logró salir adelante con la protección de sus paisanos, que hasta la llevaban de su casa al trabajo para que no se arriesgara a ser arrestada en la parada del bus. “Si ustedes tienen un familiar que está pasando por esto, ayuden, apoyen en lo que puedan, porque no se imaginan el miedo que siente uno. Tenemos que echarnos la mano y dar información (...) Tienes derecho a quedarte callado si te agarran, tienes derecho a no abrir tu puerta”, compartió Hernández, junto con los contactos de organizaciones que apoyan a inmigrantes con redes de respuesta rápida y ayuda legal en casos de detención.
Silvana Flores tiene 16 millones de seguidores en TikTok, 12 millones en Facebook, un recetario de cocina y es la vendedora estrella de una marca de artículos de cocina y electrodomésticos. Su carrera despegó cuando una receta suya se hizo viral —quesadillas y ceviche de camarón—. Luego escribió Que Chille la Cazuela y sus eventos de presentación en ciudades del sur de California se llenaron de fans. Flores ha contado en entrevistas que nació en un pequeño pueblo del Estado de Guerrero y vive en Estados Unidos desde hace 20 años, que cruzó el desierto sin permiso y comenzó a trabajar en la limpieza de casas particulares.
Cuando Donald Trump tomó posesión hace un mes y lanzó su operación de deportaciones masivas, Silvana comenzó a recibir mensajes de preocupación, pero también de odio y amenazas. “Vive tus pocos días que te quedan, pronto tendrás visita”, dice uno de estos comentarios, aludiendo a la posibilidad de que agentes de migración la detengan en su casa o en el rancho del sur de California donde graba videos con su familia. En un video del 31 de enero habló del asunto y compartió consejos sobre cómo responder si agentes de migración tocan a la puerta: “No tengan miedo, todos tenemos nuestros derechos y los tenemos que saber. Uno tiene que saber que si llegan a tu casa, uno tiene el derecho de decir ‘yo no voy a abrir’, el derecho de permanecer callado. No firme nada, porque al firmar automáticamente uno se está deportando”.
Algunas influencers de la cotidianidad latina en Estados Unidos también se han unido a las manifestaciones contra las deportaciones convocadas el último mes en ciudades de California. Fanny Dávalos —ama de casa de Fresno con 3,7 millones de seguidores en TikTok— estuvo en la protesta de “Un día sin inmigrantes” con su esposo Sergio Gaytán, también influencer. Ninguno de los dos solía comentar sobre política o inmigración en sus redes: hacen parodias, cocinan, remodelan la casa y el jardín, hacen fiestas, prueban comida y hacen retos con familiares que también son creadores de contenido. Pero desde enero, han respondido a los mensajes de preocupación de su audiencia con recursos para navegar los operativos de migración. “En este video les voy a dar un poquito de información por si un día los llegan a parar los oficiales de la Patrulla Fronteriza o el ICE”, dice Gaytán en el audio de un video de carpintería.
Cerca de la mitad de los hispanos en Estados Unidos utiliza TikTok, según el Centro de Estudios Pew. “Los adultos hispanos son particularmente propensos a usar TikTok, con un 49% que afirma utilizarlo, una cifra superior a la de los adultos afroamericanos (39%). Porcentajes aún menores de adultos asiáticos (29%) y blancos (28%) dicen lo mismo”, dice un estudio publicado en enero de 2024, que analiza el uso de redes sociales en el país. El estudio también señala que las mujeres son quienes utilizan la plataforma en tasas más altas que los hombres: 40% frente al 25%.