Ir al contenido
_
_
_
_

Los falsos Labubu representan un riesgo mortal para los niños, advierte Estados Unidos

La Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor alerta que las copias de los populares ‘monstruos’ pueden provocar asfixia

Un juguete Labubu, el 27 de junio de 2025.
Marisol Jiménez

Los Labubu se han convertido en un objeto peligroso. Lo que empezó en 2015 como la creación del artista Kasing Lung, un monstruo de dientes afilados y sonrisa inquietante, es hoy un fenómeno global: largas filas en las tiendas de juguetes Pop Mart para adquirirlos, precios inflados en las reventas y subastas, robos nocturnos y ahora, una advertencia de seguridad en Estados Unidos.

Este lunes 18 de agosto, la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor (CPSC, por sus siglas en inglés) emitió un comunicado urgente desde Washington. Los falsos Labubu, a veces vendidos bajo el nombre de “Lafufu”, representan un riesgo mortal para los niños. “Estos muñecos son peligrosos, ilegales y no tienen lugar en los hogares estadounidenses”, advirtió el presidente interino del organismo, Peter A. Feldman.

La alarma no es gratuita. Según la agencia, las imitaciones que se comercializan como peluches o llaveros son lo bastante pequeñas para bloquear las vías respiratorias de las infancias y, en algunos casos, se rompen con facilidad, liberando piezas diminutas que pueden provocar asfixia. Investigadores federales han identificado múltiples cargamentos que intentaban ingresar desde China y han ordenado la incautación de miles de unidades por violar las normas de seguridad.

La fiebre Labubu, sin embargo, se alimenta tanto de la rareza de sus ejemplares de 20 centímetros como del mercado paralelo. Apenas unos días antes de la alerta, un grupo de ladrones enmascarados irrumpió en la tienda One Stop Shop, ubicada en La Puente, a las afueras de Los Ángeles. Usaron una camioneta Toyota Tacoma robada para llevarse todo el inventario: unos 7.000 dólares en figuras originales. Las cámaras captaron siluetas rápidas, sudaderas negras y rostros ocultos. El local quedó vacío, con estantes deshechos y cristales rotos.

Cómo distinguir un Labubu original

Para distinguir un muñeco auténtico de una copia, la CPSC aconseja fiarse de los detalles. Las piezas originales de la compañía china Pop Mart incluyen holograma con la marca, un código QR que redirige al consumidor al sitio oficial y, en las ediciones más recientes, un sello ultravioleta en uno de los pies. Los falsos monstruos suelen delatarse por tener colores demasiado brillantes, errores en el número de dientes (los originales siempre tienen nueve) o precios sospechosamente bajos.

@bobbysolez

Replying to @lemurcreamerlol The differences between a Labubu and Lafufu! #labubu #labubuthemonsters #popmart #trend #bobbysolez #lafufu #labubuunboxing

♬ original sound - Bobby Solez

La advertencia estadounidense coincide con otra lanzada semanas antes por el Chartered Trading Standards Institute (CTSI, por sus siglas en inglés) en Reino Unido donde se confiscaron más de 2.000 artículos que se descubrieron gracias a las denuncias de padres preocupados por los estándares de calidad. La responsable de seguridad de productos del CTSI, Christine Heemskerk, ha explicado que las réplicas de los monstruos pueden contener sustancias químicas peligrosas en el plástico que podrían causar daños irreversibles en los órganos de los niños. En ambos lados del Atlántico, el mensaje es el mismo: vigilar, comprar solo a vendedores establecidos, revisar el empaque y desconfiar de los descuentos.

El ilustrador hongkonés Kasing Lung quizá nunca se imaginó que sus creaturas de vinilo con grandes ojos ovalados, orejas alargadas, colores pastel y cuerpos suaves se convertirían en objetos de colección que llegarían a venderse en 150.000 dólares estadounidenses y su popularidad llegara a ser tal que sus versiones falsas llegaran a convertirse en un riesgo de vida.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Marisol Jiménez
Es redactora de redes sociales de EL PAÍS US. Estudió la licenciatura en Ciencias de la Comunicación y Periodismo y la Maestría en Estudios México-Estados Unidos en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_