Netflix acaba en España con las cuentas compartidas en distintas casas si no se paga un extra por ello

“Amar es compartir contraseña”, decía Netflix desde su cuenta oficial de Twitter en marzo de 2017. En los últimos meses, ese mensaje se ha llenado de comentarios y retuits de usuarios recordando la contradicción en la que ha caído el gigante rojo desde que comenzara a eliminar la posibilidad de cuentas compartidas. El miércoles anunció que esta medida se aplicaría también en España de forma inmediata, según un comunicado de la plataforma, además de en país...

“Amar es compartir contraseña”, decía Netflix desde su cuenta oficial de Twitter en marzo de 2017. En los últimos meses, ese mensaje se ha llenado de comentarios y retuits de usuarios recordando la contradicción en la que ha caído el gigante rojo desde que comenzara a eliminar la posibilidad de cuentas compartidas. El miércoles anunció que esta medida se aplicaría también en España de forma inmediata, según un comunicado de la plataforma, además de en países como Portugal, Nueva Zelanda y Canadá, después de haberla probado en 2022 en algunos mercados latinoamericanos.

Si los usuarios viven en distintos hogares en España no pueden compartir Netflix (ni por tanto, dividir entre ellos la cuota mensual) si tienen el plan básico o el básico con anuncios. Los suscriptores de los planes estándar o premium pueden añadir “subcuentas” de personas con las que no convivan, una en el primer caso y dos, como máximo, en el segundo. Cada una de esas subcuentas tendrá un perfil, a un coste adicional de 5,99 euros al mes por persona.

Estos son los precios y prestaciones a febrero de 2023 en función del plan y las personas con las que se comparta Netflix:

• Básico con anuncios: 5,49 euros al mes.
• Básico: 7,99 euros al mes.
• Estándar: 12,99 euros al mes (un suscriptor extra por 5,99 euros al mes).
• Premium: 17,99 euros al mes (cada suscriptor extra por 5,99 euros al mes).

En el comunicado, la directora de Innovación de producto de la plataforma, Chengyi Long, explicaba que, para facilitar que sus usuarios tengan “un mayor control sobre quiénes pueden acceder a su cuenta”, deberán establecer la ubicación principal de la misma a través de la conexión del dispositivo o la aplicación a una dirección IP. Esa información no solo sirve para que el dueño de la cuenta tenga ese control. También es útil para que lo tenga la empresa.

¿Y si el dueño de la cuenta se va de viaje? Los suscriptores podrán ver Netflix en sus dispositivos personales o iniciar sesión en otro televisor (en un hotel o un alquiler vacacional, por ejemplo), explica la plataforma. Si tienen una segunda residencia o viajan con frecuencia a un mismo lugar, deben abrir la aplicación de Netflix en sus dispositivos móviles mientras están conectados a la red wifi de su ubicación principal una vez al mes y, a continuación, tienen que hacerlo cuando lleguen a la segunda ubicación.

“Cada cuenta de Netflix está diseñada para un solo hogar y los suscriptores pueden elegir entre varios planes con distintas características”, comenta Long en su escrito. A pesar de no haberlo aplicado hasta ahora e incluso de haber animado a lo contrario en mensajes como el tuit de 2017, en realidad, las condiciones de uso al contratar la plataforma ya limitaban su utilización a los miembros del hogar, comentaba Natalia Marcos en este preguntas y respuestas sobre el fin de las cuentas compartidas en Netflix.

Como esta medida va a provocar el divorcio de distintas cuentas que hasta ahora compartían gastos, Netflix permite transferir perfiles y explica cómo hacerlo. Cualquier persona que use una cuenta compartida puede trasladar su perfil a su propia cuenta de pago, conservando sus recomendaciones personalizadas, historial de visionado, su lista, sus juegos guardados y mucho más. La empresa no ha aclarado qué ocurrirá en caso de que esos usuarios no lo hagan e intenten seguir accediendo con la clave del titular de la suscripción.

Netflix aumentó sus usuarios en 2,4 millones en el tercer trimestre de 2022, revirtiendo una primera mitad del año de pérdida de suscriptores. De esa forma, recuperaba clientes en todas las regiones gracias a los estrenos del verano y justo antes de lanzar una tarifa más económica en 12 países, la del básico con anuncios que también llegó a España.

La empresa también anunció en octubre que seguirá explorando la ruta de los videojuegos. Es una forma de aumentar el tiempo de permanencia del usuario dentro de la plataforma. En algo más de un año, Netflix ya había creado 35 títulos y otros 55 ya están en desarrollo. Algunos de ellos estarán basados en sus propias series y películas para así retroalimentar su oferta y que crezcan tanto las horas de consumo de juego como las de reproducciones.

En la actualidad, “hay más de 100 millones de hogares que comparten sus cuentas, lo que reduce nuestra capacidad de invertir en la creación de grandes historias, contadas con series y películas de la máxima calidad”, recordaba la plataforma en el comunicado del miércoles. Un informe de Barlovento Comunicación estima que el 61,3% de los usuarios españoles de Netflix comparten suscripción. En marzo, Variety recogía la estimación que hacía la compañía de analistas financieros Cowen & Co. según la cual Netflix podría obtener 1.600 millones de dólares de beneficios al año cobrando un plus por compartir cuenta. Los cálculos asumían que la mitad de los que tienen acceso a Netflix ahora pero no pagan optarían por pagar, y la mitad de ellos lo haría con suscripción propia.

En otras palabras, si los clientes que comparten cuenta no pagan su suscripción no podrán disfrutar de nuevas temporadas de contenidos como El juego del calamar o Berlín.

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