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Portátiles a prueba de ciberataques para trabajar en remoto

El teletrabajo ha puesto a prueba la seguridad y fiabilidad de los equipos informáticos. Contar con dispositivos solventes ayuda a alcanzar la eficacia y la eficiencia productiva de un desempeño laboral híbrido. El fabricante japonés Dynabook ofrece las series Portégé y Tecra, dos portátiles orientados al mercado profesional más exigente

Para desempeñar con éxito esta modalidad laboral es imprescindible disponer de un ordenador fiable y seguro. Dynabook ofrece una gama de productos que se desenvuelven con maestría en el ecosistema digital.

La pandemia alteró los entornos laborales e impulsó el trabajo en remoto, validándolo como una excelente solución para continuar con la actividad. Pasado el tsunami sanitario, el desempeño de las tareas profesionales a distancia está asentado. Según el informe The Future of Hybrid Work, publicado por la analista Gallup, el 91% de los empleados prefieren trabajar desde casa antes que acudir a la oficina.

Para desempeñar con éxito el teletrabajo es imprescindible disponer de un ordenador robusto, fiable y, sobre todo, seguro. El trabajo híbrido favorece el cambio de ubicación, lo que eleva el riesgo de sufrir percances (una caída accidental, por ejemplo) y ser objeto de ciberataques (al conectarse desde cualquier lugar). Justo al contrario de lo que se suele pensar, los cibercriminales no solo entran en los equipos a través del software; el hardware también está expuesto.

Dynabook, compañía heredera de Toshiba, ofrece una gama de productos que se desenvuelven con maestría en este ecosistema digital. Los portátiles de las series Portégé y Tecra responden a las demandas de aquellos que, dentro del mercado profesional, buscan la excelencia. Los pedidos se ajustan a lo que necesita el cliente y las entregas están garantizadas desde la primera unidad.

ADN 100% japonés

La máxima de Dynabook es ofrecer unos niveles de calidad, seguridad y fiabilidad líderes del sector. La empresa de ingeniería japonesa diseña y fabrica todos los portátiles en sus propias instalaciones. “El nivel de control es máximo en todo el proceso de desarrollo: va desde la selección de componentes y las evaluaciones de calidad en la etapa de diseño, hasta el control de calidad en la etapa de producción”, explica Maite Ramos, General Manager Iberia de Dynabook.

Maite Ramos, directora general de Dynabook Iberia

El fabricante también manufactura el Sistema Binario de Entrada y Salida (BIOS) de sus ordenadores, algo inusual en el sector. “Esto ofrece, específicamente, un motor de seguridad que incluye contraseña de 50 dígitos, distintos niveles de acceso al BIOS según usuario, herramientas de administración a medida y posibilidad de especificar cambios en las contraseñas del BIOS solo después de una verificación de identidad nuestra. Este nivel adicional de seguridad permite trabajar de forma remota con una capa de seguridad extra contra la manipulación no deseada de terceros”, aclara Ramos.

Equipos blindados a los ciberataques

Según un estudio de Cybersecurity Ventures, el cibercrimen moverá ocho billones de euros en 2023. Contextualizado a nivel global, estaríamos hablando de la tercera economía más importante, tras Estados Unidos y China. Reducir el impacto de los delincuentes digitales supone un gran esfuerzo para las empresas y los gobiernos.

Nuestro nivel adicional de seguridad permite trabajar de forma remota con una capa de seguridad extra contra la manipulación no deseada de terceros
Maite Ramos, directora general de Dynabook Iberia

La puerta de entrada de los cibercriminales siempre es el eslabón más débil de la cadena de suministro. Los protocolos de red no seguros o los servidores poco protegidos suelen ser los puntos vulnerables para insertar las herramientas maliciosas. Además del software, el hardware puede ser frágil. Ahorrar en protección puede salir realmente caro.

“Sabemos por experiencia que si un director de sistemas de información (CIO) ahorra 10 euros en un dispositivo y luego el proyecto falla por averías o seguridad, tiene un problema muy grave. Los costes globales por delitos cibernéticos no paran de subir y tener un proveedor de hardware con estándares de calidad altos ayuda a las empresas a negociar sus ciberseguros a la baja. Nuestros dispositivos son competitivos y tienen la mejor relación calidad-precio del mercado”, apunta Ramos.

Fiabilidad insuperable

La solidez es otra de las características de los portátiles Dynabook: no se estropean nunca. Es algo a tener en cuenta cuando se trabaja a kilómetros de la oficina sin un soporte informático físico. La tasa de fallo publicada (un dato que no facilitan los competidores) es del 0,11%, cinco veces menos que otros fabricantes. En el improbable caso de que el equipo fallase estando en garantía, la compañía ofrece la reparación gratuita y el reembolso del importe del ordenador.

Los portátiles de las series Portégé y Tecra, robustos pero ligeros, poseen todas las características necesarias para trabajar en entornos híbridos muy variados.

El feedback del cliente no deja lugar a dudas. “Nuestros equipos tienen cada día mejor aceptación. Las gamas Tecra y Portégé han aumentado sus ventas, lo que demuestra que la fiabilidad, la seguridad y la portabilidad siguen siendo las características más valoradas por los profesionales en el momento de la compra. Ambos son compañeros ideales para trabajar en entornos híbridos muy variados. Por ejemplo, la familia Portégé, con su chasis de aleación de magnesio, ofrece la máxima resistencia y el menor peso. El Portégé X40L es el portátil de 14″ Intel® Evo más ligero del mercado (1,05Kg)”, concluye Ramos.

Testados con estándares militares

Antes de comercializar sus portátiles, Dynabook los somete a exhaustivas pruebas. El fabricante avala la calidad y la fiabilidad de sus equipos con la metodología japonesa Halt (prueba de duración altamente acelerada), que simula tres años de uso en entornos hostiles. Las gamas Portégé y Tecra se testan de acuerdo con los estándares militares MIL-STD 810, que define varias pruebas ambientales que indican si una pieza del equipamiento tiene un buen funcionamiento de campo. Cada ensayo se asocia con un origen de estrés ambiental. Las evaluaciones incluyen exponer los dispositivos a 40℃ de temperatura con una humedad del 90% y a 0 ℃ , dejarlos caer desde una altura de hasta un metro y comprobar el estado del montaje de soldadura.

Asimismo, Portégé y Tecra cuentan con la certificación Tempest Zonning 1 en varias de sus plataformas para garantizar la máxima seguridad. Esta acreditación, utilizada por militares, departamentos gubernamentales y organizaciones internacionales como la OTAN, es muy relevante para el fabricante nipón. “Este año hemos crecido mucho en los contratos con la administración pública y seguimos siendo muy fuertes en defensa, dos estamentos que son muy exigentes con la seguridad y apuestan por nuestros dispositivos”, expone Ramos. Y añade: “Es algo muy positivo para demostrar nuestro valor diferencial en seguridad como una pieza fundamental en la formación del futuro de nuestro país”.

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