Por qué comprarse un móvil nuevo es cosa del pasado

Hace muchas décadas que el renting, una modalidad de alquiler que se caracteriza por su larga duración, se ha instalado en nuestras vidas. En los últimos años, este sistema de arrendamiento ha arraigado con fuerza en el sector del automóvil. Las empresas y las ofertas de renting de vehículos se multiplican, y cada vez más conductores se decantan por esta opción y renuncian a comprarse coche propio. Pero, si lo pensamos bien, no deja de ser un pago por uso de un servicio que además, ya conocemos bien en otros sectores como el entretenimiento en streaming, la música, la tecnología en la nube…

Aunque muchos no lo sepan, el renting también es muy útil para contratar equipos tecnológicos, incluidos los teléfonos móviles. Hoy, ya no es necesario adquirir el último modelo de smartphone para disfrutar de este dispositivo, sino que basta con pagar por él una única cuota mensual.

Las ventajas del renting de móviles son numerosas: el móvil siempre es nuevo a estrenar, por lo que está en perfectas condiciones de uso; no es necesario aportar una cantidad económica de entrada y el coste que se abona cada mes es fijo, de manera que se evitan gastos imprevistos; el servicio incluye un seguro a todo riesgo que cubre cualquier tipo de incidencia (rotura, robo, daño accidental, entre otros); se puede renovar el teléfono en cualquier momento por otro completamente nuevo; se fomenta la economía circular…

Solo con abrir la caja, un móvil pierde un 30% de su valor. Tampoco le sacamos rentabilidad, porque lo dejamos en un cajón hasta que su precio es cero

Pablo Blanco, director general de Rentik

Todos estos beneficios no han pasado desapercibidos para los usuarios. Un estudio independiente elaborado por la consultora IO Investigación a una muestra representativa de 1.500 personas revela que el 38% de los españoles –casi cuatro de cada diez– están dispuestos a pasarse al renting de dispositivos móviles. Este porcentaje alcanza el 40% en el caso de las mujeres de 35 y 54 años, pues consideran que así se contribuye a aliviar los gastos en la economía familiar, algo que cobra aún más importancia en un periodo de inflación como el actual, que castiga con fuerza a las finanzas domésticas.

Desde hace algunos meses, alquilar un teléfono móvil de última generación a un precio más que asequible es posible gracias a Rentik, una empresa especializada en el renting de smartphones que dispone de una amplia gama de terminales, incluso las mejores marcas del mercado (de la marca Samsung, Xiaomi, Oppo, Vivo, ZTE y iPhone de Apple) para cualquier persona física. Su funcionamiento es sencillo y rápido, ya que el proceso de contratación se hace online a través de su página web y apenas requiere dos minutos. No obstante, también se pueden contratar los servicios de Rentik en más de 800 tiendas físicas, como son las de Phone House.

Una vez realizado el renting, llega el momento de disponer del teléfono –que es libre y no está vinculado a ninguna compañía concreta–. El cliente lo recibirá gratis en su domicilio en un plazo aproximado de 72 horas hábiles (tres días más en el caso de Baleares y diez días hábiles si la entrega es en Canarias). Cada mes, se realizará un cargo en la tarjeta que ha facilitado el usuario, que puede ir desde los 12 euros mensuales, dependiendo del teléfono elegido.

Crecimiento imparable

“Estamos creciendo en las últimas semanas a un ritmo del 200%”, admite el director general de Rentik, Pablo Blanco. Lo habitual es que el contrato dure 24 meses, lo que garantiza que el cliente estrenará un móvil cada dos años. Finalizado ese periodo, lo más frecuentes es devolver el teléfono para hacerse un nuevo renting y estrenar otro dispositivo, aunque también se puede ampliar la operación otros 12 meses (con un descuento del 25%). Si finalmente se decide no renovarlo, basta con entregar el teléfono.

El servicio va más allá, pues incluye un seguro a todo riesgo con numerosas coberturas, que abarcan desde el robo y hurto a la rotura de pantalla, derrame de líquidos, uso fraudulento y daño accidental, entre otros. Y en caso de siniestro, el usuario recibirá un terminal de sustitución. Este punto es significativo, ya que la encuesta de IO Investigación demuestra que casi la mitad de los españoles tiene averías en su móvil y, de media, un 22% se gasta más de 200 euros en repararlo, por lo que decidirse por una opción de renting tiene todo el sentido. Por eso, la mayor ventaja de este tipo de servicios como el que proporciona Rentik es que, en caso de que se estropee el dispositivo, el cliente recibe uno nuevo.

En este mismo estudio, siete de cada diez encuestados consideran que el actual precio de los móviles en el mercado es excesivamente caro para devaluarse tan pronto. “Solo con abrir la caja, un móvil pierde un 30% de su valor. Tampoco le sacamos rentabilidad, porque lo dejamos en un cajón hasta que su precio es cero”, coincide Pablo Blanco. Algo lógico, por otra parte, debido a la constante evolución de la tecnología. “Es un sector con una altísima innovación y rotación. No hemos implantado el 5G y ya estamos hablando del 6G”, apunta. Por eso, su opinión es tajante. “Con Rentik, el cliente pasa de tener el teléfono que puede permitirse a poseer el que quiere”, añade.

Un argumento que convence a personas de todas las edades, desde jóvenes –que de esta manera pueden acceder al terminal que desean, pero que no se podrían permitir si lo pagaran al contado–, como a las familias, que ven cómo ha bajado su poder adquisitivo tras las continuas subidas de tipos de interés. Otro motivo más que explica por qué es una buena decisión confiar en Rentik.