¿Cómo se consigue un espacio de trabajo más inclusivo?
En España, el 6,19% de la población en edad laboral tiene alguna discapacidad, pero solo el 35% de ellos tiene empleo. El puesto de trabajo puede ayudar a paliar esta situación
Alrededor de 1.000 millones de personas (el 15% de la población mundial) sufre algún tipo de discapacidad, según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En España, el 6,19% de la población en edad laboral tiene alguna discapacidad, pero solo el 35% de ellos tiene trabajo, según datos del Servicio Público de Empleo Estatal SEPE.
Hoy en día existen herramientas de tecnología que pueden ayudar a crear espacios de trabajo más inclusivos. Sin embargo no basta con tener herramientas para la inclusión; tiene que haber una capacitación de todo el personal de trabajo alre...
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Alrededor de 1.000 millones de personas (el 15% de la población mundial) sufre algún tipo de discapacidad, según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En España, el 6,19% de la población en edad laboral tiene alguna discapacidad, pero solo el 35% de ellos tiene trabajo, según datos del Servicio Público de Empleo Estatal SEPE.
Hoy en día existen herramientas de tecnología que pueden ayudar a crear espacios de trabajo más inclusivos. Sin embargo no basta con tener herramientas para la inclusión; tiene que haber una capacitación de todo el personal de trabajo alrededor de las distintas discapacidades y una conciencia en la población general. En esto coinciden todos los expertos invitados a participar en la mesa redonda Hacia un espacio de trabajo más inclusivo e innovador liderada por Eduardo Jáuregui, CEO de Irisbond. Esta empresa está especializada en tecnologías de movimiento ocular (eyetracking), que convierten los movimientos de los ojos en un cursor que se desplaza por la pantalla para manejar el equipo como si se utilizara un ratón. “Tenemos toda la tecnología para lograr la accesibilidad, pero las personas somos las que tenemos el poder”, dice Ana González Talaván, gerente de éxito del cliente de Microsoft.
Diseñar ofertas de trabajo accesibles
La Fundación ONCE se dedica a capacitar empresas para ser inclusivas, a través de programas de integración laboral y formación de empleo para personas con discapacidad. Su director de accesibilidad e innovación, Jesús Hernández Galán, asegura que es más barato y fácil para una empresa lograr la inclusividad si la accesibilidad se introduce en la fase de diseño de la empresa. Explica que hay que pensar en la inclusión desde la creación de la oferta de trabajo, hasta la entrevista y la incorporación. “Quizá hay alguna persona con discapacidad auditiva que necesita que el entrevistador sepa lengua de signos”, ejemplifica Hernández.
Ana González Talaván asegura que gran parte del problema está en que las personas con discapacidad ni siquiera se postulan para el trabajo, aunque tengan el talento, al pensar que no se van a adaptar a sus necesidades. “Hay que hacerle saber a todas las personas con discapacidad que tienen la oportunidad de aplicar a un trabajo en nuestra compañía si así lo desean”, dice González Talván. Esto, creando procesos de contratación que incluyan a todas las personas, basándose en capacitación por expertos por un lado y, por el otro, incluyendo a empleados en el proceso de contratación, que puedan, tras su experiencia, mejorar la forma en que contratan. En Microsoft intentan no solo describir el puesto de trabajo, sino mostrar la experiencia a través de vídeos. González, por su parte, cree que gracias a la capacitación de ONCE, pudieron contratar a personas con discapacidad visual y auditiva.
Lara Moratón, jefa de accesibilidad de Samsung coincide en que es necesario trabajar lado a lado con las personas con discapacidad para conocer sus necesidades y aplicarlas, tanto a la tecnología de la empresa, como al espacio de trabajo. “Necesitamos su perspectiva para que nuestros productos lleguen a todas las personas”, dice.
Capacitar al personal
“Al principio solo nos preocupamos por las instalaciones del edificio y no sabíamos que eso era solo el 1% del proceso de cómo hacer la empresa accesible para personas con discapacidad”, afirma González Talván. “Necesitamos entrenamiento para lograr un ambiente inclusivo”. González agrega que, en su experiencia, las personas con alguna discapacidad suelen ir más nerviosas a una entrevista y saber cómo tratarlos y alentarlos es también una herramienta muy útil. “La empatía y la flexibilidad son clave”, coincide Hernández, de la Fundación ONCE. “Aunque tengamos las herramientas, es muy importante que todo el personal esté entrenado para poder usar toda la tecnología y sabiduría que tengamos al alcance”, agrega Moratón.
Tecnología para los trastornos mentales
“Todos tenemos diferentes necesidades y pueden ser tanto permanentes como circunstanciales”, dice González (Microsoft), quien agrega que la pandemia ha obligado a la empresa a reflexionar sobre qué herramientas usar para tratar los trastornos mentales, principalmente la ansiedad. A raíz de la pandemia agregaron una opción en Microsoft Teams para desactivar todos los mensajes que se reciben. “Es como un ‘modo de noche’ para que la persona pueda desconectar por completo”, explica González. Además tienen un número al que los empleados pueden llamar para hablar con un psicólogo.
Lara Moratón dice que llevan tiempo trabajando con profesionales de la salud. “En una ocasión hicimos una prueba en niños con gafas de realidad virtual para tratar la ansiedad y la hiperactividad. Fue muy exitoso, pues los ayudó a relajar y concentrarse”, cuenta.
El espacio de trabajo 100% inclusivo
Los participantes coinciden en que para lograr la accesibilidad por completo, se debe de cambiar la cultura que existe alrededor de la discapacidad. “Todas las empresas hoy en día se preocupan muchísimo por la sostenibilidad, porque nos afecta a todos. Pero creen que la accesibilidad solo afecta a las personas con discapacidad, y no es así”, manifiesta Moratón. “La accesibilidad no debería de ser una opción, tendría que ser obligatoria y pensarse como algo universal, que incluya a todos los países y a todas las discapacidades”. “Hay que incluirlo en la cultura, que se hable de accesibilidad en las escuelas, las universidades; hay que crear conciencia sobre la discapacidad”, coincide González.
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