"A quien no le guste mi música, me puede acribillar a balazos en mi videojuego"
El músico asturiano afirma no llevarse bien con las tecnologías
Melendi confiesa que "las tecnologías no son lo suyo". No usa reproductor MP3, sólo dispone de ordenador en la oficina y lo utiliza "casi exclusivamente" para visitar su propia web. El cantante asturiano ha aprendido a vivir sin tecnología, o mejor dicho, ha preferido no saber cómo sería su vida con ella.
"Las cosas que para mí verdaderamente importan no se pueden solucionar con el desarrollo tecnológico", se excusa el artista, que considera que los sentimientos humanos nunca podrán ser suplidos por máquinas.
Sin embargo, no está completamente al margen de las posibilidades que o...
Melendi confiesa que "las tecnologías no son lo suyo". No usa reproductor MP3, sólo dispone de ordenador en la oficina y lo utiliza "casi exclusivamente" para visitar su propia web. El cantante asturiano ha aprendido a vivir sin tecnología, o mejor dicho, ha preferido no saber cómo sería su vida con ella.
"Las cosas que para mí verdaderamente importan no se pueden solucionar con el desarrollo tecnológico", se excusa el artista, que considera que los sentimientos humanos nunca podrán ser suplidos por máquinas.
Sin embargo, no está completamente al margen de las posibilidades que ofrece la técnica. Recientemente, ha colaborado en la nueva creación de Sony para la PSP, Gangs of London, un videojuego ambientado en un Londres tomado por una guerra de bandas. El músico ovetense, que es la imagen del líder de una ellas, bromea: "A quien no le guste mi música, me puede acribillar a balazos en mi videojuego".
Si bien el intérprete de Caminando por la vida afirma "no llevarse bien con las tecnologías", no puede negar que no le sirvan de inspiración. Precisamente, de su colaboración con Sony ha surgido la canción Gangs of London, incluida en su último disco.
Melendi acaba de publicar su tercer álbum de estudio, Mientras no cueste trabajo, un elepé con el que inaugura una nueva etapa en la que busca una mayor proyección internacional a través de EMI, su actual discográfica.