Detenido un médico por agresión sexual a una paciente en un hospital de Girona

Los Mossos d’Esquadra han detenido a primera hora de este lunes a Ernesto González Riscos, un médico de 66 años que ejerce en urgencias del hospital Santa Caterina de Salt (Girona), acusado de agredir sexualmente a una paciente. Tras dar de alta a la mujer el pasado 10 de septiembre, el hombre se la llevó a su casa de Blanes, donde supuestamente se produjo la agresión. Tras la denuncia de desaparición presentada por sus padres, que mostraron una foto que ella les había mandado desde una población de la Costa Brava, los Mossos d’Esquadra la encontraron, con signos de embriaguez, en un portal. Según fuentes cercanas al caso, la víctima, de unos 35 años, es una mujer vulnerable, con problemas psiquiátricos y de alcoholemia. El detenido hacía sobre un año que ejercía en este centro contratado de forma externa.

Los familiares de la joven la dejaron en la puerta del hospital el pasado 10 de septiembre y denunciaron que no supieron nada de ella hasta la tarde siguiente, cuando envió una foto en la que se la veía, ebria, en una localidad costera. La policía autonómica identificó que se trataba de Blanes. Los agentes la estuvieron buscando hasta que, a las 23.50 horas, la encontraron en un portal con señales de estar bajo los efectos del alcohol.

La mujer fue trasladada al Hospital Santa Caterina de Salt. Allí dijo que creía haber sido víctima de una agresión sexual por parte del médico que la había atendido en el centro el miércoles. Según explicó la mujer, cuando González Riscos le dio el alta, se la llevó a su casa de Blanes, donde, según recordaba, despertó desnuda en la cama de una casa que no era la suya. De inmediato se activó el protocolo de delitos contra la libertad sexual y se hizo cargo del caso la Unidad de Investigación (UI) de los Mossos en Girona.

Según fuentes del Hospital Santa Caterina, cuando el centro supo que el médico había sido detenido le suspendió de actividad de forma cautelar. El hospital abrió, además, un expediente informativo (que está en curso), sin perjuicio de otras medidas o actuaciones que pueda llevar a cabo. El hospital se puso a disposición de la paciente y su familia para todo lo que puedan precisar.

Ernesto Luis González Riscos ha seguido ejerciendo medicina pese a que, en 2010, cuando trabajaba de médico forense, ya fue condenado a una multa de 3.600 euros por obstrucción a la justicia, por no haber comparecido a los juicios cuando era forense interno como perito. El médico también fue condenado por un delito continuado de falsedad documental, por haber falseado el certificado de defunción de su madre varias veces. Lo presentaba como justificante para ausentarse en los juicios. Entre 2002 y 2003 lo hizo hasta en tres ocasiones, y la última ya nadie le creyó.

El médico fue víctima, en el pasado, de uno de los casos criminales más surrealistas de Girona. Sobre las 22.00 horas del 8 de octubre de 2009, su mujer, Alicia Pagan, le convenció para que la acompañara a cerrar un negocio y fueron a una zona aislada de Lloret de Mar. A través de un intermediario, la esposa había contratado a dos sicarios para que le mataran. Una vez en el lugar, uno de ellos le disparó cuatro veces en la cabeza con una pistola de escaso calibre. Al ver que no moría, le pateó y golpeó con una piedra en la cabeza, hasta que él fingió su muerte. Todos ellos fueron condenados, pero a raíz de la detención de Pagan, se inició una investigación contra él, para quien Fiscalía pidió 5 años por un delito de violencia doméstica. González fue condenado en 2010 por falsificar varias veces la muerte de su madre para justificar incomparecencias en los juzgados cuando era forense.