Seis cosas que puedes hacer por tu comunidad más allá de quedarte en casa
Hablamos con expertos sobre algunas cosas que podemos hacer para ayudar a nuestros familiares, amigos y vecinos durante esta crisis del coronavirus.
En estos días ha quedado claro que lo esencial que podemos hacer por la sociedad y por nosotros mismos es quedarnos en casa. Cada día que pasamos en nuestros hogares aislados estamos ayudando a disminuir la propagación del coronavirus y por lo tanto estamos contribuyendo a salvar vidas. Además de seguir las recomendaciones de los organismos oficiales sanitarios y del gobierno, muchos nos preguntamos qué más podríamos hacer por nuestra comunidad para colaborar en solventar una crisis sin precedentes que necesita de la ayuda, el sacrificio y la responsabilidad de todos. Aquí hay algunas sugerenc...
En estos días ha quedado claro que lo esencial que podemos hacer por la sociedad y por nosotros mismos es quedarnos en casa. Cada día que pasamos en nuestros hogares aislados estamos ayudando a disminuir la propagación del coronavirus y por lo tanto estamos contribuyendo a salvar vidas. Además de seguir las recomendaciones de los organismos oficiales sanitarios y del gobierno, muchos nos preguntamos qué más podríamos hacer por nuestra comunidad para colaborar en solventar una crisis sin precedentes que necesita de la ayuda, el sacrificio y la responsabilidad de todos. Aquí hay algunas sugerencias con las que ayudar a nuestros familiares, amigos o vecinos.
Donar sangre
El mensaje desde el Centro de Transfusión de la Comunidad de Madrid es claro: si los donantes reciben un sms o un correo electrónico convocándoles a donar sangre deben acudir al lugar y fechas señaladas siempre y cuando no tengan síntomas de coronavirus. Si no reciben ese mensaje la recomendación es que todos nos quedemos en casa sin olvidar que cuando nos necesiten debemos estar ahí. «La sangre es necesaria siempre. Aún en esta situación sigue habiendo enfermos en los hospitales que necesitan transfusiones de componentes sanguíneos: cánceres, trasplantes, leucemias, cirugías urgentes, partos complicados… Pero, dadas las instrucciones de confinamiento emitidas, se deben seguir las indicaciones de los Centros de Transfusión y abstenerse de hacerlo si en los últimos 15 días se ha tenido fiebre, síntomas respiratorios o contacto directo con alguna persona infectada», explica Pilar de la Peña, responsable de Promoción del Centro de Transfusión de la Comunidad de Madrid. Para los que vayan a donar si las autoridades lo piden deben saber que «es un proceso seguro. No existe evidencia alguna de transmisión de coronavirus por sangre. El material utilizado para la extracción es estéril y de un solo uso y además los profesionales sanitarios extreman, como siempre, las medidas de higiene, selección y protección del donante», asegura de la Peña.
No difundir información sin contrastar o fake news
La actividad en Whatsapp y en las redes sociales está siendo frenética en los últimas días. Es crucial que antes de darle al botón de enviar o publicar nos aseguremos de que la información que estamos compartiendo con nuestros amigos, familiares o seguidores esté contrastada e investigada y provenga de una fuente oficial. Compartiendo ese meme gracioso que contiene un dato falso o ese artículo sensacionalista sin ninguna fuente de calidad podemos estar haciendo mucho daño a quienes no tienen los recursos o la capacidad para diferenciar lo verdadero de lo falso. Según explica Juan Caño, presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid, a mucha gente le cuesta distinguir entre una información de calidad y otra que contiene mentiras. «La epidemia de las noticias falsas comenzó mucho antes que la del coronavirus pero se ha incrementado exponencialmente con la propagación del Covid-19. Estamos ante una nueva generación llamada Deep fake news que se produce mediante herramientas muy sofisticadas, donde incluso se modifican la imagen y la voz de figuras públicas. Llegados a este nivel de máxima falsificación para muchas personas es muy difícil diferenciar. Por eso pedimos sanciones administrativas y multas cuando sea posible demostrar que se ha creado esa información falsa intencionadamente puesto que la difusión de estas noticias pueden causar males muy graves. A los ciudadanos les aconsejamos que confíen en la figura del periodista que publica informaciones contrastadas e investigadas en medios de calidad y recordamos que lo importante de un periódico no es ser el más vendido sino el más creído».
Dar clase o asistencia online
Algunos oftalmólogos, psicólogos o profesores están resolviendo dudas a través de la red para ayudar a los que están siguiendo las recomendaciones y no salen a la calle. Es el caso de la psicóloga Violeta Alcocer, que a través de Youtube está dando pequeños tutoriales para que el aislamiento no se haga tan duro. En su canal Quédate en casa con salud, Alcocer y otros compañeros de profesión nos enseñan rutinas básicas de autocuidado para no abandonarnos mientras estemos encerrados. «Lo hacemos porque no podemos olvidar que la salud mental también es salud», explica la psicóloga a S Moda. Por otro lado, el oftalmólogo Laureano Álvarez-Rementería está contestando en Instagram las dudas de aquellas personas que tienen problemas oculares pero no lo suficientemente graves como para ir a urgencias y colapsar más la sanidad. Y decenas de entrenadores y cocineros están compartiendo con sus seguidores todo su conocimiento. Piensa que todos podemos aportar y quizá compartir alguna de tus habilidades con los demás a través de Internet puede ayudar o hacer sentir menos solo a alguien.
Apoyar a los ancianos también emocionalmente
Algo que podemos hacer desde casa cada día de nuestro aislamiento es comprobar vía telefónica que las personas mayores de nuestro entorno se encuentran bien. «Para ayudar a un anciano lo mejor que puedes hacer en estos momentos es estar en casa. Sé que lo repetimos hasta la saciedad pero es primordial. Una vez que ya hemos tomado esta medida, recomendamos llamar cada día a nuestros familiares, vecinos y amigos mayores para comprobar que se encuentran bien de salud y también para darles apoyo emocional y transmitir cariño», sostiene Albert Quiles, director de Amigos de los Mayores. «Llevamos pocos días. La primera semana se va llevando, pero esto va a ir a peor y el estado de ánimo va a ir decayendo». Quiles opina que la llamada telefónica es muy segura porque no hay posibilidad de contagio y es un buen antídoto para la soledad. No olvidemos que en España, cerca de dos millones de personas mayores viven solas, según la Encuesta Continua de Hogares (2018) del Instituto Nacional de Estadística. De estas, 850.000 tienen más de 80 años y el 78% son mujeres. Además, Quiles insiste en que es muy importante que ayudemos a nuestros mayores a comprender lo que pasa y les demos información clara y contrastada. «Debemos aprovechar esa llamada para informarles bien con rigor y con veracidad. Muchas personas mayores se informan por la tele en programas que no son de calidad y no comprenden lo que está pasando».
Hacer una donación a una ONG
Si tu economía te lo permite es el momento de ayudar a la población más vulnerable. Haciendo una donación a una de las decenas de ONGs que trabajan cada día con ancianos (Aldaba, Amigos de los mayores, Teléfono de la esperanza, Grandes amigos…) o con personas especialmente vulnerables (Cruz Roja, Faciam, Solidarios.org) estarás contribuyendo a que esta crisis sea mucho más llevadera para cientos de afectados.
Dar cariño (aunque sea virtual) a los que viven solos
El aislamiento en nuestras casas es difícil para todos, pero sin duda es más llevadero cuando lo haces acompañado. En este sentido el psicólogo Rafael García nos anima a prestar especial atención a los amigos, vecinos o familiares que sabemos que no conviven con nadie más tengan la edad que tengan. «Llamarles para que vean que estamos ahí, que pueden contar con nosotros. Los grupos, las fotos, los videos, compartir una receta diciendo que te has acordado de esa persona… Son pequeños detalles que les pueden hacer sentir menos solos. Debemos aprovechar que tenemos un poco más de tiempo de lo normal para no desatender la parte emocional de nuestras relaciones».