Qué debe tener un ‘fashion film’ para sorprender a la mejor diseñadora de sets del mundo
Mary Howard, pieza clave en las espectaculares producciones de Steven Meisel, Annie Leibovitz o Steven Klein, es jurado de Madrid Fashion Film Festival, que desde este lunes, 15 de octubre, mostrará las mejores piezas que unen cine y moda en Sala Equis.
Cualquier aficionado a la moda habrá visto su trabajo en mil ocasiones, aunque no le suene su nombre. Mary Howard es uno de los secretos mejor guardados de la industria: Business of Fashion la define como “la diseñadora de set genuina de la moda” y es una figura imprescindible en las grandes producciones de fotógrafos como Annie Leibovitz, Steven Meisel o Steven Klein. Portadas icónicas como la de Kim Kardas...
Cualquier aficionado a la moda habrá visto su trabajo en mil ocasiones, aunque no le suene su nombre. Mary Howard es uno de los secretos mejor guardados de la industria: Business of Fashion la define como “la diseñadora de set genuina de la moda” y es una figura imprescindible en las grandes producciones de fotógrafos como Annie Leibovitz, Steven Meisel o Steven Klein. Portadas icónicas como la de Kim Kardashian a lo Jackie Kennedy para Interview y los especiales Hollywood Issue que Leibovitz firma para Vanity Fair llevan su sello. Tiene una visión estética que marca tendencia. Y ese ojo clínico le servirá para votar a los ganadores del IV Madrid Fashion Film Festival, que tendrá lugar desde el lunes 15 de octubre al miércoles 18 en Sala Equis con S Moda como media partner.
Howard forma parte del jurado que decidirá los premios. “El diseño de producción es muy importante en los fashion films, porque su cometido es contar una historia visualmente”, asegura. Para ella, en estas piezas que unen cine y moda “la estética debería ser muy importante, porque hace creer la historia que se cuenta”. Se trata de un formato que va ganando peso, reconoce: “Parece que su importancia aumenta, la audiencia y los consumidores cada vez son más expertos y críticos con lo que eligen ver, con en qué hacen clic y en qué no”. Para las marcas, reflexiona, este medio “puede resultar interesante porque muestra al modelo o actor moviéndose con sus prendas y eso ofrece una descripción más completa del producto, de una forma sofisticada y hermosa”.
“En los fashion films los directores y los diseñadores de set nos sentimos más libres para explorar nuestra creatividad. Veo que a los directores realmente les gusta este formato y les da ganas de experimentar, es un nuevo género muy especial, que plantea una ecuación completamente diferente de narración y creación de imágenes”, sostiene Howard. Ella empezó a crear decorados montando carrozas para los desfiles del Mardi Gras de Nueva Orleans, donde se crió. También hizo performances, antes de estudiar en Manson Gross School of the Arts, en la Universidad de Rutgers, alma máter de Roy Litchestein. Los escaparates de Macy’s fueron uno de sus primeros encargos hasta que, a principios de los noventa, empezó a trabajar junto a una leyenda de la fotografía, Richard Avedon.
Hoy, su empresa, Mary Howard Studio, con sede en Brooklyn, participa en 650 sesiones de fotografía y rodajes al año. “El diseño de producción es necesario porque marca cómo nos atrae una historia y enmarca al personaje. Tiene que ser atractivo e inteligente para resultar interesante. Tienes que saber de iluminación, cámaras, lentes. Debes hablar con el director o el fotógrafo, que son los autores, pero también sorprenderlos con ideas que ellos no hayan pensado. El diseñador de producción debe construir de una manera más grande, más completa de lo que se le pide”, asegura.
Ella, con su gusto por la historia del arte y una visión pictórica, ha diseñado el ambiente en el que han sido retratados personajes como la reina Isabel II de Inglaterra, Michelle y Barack Obama, Madonna o Serena Williams. Y campañas de publicidad emblemáticas para firmas como Balenciaga, Loewe, Lanvin, Dolce & Gabanna, Givenchy, Zara, Anna Sui o Chloé. Afirma que para crear imágenes que se fijen en la retina la investigación es necesaria y las referencias inevitables, pero siempre aportando un punto de vista nuevo y personal: “A los jóvenes directores les pediría que comprendan el arte y la historia del cine. Sabemos que no son los primeros en crear imágenes, pero deben preguntarse de quién toman prestado y cómo construir a partir de eso. Demasiados directores jóvenes me envían referencias incoherentes en sus propuestas, sin entender el contexto de donde procede la imagen”.
¿Y cuál ha sido su aportación personal, la que la ha llevado a convertirse en la diseñadora de producción de referencia de los grandes fotógrafos? “Creo que hay que abordar el diseño de set como un problema a resolver. ¿Qué mundo queremos ver ahí y cómo podemos contar esa historia de la forma más coherente posible? El resultado debe ser refinado y resuelto. Soy muy cuidadosa y me gusta entender y entender la moda que se va a fotografiar, porque me da el contexto y el sentimiento general que quiero transmitir. Como dijo Diana Vreeland, ‘el ojo tiene que viajar’, no debe haber elementos que interrumpan el flujo visual, aunque es divertido y está bien que a veces haya sorpresas en el set”.