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Adictas al láudano, promiscuas, sufragistas (y pelirrojas): es hora de hablar de las mujeres prerrafaelitas

En el 170 aniversario de la primera exposición de la Hermandad Prerrafaelita, la National Portrait Gallery reivindica el papel de estas 12 mujeres en...

Fanny Cornforth. La exposición Pre-Rafaelite Sisters podrá visitarse entre el 17 de octubre de 2019 y el 26 de enero de 2020 en la National Portrait Gallery de Londres. Sus comisarios quieren "contar las historias olvidadas de las mujeres del movimiento" y explorar su aportación a las artes. Para ello, recuperan las vidas y trabajos de 12 figuras que influyeron en este movimiento artístico, como Fanny Cornforth, que fue la icónica modelo de cabello dorado de Dante Gabriel Rossetti, para quien posó en cuadros como el famoso The Blue Bower (1856) y con quien convivió como ama de llaves y amante. Aunque el entorno de Rossetti no aceptaba su relación, el pintor le dio varias de sus obras y a la muerte de este Cornforth y su marido abrieron una galería de arte. Pasó sus últimos años ingresada en un sanatorio mental de Sussex, donde falleció en 1909.
Jane Morris. "La exposición revela quiénes son las mujeres detrás de los cuadros y su papel creativo en las sucesivas fases de los prerrafaelitas entre 1850 y 1900", destacan los organizadores de la muestra. Y la historia de Jane Morris refleja que fue mucho más que una musa: su vida fue la inspiración detrás de La señorita Brown de Vernon Lee y la protagonista de Pigmalión de George Bernard Shaw (origen de My Fair Lady). Nació en una familia muy humilde de Oxford en 1839 –su padre trabajaba en un establo y su madre era empleada doméstica– y acabó siendo la 'reina' de la Hermandad Prerrafaelita. Tocaba el piano, desarrolló su faceta artística como bordadora y leía francés e italiano. En 1859 se casó con el padre del movimiento Arts & Crafts, William Morris, y trabajó con él en la producción de muebles. Además, encarnó el ideal femenino prerrafaelita: fue la modelo recurrente de Dante Gabriel Rossetti (con quien mantuvo una intensa relación), pero también de Evelyn de Morgan. En la fotografía aparece retratada por John Robert Parsons en 1865.
Evelyn de Morgan. Nació en una familia londinense de clase alta en 1815 y desde la infancia recibió clases de arte, lo que la llevó a ser una de las primeras estudiantes femeninas de la Slade School of Art. Su carrera y su vida fueron un constante desafío a lo establecido: no quiso ser presentada en sociedad, defendió el movimiento sufragista, fue una convencida pacifista y fue ella quien impulsó económicamente con las ventas de sus cuadros la carrera de su marido, el ceramista William de Morgan. Ambos fueron buenos amigos de William y Jane Morris y defendieron la vuelta al trabajo artesano del movimiento Arts & Crafts. Además, Evelyn –eligió firmar con su segundo nombre en lugar de con el primero, Mary, porque era unisex– era sobrina del pintor victoriano John Roddham Spencer Stanhope, a quien visitó con frecuencia en su casa de Florencia, donde descubrió a Botticelli, una de sus mayores influencias. El mecenas de su obra fue William Imrie, magnate escocés propietario de la naviera del Titanic, y hoy una fundación mantiene su legado. En la imagen, Ariadne at Naxos (1877), una pintura de su primera etapa esteticista.
Elizabeth Siddal. Es la mujer que inspiró la icónica Ofelia que flotaba en el agua rodeada de flores por John Everett Millais (retrato para el que posaba en una bañera llena de agua en pleno invierno, lo que, cuentan, la hizo enfermar e iniciar la adicción al láudano que causaría su muerte con 33 años, y también que su padre reclarama una indemnización al artista). Lizzie era costurera en una sombrerería de Londres cuando Walter Deverell se fijó en ella y la contrató como modelo. Luego, en 1853, la pelirroja se convirtió en la obsesión de Dante Gabriel Rossetti  –a quien no le gustaba que posara para otros–, que la identificó con la Beatriz de Dante o la diosa Proserpina. Con él aprendió a pintar y desarrolló una carrera propia en la que tuvo como mecenas al escritor y crítico John Ruskin. Siddal y Rossetti se casaron en 1860 y cuando Lizzie falleció el pintor enterró con ella sus poemas inéditos, algo de lo que se arrepintió años después, por lo que decidió abrir la tumba para rescatar el cuaderno y publicar un libro, que ahora ha editado por primera vez en español Ya lo dijo Casimiro Parker.
Georgiana Burne-Jones. Desde la infancia, las hermanas MacDonald –Georgiana, Alice, Agnes y Louisa– destacaron por sus inquietudes intelectuales. Hijas de un ministro metodista, en su Birmingham natal formaron parte del grupo estudiantil Birmingham Set, del que nació el Pembroke Set de la Universidad de Oxford. Aunque Georgiana estudió para convertirse en artista (se especializó en grabados en madera), destaca por su activismo socialista, su promoción de la inclusión laboral de la mujer, la creación de círculos intelectuales y artísticos (los escritores George Eliot y John Ruskin eran sus amigos y fue la tía preferida de su sobrino, el también escritor y Premio Nobel de Literatura Rudyard Kipling) y las biografías que escribió de su marido, el pintor Edward Burne-Jones, y de su mejor amigo, el artista y pensador William Morris, con quien trabajó ilustrando azulejos. En 1894 obtuvo el título de lady, al concedérsele el de baronet a su marido, pero continuó implicada en la defensa de los problemas sociales, e incluso ostentó un cargo electo en Rottingdean.
Maria Zambaco. Londinense de origen griego, Marie Terpsithea Cassavetti fue una mujer independiente que dedicó su vida a viajar y al arte. Hija de un comerciante y sobrina del cónsul griego, heredó una fortuna que invirtió en aprender escultura, primero en la Slade School of Art y luego en París, con Auguste Rodin como maestro. En 1869 protagonizó un gran escándalo que causó gran impacto en la Hermandad Prerrafaelita: tuvo una relación con Edward Burne-Jones (que la había conocido tres años antes, cuando la retrató por encargo de su madre en el cuadro Cupido y Psique, en la imagen) y este estuvo a punto de abandonar a su mujer, Georgiana, por ella, algo que no hizo finalmente y que acabó con un intento de suicidio con láudano de la escultora. Burne-Jones continuó retratándola, siempre como una mujer que tienta al hombre, como ocurre en La seducción de Merlín o en Filis y Demofonte, que muestra un desnudo frontal masculino polémico en su momento, que llevó a que se retirara de una exposición.
Marie Spartali Stillman. Prima de Maria Zambaco, su padre fue el cónsul general de Grecia en Londres y ella se formó como pintora con Ford Madox Brown, pintor de temas históricos cercano a los prerrafaelitas. Marie Spartali posó para Edward Burne-Jones y Dante Gabriel Rossetti y fue modelo de la pionera de la fotografía Julia Margaret Cameron, pero destacó sobre todo como pintora, trabajo que compartía con su marido, el estadounidense William J. Stillman (que también fue periodista de The Times). Spartali fue reconocida como la más destacada de las pintoras prerrafaelitas y llegó a exponer en la Royal Academy of Arts y hacer una retrospectiva de su trabajo en Estados Unidos. En la imagen, su obra Pretty Heart. 
Christina Rossetti. La Enciclopedia Británica la reconoce como "una de las poetisas británicas más importantes, tanto en producción como en calidad". Era la hermana pequeña del pintor Dante Gabriel Rossetti, su padre era el poeta napolitano Gabrielle Rossetti y su abuelo, Gaetano Polidori, fue el primero en publicar uno de sus poemarios, cuando ella tenía solo 17 años. La espiritualidad y la religión tienen gran presencia en su obra; era una anglicana convencida, y canceló su compromiso con el pintor prerrafaelita James Collinson cuando este se convirtió al catolicismo. Pero además se interesó por la situación de las mujeres en su época: quiso ser enfermera con Florence Nightingale en 1854, durante la Guerra de Crimea, pero no pudo ir al frente, y trabajó como voluntaria en la penitenciaría para prostitutas St. Mary Magdalene de Highgate.
Fanny Eaton. La jamaicana es considerada una de las mujeres de color más visibles de la época victoriana: fue modelo para Simeon Solomon, Dante Gabriel Rossetti, Albert Moore, John Everett Millais o Joanna Mary Boyce (cuyo Retrato de Mrs. Edwards, en la imagen, protagoniza). Fue criada en Londres por su madre, que había nacido esclava en Jamaica (no supo quién era su padre), y trabajó como empleada del hogar hasta que en 1857 se casó con un conductor de carruajes y empezó a trabajar posando para los miembros de la Hermandad Prerrafaelita. Con eso rompió moldes, puesto que las mujeres procedentes de las colonias del Imperio Británico no solían protagonizar obras de arte ni estar representadas en los grandes museos.
Joanna Mary Boyce. Sus obras pueden verse en museos como la Tate Gallery de Londres o el Yale Center for British Art. Fue una pintora destacada en su época: su primera obra, Elgiva (en la imagen), fue expuesta en la Royal Academy of Arts en 1855 y mereció una buena crítica de John Ruskin. La inclinación hacia el mundo del arte le venía de familia: su padre, George Boyce, era marchante y su hermano, George Price, también fue pintor. Ella se inició en la pintura de forma autodidacta hasta los 18 años, pero luego se formó con maestros en París y Roma. Allí se casó con el también pintor Henry Tanworth Wells, retratista de la sociedad de la época, con quien vivía en el momento de su prematura muerte, a los 29 años, durante el parto de su tercer hijo.
Effie Gray. Esta escocesa protagonizó uno de los triángulos amorosos más sonados de la época victoriana. Robert Brownell le dedicó un libro, Marriage of Inconvenience, y en 2014 Richard Laxton llevó esta historia al cine con un guion de Emma Thompson y Dakota Fanning en el papel de Euphemia Effie Gray. La familia de Gray conocía de toda la vida a la de John Ruskin y ella se casó con el crítico, un matrimonio que consiguió anular –alegó que en sus cinco años como pareja no habían mantenido relaciones sexuales y ella seguía siendo virgen– para luego casarse con el pintor John Everett Millais, con quien tuvo ocho hijos. Ese divorcio fue un escándalo en su época: la moral victoriana no aprobó esta muestra de independencia de Effie, que quedó apartada de su intensa vida social como lady, y cuando su segundo marido falleció en 1851 la reina Victoria le prohibió asistir al funeral. En la imagen, Effie Gray en un retrato realizado en 1851 por Thomas Richmond.
Annie Miller. Procedía de una familia muy pobre del barrio londinense de Chelsea, hija de un soldado y una limpiadora. Miller trabajaba como camarera (aunque algunos autores han insinuado que se dedicaba a la prostitución) cuando conoció al pintor Holman Hunt, uno de los fundadores de la Hermandad Prerrafaelita, que se convirtió en su protector, pagando su educación. Posó para él y llegaron a pensar en el matrimonio, pero Hunt rompió ese compromiso, una decisión que causó revuelo entre los prerrafaelitas, pues lo hizo después de que Miller fuera modelo para George Price Boyce y Dante Gabriel Rossetti mientras él viajaba por Palestina. Finalmente se casó con el capitán Thomas Thompson y vivió una vida tranquila y acomodada hasta los 90 años.

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