Las mujeres que limpian, invisibilizadas, ahora se suben al escenario del CDN
La compañía gallega A Panadaría despliega su humor protesta con ‘Las que limpian’. Tras su estreno en Galicia llega al Centro Dramático Nacional.
Coincide en los últimos meses que desde distintos ámbitos se está tratando el tema de la situación de las limpiadoras, de la serie La asistenta, protagonizada por Margaret Qualley en Netflix, a Ceniza en la boca (Sexto Piso), la nueva novela de ...
Coincide en los últimos meses que desde distintos ámbitos se está tratando el tema de la situación de las limpiadoras, de la serie La asistenta, protagonizada por Margaret Qualley en Netflix, a Ceniza en la boca (Sexto Piso), la nueva novela de Brenda Navarro, en la que la protagonista se une al movimiento de las empleadas de hoteles. “Están haciendo un trabajo esencial que no se valora. Y eso lo ha hecho más visible la pandemia, por lo que está habiendo una conciencia sobre ese tema, que también se está tocando mucho desde el feminismo”, comenta Noelia Castro, una de las tres fundadoras de la compañía viguesa A Panadaría, que ahora lleva su nuevo montaje, Las que limpian, al Centro Dramático Nacional, tras su estreno en Galicia.
Castro, Areta Bolado y Ailén Kendelman se conocieron cuando estudiaban arte dramático en la Esad de Vigo. “Empezamos en los bares, no teníamos intención de formar una compañía profesional, surgió de manera espontánea”, explica Kendelman. A Panadaría, nació en 2013 con el espectáculo Pan! Pan!, al que siguieron Panamericana, la versión teatral de la historia de Elisa y Marcela (primer matrimonio entre mujeres en España, llevado al cine por Isabel Coixet) y ahora Las que limpian. La obra “habla de la lucha organizada de las camareras de piso de los hoteles por conseguir unos derechos laborales y sociales justos”, resumen. ¿Y por qué han elegido este tema? “Siempre nos fijamos en historias que pueden parecer de mujeres invisibles, nos interesa ponerlas sobre el escenario y hacerlas visibles”, explica Bolado. Su obra se localiza en A Toxa, en las Rias Baixas, pero para documentarse entrevistaron a camareras de piso en hoteles de distintos lugares, de Galicia a Canarias. “Vimos que todas piden lo mismo, independientemente de la zona: reclaman unas condiciones de trabajo dignas y que se valore el trabajo que hacen”, apunta Kendelman.
Las tres fundadoras de la compañía se suben al escenario para ponerse en la piel de unos personajes que interactúan con el público y cuyos diálogos van evolucionando función tras función. Se sirven de la comedia para abordar temas sociales. “Tradicionalmente se consideró un género menor, pero para nosotras es una herramienta de transformación y de crítica muy potente”, argumenta Bolado, “intentamos siempre estar en la búsqueda de un humor crítico, que se ría más del poderoso que de la persona que está debajo”. En su caso, además de destacar que “las camareras de piso son en un 98% mujeres y, como pasa con otras profesiones feminizadas, es menos valorada y está en peores condiciones”, indica Castro, plantean “qué responsabilidad tiene la sociedad cuando consume turismo”, cómo esos viajes inciden en el medio ambiente. Todo, con un objetivo claro, recalca Bolado: “Creemos que el humor que puede transformar es el protesta, el humor que denuncia algo”.
En este nuevo espectáculo, que podrá verse en el María Guerrero hasta el 15 de mayo, las fundadoras de A Panadaría se formulan estas preguntas: ¿es posible revalorizar este trabajo y desligarlo del género? ¿Existe un turismo sostenible? ¿Quién limpia la casa de la limpiadora? “Hay personas que nunca han limpiado un váter y hay otras que limpian 500 al mes. Las que limpian no habla solo de trabajadoras de la limpieza, habla de mujeres y del suelo mojado sobre el que caminamos cada día”, explican. La obra llega al Centro Dramático Nacional en el preciso momento en el que se debaten las prestaciones por desempleo de las empleadas del hogar en el marco de la nueva reforma laboral.