Ataque de nostalgia: 5 anuncios de Navidad inolvidables

Reconozcámoslo, esta Navidad no tenemos ningún motivo para encender la televisión (villancicos de Raphael aparte). Desde que la publicidad se renovó, bien por la crisis económica o bien por vergüenza, no nos queda ni un atisbo de aquellos anuncios que formaron parte, año tras año, de nuestras fiestas navideñas. O acaso nadie echa de menos a esa rubia en moto que buscaba desesperadamente a Jacq´s: "un hombre alto, fuerte y muy especial". Sí, todo el mundo sabía que esa bajada de cremallera en el escote marcaba el comienzo de la Navidad, o al menos de la temporada de compras compulsivas. 
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Reconozcámoslo, esta Navidad no tenemos ningún motivo para encender la televisión (villancicos de Raphael aparte). Desde que la publicidad se renovó, bien por la crisis económica o bien por vergüenza, no nos queda ni un atisbo de aquellos anuncios que formaron parte, año tras año, de nuestras fiestas navideñas. O acaso nadie echa de menos a esa rubia en moto que buscaba desesperadamente a Jacq´s: "un hombre alto, fuerte y muy especial". Sí, todo el mundo sabía que esa bajada de cremallera en el escote marcaba el comienzo de la Navidad, o al menos de la temporada de compras compulsivas. 

Otro perfume que indicaba el inicio de las fiestas, este con un aire más naïf, era Gloria Vanderbilt y sus inmortales cisnes.

En el apartado de bebidas nos encontramos con el clásico anuncio del cava Freixenet. Aunque en 2009 no se grabó el spot debido a la crisis (se emitió el del año anterior protagonizado por el equipo español de natación), vuelve este año con Sara Baras. Sin embargo, por mucho que su flamenco nos ponga la carne de gallina, nosostros siempre recordaremos aquel en el que Sharon Stone compartía camarote con Antonio Bandoneras (1992) o en el que Kim Basinger cantaba As Time Goes By (1993). 

Pero si hay una publicidad ligada a la llegada de la Navidad, ésa es la del turrón El Almendro. Desde la década de los 80 su sintonía casi forma ya parte del repertorio de villancicos.

No tanto como las muñecas de Famosa, canción que lleva tarareándose desde 1970 y que podría competir en popularidad con Los peces en el río.

Así que este año, ante la escasez de clásicos televisivos todo apunta a que el anuncio con más éxito será el de la Lotería, y no por entrañable porque hasta el calvo que repartía suerte ha sido sustituido, sino por las ganas de ingresar un dinero extra el 22 de diciembre.