Por qué Peter Kavinsky es la última fantasía por la que suspira Internet
O cómo el coprotagonista de ‘A todos los chicos de los que me enamoré’, la última comedia romántica de Netflix, ha vuelto loco (y conquistado) a prácticamente toda la red, incluida Millie Bobby Brown.
«Peter Kavinsky, si estás por ahí, por favor, contáctame!». Hasta Millie Bobby Brown, la protagonista de Stranger Things, anda trastocada con la última fantasía romántica de Internet. Desde que se ha estrenado A todos los chicos de los que me enamoré (Netflix), la red está a revolucionada, por decirlo sutilmente, con un personaje de ficción, convertido en protagonista único de virales, memes, artículos laudatorios y una comunidad de fans que suspira por Peter Kavinsky desde cualquier rincón de Internet. (Aviso para navegantes...
«Peter Kavinsky, si estás por ahí, por favor, contáctame!». Hasta Millie Bobby Brown, la protagonista de Stranger Things, anda trastocada con la última fantasía romántica de Internet. Desde que se ha estrenado A todos los chicos de los que me enamoré (Netflix), la red está a revolucionada, por decirlo sutilmente, con un personaje de ficción, convertido en protagonista único de virales, memes, artículos laudatorios y una comunidad de fans que suspira por Peter Kavinsky desde cualquier rincón de Internet. (Aviso para navegantes, en este fandom no se dice Peter ni Pete ni Kavinsky; aquí se idolatra en masa a Peter Kavinsky con nombre y apellidos de forma indisoluble, como todo buen flechazo televisivo a lo Stringer Bell).
Para evaluar el grado de enajenación romántica que el público ha desarrollado con el personaje que interpreta Noah Centineo (22 primaveras y próximo icono de la comedia romántica adolescente: también protagonizará Sierra Burgess es una perdedora), basta con echar un vistazo a algunos de los titulares que ha generado Peter Kavinsky en apenas pocos días: 22 tuits sobre Peter Kavinsky de gente más caliente que tú (Buzzfeed), ¡Ayuda! Soy una mujer adulta con un novio adolescente de ficción, Peter Kavinsky (Broadly), Peter Kavinsky te hará creer en el amor de nuevo (The Cut) o Has estado genéticamente diseñada para enamorarte de Peter Kavinsky (Elle Australia). Además de textos libidinosos, también se escriben escuetas fan fictions donde fantasear con próximas rom coms a interpretar por Centineo y en las que siempre, siempre, Mark Ruffalo –con quien guarda un inquietante parecido– haga de padre divorciado en apuros:
¿Y quién es Peter Kavinsky? Pues uno de los dos (fantásticos) intereses románticos de Lara Jean, la protagonista de la novela superventas de Jenny Han que Netflix ha adaptado a la pantalla con la dirección de Susan Johnson. Con Peter Kavinsky, Lara Jean urde uno de los trucos más viejos de la rom com, vista en otros clásicos como No puedes comprar mi amor (1987) o Novio de alquiler (1997): el de fingir una relación amorosa de cara a la galería pero que acabará con los dos sujetos totalmente colgados el uno del otro. Kavinsky es el chico más popular del instituto, la estrella del equipo de Lacrosse y, lejos de ser un rebelde con causa, es un cachas con corazón de oro, que sabe escuchar y con inteligencia emocional afectiva.
Peter Kravinsky cierra la cuadratura del círculo del Good Bro, aquel ‘buen tío’ que se puso de moda con personajes como el de Adam Sackler y su cambio drástico en la tercera temporada de Girls o Nick Miller en New Girl. Peter Kravinsky nunca se convertirá en el niño-hombre de las pelis de Judd Apatow y tampoco es la versión masculina de la Manic Pixie Dream Girl que supuso el Good Bro. Peter Kavinsky, simplemente, es la evolución perfecta de la fantasía de novio de instituto. «Él es una amalgama y una evolución de todos los chicos que hemos amado con anterioridad», apuntan en The Cut y lo resumen con un pastiche a lo Frankenstein: «tiene el pelazo a lo Jordan Catalano, los hombros de Jake Ryan, la inteligencia emocional de Duckie, la sonrisa pícara de Paul Walker en cualquier papel y la dedicación romántica de Max Goof«.
Tras la oleada de buenas críticas a «la mejor comedia romántica del verano» (un soplo de aire fresco y digna heredera de la era de oro de John Hugues), Centineo bromea con el alud de insinuaciones que recibe a diario y con el hecho de no tener miedo a interpretar a una fantasía imposible con la que sueña la red. «Es difícil hacer una comedia romántica que no sea, digamos, mala. Cuando se trata de chicos jóvenes haciendo comedias románticas, debes tener cierto nivel de apertura mental y vulnerabilidad, al mismo tiempo, de tener ese don para ser un ‘protagonista masculino’. Encontrar el punto medio y ser capaz de interpretar momentos románticos, ser un poco bruto, pero también tener sensibilidad –y hacerlo de forma natural y auténtica–. Simplemente tienes que ser el tipo de persona que pueda hacerlo. Supongo que a algunos actores no les gusta encarnar a ese tipo de persona». Ilusos ellos, ese personaje ha dejado a medio Internet preguntándose: «¿Qué estoy haciendo mal que no tengo un Peter Kavinsky en mi vida?».