Penélope Cruz rinde homenaje a Karl Lagerfeld desfilando para Chanel
La actriz española ha protagonizado un momento histórico para la moda subiéndose a la pasarela en el primer desfile de la firma francesa tras la muerte del que fuera su director creativo durante más de tres décadas.
A pesar de que Karl Lagerfeld dio instrucciones para evitar homenajes lacrimógenos, era impensable que la firma para la que trabajó durante más de tres décadas no le rindiera tributo en el primer desfile tras su muerte a los 85 años. Chanel acaba de presentar en París la ...
A pesar de que Karl Lagerfeld dio instrucciones para evitar homenajes lacrimógenos, era impensable que la firma para la que trabajó durante más de tres décadas no le rindiera tributo en el primer desfile tras su muerte a los 85 años. Chanel acaba de presentar en París la última colección que el káiser diseñó para la enseña y Penélope Cruz ha hecho historia al subirse a la pasarela desfilando para la maison francesa. La actriz, que se convirtió hace unos meses en la primera embajadora española de Chanel y protagonizó la campaña Crucero 2018/19 fotografiada por el mismísimo Lagerfeld, mantenía una estrecha relación con el diseñador y no ha querido dejar pasar la oportunidad de rendirle un mediático homenaje.
El desfile, ambientado en la pureza y calma de un blanco pueblo alpino, comenzaba con las modelos guardando un minuto de silencio en memoria del genio. La top model Cara Delevingne, musa de Lagerfeld y defensora de su memoria tras su muerte, ha sido la encargada de abrir el show ataviada con traje y abrigo. El titular, sin embargo, lo ha protagonizado Penélope Cruz, que se ha subido a la pasarela convertida en una particular reina de las nieves con un minivestido blanco y fue la única modelo en portar en la mano una camelia blanca, flor favorita de Coco Chanel y símbolo icónico en el imaginario de la enseña. La actriz ha mantenido la sonrisa durante su recorrido por la pasarela, pero estaba visiblemente emocionada, como muchas de las modelos que no han podido reprimir las lágrimas cuando, al final del show, sonaba Heroes de David Bowie (la misma canción que se pudo escuchar en el desfile-homanje de Fendi, firma de la que también era director creativo). Personalidades del mundo de la moda y musas del alemán como Naomi Campbell, Claudia Schiffer o la actriz Kristen Stewart no perdieron detalle de la colección desde la primera fila del multitudinario desfile (al parecer decenas de invitados confirmaron su asistencia en el último momento).
No es la primera vez que la actriz madrileña hace las veces de modelo. En 1998 desfiló para la firma Victorio y Lucchino, pero verla en el Grand Palais ha sido una gran sorpresa y, sin duda, su presencia en un momento clave para el devenir de la marca fundada por Coco Chanel pasará a forma parte de la historia de la moda. Junto a ella han desfilado otros rostros habituales de la marca como Kaia Gerber –hija de Cindy Crawford–, Mariacarla Boscono o la propia Delevingne.
La actriz española ha cultivado durante años su relación con la firma francesa. Asistió a un desfile de Chanel por primera vez en 1999. Desde entonces se ha dejado ver en numerosas ocasiones vistiendo diseños de la casa: en los Oscar, los Goya o en el Festival de Cannes, donde eligió numerosos vestidos vintage y alta costura de la marca en la última edición. También en la gran pantalla ha aparecido vestida por la firma. En Los Abrazos Rotos de Pedro Almodóvar (2009), la actriz lució un espectacular diseño negro decorado con cadenas doradas de Chanel. El círculo se cierra con la madrileña desfilando para la histórica marca.
La maison, ahora capitaneada por Virginie Viard (la que fuera mano derecha del alemán durante 30 años), se enfrenta a una nueva etapa, al parecer, de continuidad. Tanto por la elección de la nueva directora creativa como por el mensaje que han recibido todos los asistentes: «The beat goes on» («el ritmo continúa»), frase acompañada por una ilustración de Karl Lagerfeld junto a Coco Chanel, firmada por el diseñador.
En la escenografía, como siempre, no ha faltado detalle: desde los esquís que la firma lanzó con bastante repercusión en 2006 hasta chimeneas que emulaban expulsar humo. Una perfecta recreación de un paraíso invernal que, vestido de un particular luto blanco, despide al gran genio de la moda del siglo XX.