París Fashion Week, día 3: Marant, Dior, Chalayan y Mouret
Revisamos las colecciones del día en el que Dior volvió a sus orígenes.
La mañana en esta tercera jornada de desfiles parisinos ha arrancado hoy con las propuestas de Roland Mouret. El otrora diseñador preferido de Victoria Beckham -con la que llegó a colaborar en su momento lanzando una colección cápusla de little black dresses– y bien querido entre muchas celebrities -como Charlize Theron, Scarlett Johansson o la británica de moda por excelencia: Catalina Middleton-, presentaba en el hotel Westin sus diseños de primaver...
La mañana en esta tercera jornada de desfiles parisinos ha arrancado hoy con las propuestas de Roland Mouret. El otrora diseñador preferido de Victoria Beckham -con la que llegó a colaborar en su momento lanzando una colección cápusla de little black dresses– y bien querido entre muchas celebrities -como Charlize Theron, Scarlett Johansson o la británica de moda por excelencia: Catalina Middleton-, presentaba en el hotel Westin sus diseños de primavera/verano 2012 sin despegarse de su creación más célebre desde 2007: el Moon Dress. Un patrón que el francés interpreta una y otra vez en diferentes tonos, estampados y medidas; con mangas, sin ellas, de escote en V, cruzado, halter y ligeramente por encima o debajo de la rodilla. Experto en aposentar las curvas femeninas en su sitio -antes del Moon, vino el Galaxy, en 2005- los cambios de rasante parecen rectas en sus manos.
Vestido mostaza estampado, de Roland Mouret.
Imaxtree
Tras la coquetería de Mouret, Hussein Chalayan ha puesto el toque asceta a la previa del fin de semana: por mucho que introduzca color -sorbete, básicamente- o estampados, y hasta elementos tan comunes como las gorras -será porque todo se pega cuando se es director creativo de Puma– o sombreros de lo más rudimentario, vamos por mucho que lo percibamos menos abstracto que de costumbre, cuesta quitarnos del cristalino del ojo su telilla de frugalidad.
Rodolfo Paglialunga se apunta a la tendencia estrellada, en prints y aplicaciones, para Vionnet. Lejos quedan ya sus inicios excesivamente lánguidos, poco armados. Aunque se siga aferrando a la utilización de túnicas o vestidos capa, que drapea y abullona sin parar, y todas sus prendas tengan el paso ligero, se pasa del lado tailoring con pantalones y trajes de chaqueta.
Vestido fucsia con aplicaciones, de Vionnet.
Imaxtree
Lo anunciaba ayer mismo Sidney Toledano: el nombre del nuevo director creativo de Dior se dará a conocer en las próximas semanas -eso si no se lo repiensan y hacen como en Ungaro, la casa de los vaivenes, que tras despedir a Gilles Deacon ha decidido que pasa de individualismos y prefiere que las petites mains se ocupen de su cotarro- así que sí, ha sido Bill Gaytten el que ha salido a saludar al final del primer desfile prêt-à-porter sin Galliano. Quién avisa no es traidor, y ya la nota de prensa apestaba a espantada; después de la desagradable sorpresa de la Alta Costura, el diseñador interino ha ejercido hoy de mero operario. El suyo ha sido un trabajo de repaso y deposición, con sumo cuidado y la mínima alteración posible, del legado primigenio concebido por monsieur Christian Dior. Una maniobra que huele a querer borrar de un plumazo el rastro retorcido y sobresaliente de John Galliano en la maison. Cada uno de los diseños volcados esta tarde sobre pasarela parecía estar calibrado con precisión alquimista: el control de daños, chez Toledano, ha funcionado a la perfección. Silueta bar, faldas de organza, vestidos de chiffon; una paleta de colores de lo más apagada -blanco roto, perla, nude, azul y verde pálidos, negro y una concesión de gracia al rojo-, tocados de Stephen Jones y chignons.
El rojo Dior rescata la esencia de la firma.
Imaxtree
Como en Balmain, la mujer Isabel Marant se queda como está. Vamos, que si esto fuera cuestión de loterías y apuestas del estado, se quedaría con lo echado. Sus jeans siguen siendo pitillo; sus faldas, imperceptibles y sus vestidos, mínimos. Vuelve a flirtear con el quarterback del instituto: ahora con camisetas y pantalones de chandal (de los de pata ancha y ralla lateral blanca). Lo que ayer eran cuadros, hoy son desteñidos o es patchwork, y para las primaveras fresquitas, Isabel sugiere parkas y chunky knit.
Isabel Marant apuesta por jerséis de punto grueso.
Imaxtree