Dice que no necesitamos más ropa pero Isabel Marant sigue y sigue…
La colección otoño-invierno 2012/13 de la diseñadora es tan comercial y deseable como las anteriores.
Más de una y más de dos acabaron hartas de la inspiración Lejano Oeste que nos llenó de flecos el verano pasado pero, seguramente, al ver la colección otoño-invierno 2012/13 de Isabel Marant, esa mujer en contra del consumismo exacerbado, se tragarán el orgullo vaquero y volverán a suspirar por las botas camperas, las camisas de cowboy (de cuello y bolsillo ribeteado) y los pantalones de ante que parece que incorporen cartuc...
Más de una y más de dos acabaron hartas de la inspiración Lejano Oeste que nos llenó de flecos el verano pasado pero, seguramente, al ver la colección otoño-invierno 2012/13 de Isabel Marant, esa mujer en contra del consumismo exacerbado, se tragarán el orgullo vaquero y volverán a suspirar por las botas camperas, las camisas de cowboy (de cuello y bolsillo ribeteado) y los pantalones de ante que parece que incorporen cartucheras.
No falta en su repertorio una beisbolera, la puntilla victoriana, los pitillos rojos como los que puso de moda en el invierno de 2010 o sus recurrentes minivestidos de volantes. Como novedad propone tops de piel troquelada y flores bordadas en los laterales de unos pantalones abotonados más piratas -algunos de ellos se acordonan- que tobilleros. El rosa palo sigue siendo su color base y lo mezcla con burdeos, añil, piedra, blanco y crema.