«Era imposible encontrar un vestido de novia»: el primer ‘e-commerce’ de moda para personas con discapacidad
La web multimarca Adaptista busca dar respuestas realistas al creciente mercado de la ropa adaptativa y ofrecer asesoramiento a marcas que apuestan por una moda accesible a todos.
Maria O´Sullivan-Abeyratne tiene espondilitis anquilosante, una variante de artritis que afecta de forma temprana a la columna y la pelvis. “En 2019 me fue casi imposible encontrar un vestido de novia que fuera fácil de poner y de llevar. Varios miembros de mi familia también tienen discapacidades, así que en este proceso me di cuenta de que había muy pocas opciones para nosotros en el mercado”, explica a esta revista. Un mercado, el de la ropa adaptativa, como comúnmente se la denomina, que se estima alcanzará los 126 billones de dólares anuales en 2026, pero que, como suele ocurrir, apenas e...
Maria O´Sullivan-Abeyratne tiene espondilitis anquilosante, una variante de artritis que afecta de forma temprana a la columna y la pelvis. “En 2019 me fue casi imposible encontrar un vestido de novia que fuera fácil de poner y de llevar. Varios miembros de mi familia también tienen discapacidades, así que en este proceso me di cuenta de que había muy pocas opciones para nosotros en el mercado”, explica a esta revista. Un mercado, el de la ropa adaptativa, como comúnmente se la denomina, que se estima alcanzará los 126 billones de dólares anuales en 2026, pero que, como suele ocurrir, apenas está contemplado en los canales habituales de consumo de moda.
Marcas como Nike, Target o Tommy Hilfiger comenzaron a explorar hace un par de años las posibilidades del mercado adaptativo con prendas y calzado fácil de poner y de usar, sin embargo, el problema era precisamente es, la falta de un mercado cohesionado “en términos de comunicación y de desarrollo”, explica Maria. Estos dos años de investigación le han llevado a lanzar, hace escasamente una semana, Adaptista, el primer e-commerce multimarca enfocado a la moda adaptativa. Por ahora comercializa una decena de marcas, como la catalana Free Form, pensada para ser útil a las personas con discapacidad motora; Kohl, una firma de cosmética que presta atención a los problemas derivados del cáncer y otras enfermedades crónicas, Davies and Daughters, joyería que graba mensajes en braille o Constant & Zoe, prendas para unisex para niños con falta de movilidad. “Trabajamos con ellas para seguir desarrollando sus diseños, hacerles ver cómo pueden ser más adaptativos o mostrarles errores”, explica la fundadora. El equipo de Adaptista también tiene discapacidades, por eso más que una tienda multimarca, prefieren concebir su proyecto como una comunidad real, “porque para una marca pequeña, por ejemplo, no tiene el dinero necesario para probar bien sus diseños y ver que realmente funcionan. Nosotros intentamos darle ese asesoramiento, y ahora estamos buscando financiación para poder realizar esas pruebas de forma continúa”, comenta. También les asesoran en el diseño de sus respectivas webs, que para María son el gran reto de este mercado. “Fue muy difícil encontrar desarrolladores concienciados con la causa. Hay una falta de interés en hacer de la tecnología algo accesible, es muy frustrante”, opina.
Finalmente, se asociaron con el estudio Glaze Digital, especializada en acceso digital y con un psicólogo experto en consumo para desarrollar una página con textos en audio para los invidentes, imágenes limpias que pueden cambiar de color y tamaño para las personas que sufren sinestesia. Su asociación con la aplicación Recite Me permite al cliente cambiar de pantallas a través de comandos de voz y ahora mismo se encuentran implementando un probador virtual para personas con enanismo y lipedema. “Cuando la gente no experimenta la discapacidad, es normal que no piensen en ella” comenta Maria, refiriéndose a la falta de marcas o de aplicaciones tecnológicas en el mercado, “pero creo que por primera vez la industria de la moda está contratando personal con discapacidad en distintos puestos, y eso cambiará las cosas”, admite. “Antes este era un tema que pasaba muy desapercibido, pero el envejecimiento de la población o las enfermedades derivadas del covid han hecho que mucha más gente se está dando cuenta de la importancia de tener una moda accesible para todo el mundo”, opina. Entre los planes a medio plazo de Adaptista se encuentra, de hecho, crear un programa de becas para estudiantes de diseño o ayudar o crear vínculos entre grandes tiendas online de moda y firmas de moda adaptativa. Pero para eso, por el momento, necesitan inversión. “Y no es nada fácil”, confiesa. “La visibilidad es la clave para que el apoyo económico llegue”.