Javier Mariscal: «Para las mujeres, vestirse bien es una declaración de amor»

Amante del low cost, Paul Smith y las prendas originales, confiesa que nunca se pondría una corbata, pero sí chaquetas de mujer.

Conocimos su nombre hace 20 años cuando creó el célebre Cobi, que fue la imagen de los Juegos de Barcelona. Desde entonces, Javier Mariscal ha sido cabeza visible del diseño español. Ahora triunfa gracias al éxito de Chico y Rita, la película de animación que ha hecho junto a Fernando Trueba y que, tras lloverle otros premios, rozó el Oscar de Hollywood.

Me gustó el esmoquin que llevaba la noche de los Oscar.

Gracias. Me lo hizo Josep Abril especialmente para ese día. Me regaló el diseño y la confección, y yo pagué la tela.

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Conocimos su nombre hace 20 años cuando creó el célebre Cobi, que fue la imagen de los Juegos de Barcelona. Desde entonces, Javier Mariscal ha sido cabeza visible del diseño español. Ahora triunfa gracias al éxito de Chico y Rita, la película de animación que ha hecho junto a Fernando Trueba y que, tras lloverle otros premios, rozó el Oscar de Hollywood.

Me gustó el esmoquin que llevaba la noche de los Oscar.

Gracias. Me lo hizo Josep Abril especialmente para ese día. Me regaló el diseño y la confección, y yo pagué la tela.

¿Cómo se viste a diario?

Con vaqueros pitillo y oscuros. En invierno, voy a capas: camiseta, jersey fino, otro jersey, una rebeca de lana, una cazadora de cuero, bufanda y guantes. Para verano, vaqueros y camiseta.

¿Y el calzado?

Zapatillas de deporte o zapatos de cuero que las imiten con calcetines de colores de H&M. Compro mucho low cost.

¿Y cuando se quiere dar un homenaje?

Paul Smith. Me gusta muchísimo su ropa, y además lo conozco. Cuando me nominaron al Oscar, se enrolló y me invitó a pasarme por su tienda para coger lo que quisiera. Me puse morado…

¿Qué hace con la ropa que deja de usar?

Yo tengo una regla: me deshago de todo lo que no me he puesto en dos años. Hace unos días llevé a una ONG tres maletas llenas de ropa en perfecto estado.

¿No le tienta el diseño de ropa?

Sí, sobre todo de ropa femenina. Me encantaría hacer algo. En los 80, mis hermanos tenían una firma de ropa, Tráfico de modas, y yo les hacía estampados. Creo que su marca, ya desaparecida, fue la inspiración para que aparecieran Custo o Desigual. Hacían cosas fantásticas, cuidaban mucho los materiales, la estampación… una camiseta aguantaba 100 lavados. Por desgracia, ya no se fabrica así.

¿Se fija en cómo va vestida la gente?

Muchísimo. Sobre todo las chicas. Tengo la sensación de que para las mujeres, vestirse bien es una declaración de amor al prójimo, una muestra de respeto. En los hombres, sin embargo, cuidar la indumentaria es una forma de subrayar su poder frente a los demás. De impresionar.

¿Diría que en España se viste bien?

Sí, sobre todo las nuevas generaciones, que han espabilado mucho. El auge de las tiendas low cost ha provocado una evolución positiva de la estética. La gente ha aprendido a vestirse, a arreglarse.

Dígame una prenda que le guste mucho.

Las camisetas y las chaquetas de lana con botoncitos. Tengo muchas. Algunas de chica.

¿Y una prenda que deteste?

El traje con corbata. Lo identifico con el uniforme de los banqueros, el colectivo más antipático que existe.

Entiendo que no se pondría uno ni a tiros.

Lo hice alguna vez porque me lo pidieron, pero eso se acabó. Voy como quiero, y las corbatas, ni verlas.

¿Cuál es la prenda más bonita de su armario?

Una chaqueta con solapas, de color azul índigo, que tiene las estructuras de los bolsillos hechas con retales. Es elegante, descarada, simpática. Me la pongo y me siento arropado. Como si quien la hizo estuviese dándome un abrazo.

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