Los nuevos ‘Brangelina’: la pareja más querida de Hollywood también es la más taquillera
Los intérpretes Emily Blunt y John Krasinski, casados desde 2010, arrasan con el filme de terror ‘Un lugar tranquilo’ y se confirman como la prueba más fehaciente de que los amores de película todavía existen.
Después de lo de Brad y Angelina. Y de lo Chris Pratt y Anna Faris. Por no hablar de Jennifer Aniston y Justin Theroux, Channing Tatum y Jenna Dewan o Gigi Hadid y Zayn Malik. Con apenas unos pocos meses de diferencia, varias de las parejas más célebres de Hollywood han llegado a su final. Por eso algunos mitómanos de la meca del cine, en alerta ante la plaga de amores idílicos en peligro de extinción, han convertido en viral este llamamiento: ...
Después de lo de Brad y Angelina. Y de lo Chris Pratt y Anna Faris. Por no hablar de Jennifer Aniston y Justin Theroux, Channing Tatum y Jenna Dewan o Gigi Hadid y Zayn Malik. Con apenas unos pocos meses de diferencia, varias de las parejas más célebres de Hollywood han llegado a su final. Por eso algunos mitómanos de la meca del cine, en alerta ante la plaga de amores idílicos en peligro de extinción, han convertido en viral este llamamiento: “Protejamos a Emily Blunt y John Krasinski cueste lo que cueste”. Los fans afirman no poder soportar una hipotética ruptura del último bastión, faro y epítome del cuento romántico made in Hollywood. Ese que cruza los caminos de una joven procedente de la clase alta londinense y un chicarrón criado en los suburbios de Boston. Ahora, el éxito sentimental de la pareja se traslada también al terreno cinematográfico gracias a Un lugar tranquilo. Krasinski dirige y protagoniza junto a su mujer el thriller de terror que arrasa en Estados Unidos (tercer mejor estreno de la historia del género) y que ha desbancado de lo más alto de la taquilla al mismísimo Steven Spielberg. Una historia de amor que comenzó en una galería de tiro.
John Krasinski conoció a Emily Blunt en 2008. Por aquel entonces, él era uno de los actores televisivos más queridos del país gracias a su entrañable Jim Halpert de la serie The Office. Ella, recién llegada del Reino Unido, toda una revelación por su abnegada asistente en El diablo viste de Prada, papel que le otorgaría el mayor honor al que puede aspirar uno en la meca del cine sin tener forma de estatuilla: la designación de Meryl Streep como la mejor intérprete joven con la que jamás había trabajado. Se conocieron en un restaurante gracias a un amigo en común y, según han declarado ambos, fue todo un flechazo. Krasinski, aterrado y escéptico con sus posibilidades reales de conquistarla, decidió llevarla a una galería de tiro en su primera cita. “Estaba tan convencido de que jamás acabaría con ella que pensé ‘Voy a volar esto por los aires yo mismo’ y así no me sentiré tan mal”, explicó en una entrevista con Conan O’Brien. Puede que fueran los gritos de pavor que salieron de boca del actor en sus disparos los que convirtieron un potencial desastre en un inverosímil pero triunfal primer encuentro.
La pareja contrajo matrimonio en Italia en 2010 y tiene tres cosas más en común: dos hijas, de 4 y 2 años, y su rechazo a formar parte del multimillonario universo cinematográfico de Marvel: Capitán América (Chris Evans) y Viuda Negra (Scarlett Johansson) deberían haber tenido su cara. En lugar de enfundarse las mallas y agarrar el escudo, Krasinski decidió dedicar su tiempo a formarse como cineasta y, sobre todo, a alimentar su fanatismo por El diablo viste de Prada, película que había visto en más de 70 ocasiones antes de iniciar la relación, según recoge la revista Time: “Acabábamos de empezar a salir y un día que estaba viéndola vino a mi casa. Abrió la puerta y cambié rápidamente de canal así que me miró como pensando que estaba viendo porno. Pensé que era mejor para mí que creyera que veía porno a El diablo viste de Prada por septuagésima quinta vez”.
Pero no ha sido una comedia romántica la que ha marcado el mayor hito en las carreras de la pareja, sino el género que Krasinski rehuyó como espectador “por miedica” durante toda su vida. Su tercera película como director es Un lugar tranquilo, un thriller de terror prácticamente mudo en el que una familia debe evitar hacer cualquier sonido que guíe hasta ellos a una amenazante criatura. Con solo un fin de semana de presencia en la cartelera estadounidense, el filme ha superado cualquier expectativa optimista. Desbancando a la superproducción de Steven Spielberg Ready Player One del número uno y triplicando su presupuesto con hasta 50 millones de dólares de recaudación. El público y la crítica se deshacen en halagos ante las interpretaciones de Krasinski y Blunt y el mismísimo maestro Stephen King la ha calificado de “extraordinaria”. Como Déjame salir hace poco más de un año y pese al largo camino por delante, Un lugar tranquilo ya está recibiendo los primeros cantos de Oscar.
Cuando su marido le presentó el proyecto, Blunt acababa de ser madre de su segunda hija y se encontraba en plena preparación de la esperadísima secuela El regreso de Mary Poppins, que protagoniza, así que recomendó a una actriz amiga para encabezar el reparto de Un lugar tranquilo. “No estaba segura de querer meterme en toda la oscuridad de la presentación que me hizo”, confesó Blunt en el programa de Graham Norton. Una vez leyó el guión, y a pesar de que Krasinski ya había contactado con la intérprete sugerida para ofrecerle el papel, lo tuvo claro: “Llámala de nuevo y despídela”. El nombre de la mencionada actriz no ha trascendido, pero Blunt bromeó con que su amistad ha continuado intacta hasta el aplaudido lanzamiento del filme. Un lugar tranquilo se estrena este 20 de abril en España.