Coque Malla y otros artistas que les negaron sus canciones a los políticos
El autor de ‘No puedo vivir sin ti’ convirtió en viral un vídeo en el que aclara a Vox el significado real de la canción que el partido de extrema derecha usó sin su permiso en un mitin. De Trump a Rajoy, repasamos otras controversias similares.
El cantante Coque Malla, exlíder de la banda Los Ronaldos, se convirtió este pasado lunes 8 de octubre en el inesperado protagonista de las redes sociales al convertir en viral el verdadero significado del mayor éxito de su carrera: No puedo vivir sin ti. El tema, lanzado en 2008 dentro del disco La bola extra y cuya letra ha sido vinculada erróneamente a la adicción a las drogas, se hizo popular a principios de esta década gracias a su inclu...
El cantante Coque Malla, exlíder de la banda Los Ronaldos, se convirtió este pasado lunes 8 de octubre en el inesperado protagonista de las redes sociales al convertir en viral el verdadero significado del mayor éxito de su carrera: No puedo vivir sin ti. El tema, lanzado en 2008 dentro del disco La bola extra y cuya letra ha sido vinculada erróneamente a la adicción a las drogas, se hizo popular a principios de esta década gracias a su inclusión en el spot televisivo de una multinacional de decoración. Hace menos de un año, la versión que hicieron de ella los aspirantes Aitana y Cepeda en el talent de TVE Operación Triunfo la transformó en un himno romántico. Este pasado sábado, en un multitudinario mitin celebrado en el madrileño Palacio de Vistalegre, el partido de extrema derecha Vox se sirvió de ella para señalar –de la manera más textual posible– su amor por la patria. Sin embargo, y en palabras del propio Malla, “pueden haber metido un poco la pata”. El vocalista aclaró que la canción que la organización utilizó sin su permiso está inspirada en la “relación homosexual de dos amigos gays muy queridos”. “Como me cuesta trabajo pensar que ustedes apoyen nada que tenga que ver con la cocaína (nunca se sabe, pero me cuesta trabajo), me inclino a pensar que por fin han abierto sus mentes y han abrazado la causa homosexual. Si es así, les felicito sinceramente”, afirmaba el texto.
Al ser contactado por esta revista para ampliar la opinión ofrecida en su cuenta de Facebook, los agentes de Coque Malla nos trasladaron que prefería no hacer ninguna declaración al respecto más allá de reiterar que jamás le pidieron su permiso para utilizar la canción. El cantante no es el único músico que se ha llevado una desagradable sorpresa al ver cómo políticos de ideologías situadas en las antípodas de las suyas se servían de algún tema de su repertorio para amenizar cualquier acto o vídeo del partido. Estas son las controversias más mediáticas:
Mariano Rajoy
Canción: Seguiremos
Intérprete: Macaco
El cantante barcelonés también tiró de redes sociales para denunciar el tremendo enfado (“me hierve la sangre”) que le provocó ver su tema Seguiremos en un acto del Partido Popular en Cataluña. “No son los únicos, otros partidos también lo han hecho con mis canciones, sin permiso alguno, harto, indignado. Harto de políticos, de todosss!!!!”, escribía el autor.
Donald Trump
Canciones: Rolling In The Deep, You Can´t Always Get What You Want, We Are The Champions, Dream On, Rocket Man, Rockin’ In The Free World, It´s The End Of The World As We Know It (And I Feel Fine), We´re Not Gonna Take It…
Intérpretes: Adele, The Rolling Stones, Queen, Aerosmith, Elton John, Neil Young, R.E.M., Twisted Sister…
La lista de temas cuyo uso se le ha prohibido de manera explícita –y por parte de los propios autores– al presidente de los Estados Unidos bien podría resumir la historia de la música comercial contemporánea anglosajona. El motivo de tanta controversia radica en que no existe ninguna ley que obligue a los partidos a tener la aprobación del creador para utilizar sus composiciones siempre que paguen los derechos de las mismas. Los abogados de Steven Tyler (Aerosmith) enviaron una carta al magnate exigiéndole el cese de la reproducción de Dream On en sus mítines. Trump contestó vía Twitter asegurando que aunque gozaba de los derechos iba a sustituirla “por otra mejor” y que Tyler había conseguido más promoción gracias a la polémica que en sus últimos diez años de carrera musical. Michael Stipe, de R.E.M., le tildó de “payaso naranja” y dejó constancia de su reprobación de la clase política: “Váyanse a la mierda todos ustedes –hombres tristes, captadores de atención, hambrientos de poder y pequeños–”.
George W. Bush
Canción: I Won´t Back Down
Intérprete: Tom Petty
“De forma intencionada o no, da la impresión de que su campaña está siendo apoyada por Tom Petty, lo cual no es cierto”. Con sentencias como esta se dirigió la discográfica del cantautor de Florida a quien fuera presidente de Estados Unidos durante dos mandatos en la campaña presidencial del 2000 contra Al Gore. Casualmente, ambos candidatos coincidieron aquellos días en el deseo de utilizar la misma canción para sus mítines: Brand New Day, de Sting. El exlíder de Police no hizo distinciones y se la negó a los dos.
María Dolores de Cospedal
Canción: Fantastic Shine
Intérprete: Love of Lesbian
“Fiasco emocional”. Así calificaba Santi Balmes, líder del grupo indie rock catalán, el uso del tema Fantastic Shine en un vídeo electoral de la campaña de Cospedal para las elecciones autonómicas y municipales de Castilla-La Mancha en 2015. La banda reafirmó su deseo de que su repertorio no fuera utilizado por ningún partido.
Ronald Reagan
Canción: Born In The U.S.A.
Intérprete: Bruce Springsteen
Pedir permiso al autor de una canción no es más que una deferencia por parte del interesado que en algunas ocasiones puede volverse en su contra. The Boss, por ejemplo, contestó ‘no’ a la propuesta del presidente Reagan cuando se interesó por su himno de la clase obrera para la campaña de reelección de 1984. La canción ha sido muy reivindicada en los mítines republicanos durante décadas como símbolo nacionalista, pese a la filiación demócrata de Springsteen y a que el significado de la letra es completamente antagónico con dicho pensamiento. Quizá ya al tanto de estos supuestos, el público presente en un mitin de Trump en Penilsvania en 2016 le dedicó una sonora pitada al escucharla por la megafonía del recinto.
Alfredo Pérez-Rubalcaba
Canción: Sin ti no soy nada
Intérprete: Amaral
En junio de 2011, en plena sesión parlamentaria, el que fuera vicepresidente primero y ministro del Interior decidió interpelar al político popular Ignacio Gil Lázaro parafraseando el título de uno de los mayores éxitos en la carrera del grupo zaragozano. Juan Aguirre fue explícito en su respuesta: “Mira amigo, no me toques los huevos, las canciones son de todos”. Días más tarde el guitarrista pidió perdón por sus “desafortunadas” palabras.
Partido Nacional de Nueva Zelanda
Canción: Lose Youself
Intérprete: Eminem
En octubre de 2017 tuvo lugar uno de los casos más insólitos en la poblada lista de choques entre políticos y artistas. El Tribunal Superior de Nueva Zelanda condenó al Partido Nacional a compensar al rapero de Detroit con cerca de 350.000 euros por violación del copyright. Durante la campaña electoral de 2014, la organización política amenizó los actos con la melodía del tema Eminem-Esque que, según el tribunal, era “substancialmente una copia” del tema que ganó el Óscar a mejor canción en 2003 por 8 millas. Nunca una canción salió más cara.
Nicolas Sarzoky
Canción: Kids
Intérpretes: MGMT
Hasta los tribunales llevó el grupo de rock psicodélico estadounidense la negativa a que el expresidente francés utilizara su popular tema rompepistas en sus actos. La UMP, que no tenía los derechos para su uso, intentó restarle importancia ofreciéndole al dúo un euro como contrapartida. Los miembros consideraron la oferta como “insultante” y finalmente alcanzaron un acuerdo con una compensación cercana a los 30.000 euros. La banda donó la cantidad a una organización para la defensa de los derechos de los artistas.
John McCain
Canción: Take A Chance On Me
Intérprete: ABBA
El recientemente fallecido héroe de guerra, senador y excandidato presidencial por el Partido Republicano era un fan confeso de la música de la banda sueca, afirmando en numerosas ocasiones que Dancing Queen era su canción favorita. Sin embargo, el afecto no fue recíproco y los componentes de Abba le pidieron que dejara de utilizar sus temas en la campaña presidencial de 2008. McCain cumplió con lo demandado. Otras formaciones como Bon Jovi (Who Says You Can´t Go Home), Foo Fighters (My Hero) o Van Halen (Right Now) también se opusieron a que su música se relacionara con el por entonces candidato a la Casa Blanca.
Michelle Bachmann
Canción: Walking On Sunshine
Intérprete: Katrina and the Waves
A la congresista republicana, candidata al liderazgo del partido en 2012, también se le censuró el uso del mayor éxito de la banda ochentera de Cambridge. Aunque Bachmann hizo oídos sordos, la vocalista del grupo, Katrina Leskanich, emitió un comunicado afirmando que “la música también puede ser peligrosa”. Lo curioso de este caso es que la canción que precedió a Walking On Sunshine en los mítines era American Girl, de Tom Petty & The Heartbreakers, también negada por el añorado músico.