Zumo de carbón, la última moda de las ‘celebrities’ para depurar
¿Quién decía que los famosos se iban a conformar con la moda de ingerir barro o el café a prueba de balas? En 2015, la bebida estrella es el zumo de carbón.
Pese a su aspecto negruzco y poco saludable –el petróleo tiene mejor pinta–, el zumo de carbón se ha convertido en el último grito de las rarezas desintoxicantes. Tras un 2014 cargadito de batidos verdes y zumos de propiedades casi mágicas, el nuevo año sigue la estela depuradora del anterior. Las espadas siguen en alto y los paladares suspiran un consternado 'ay' ante lo que les espera si deciden subirse al carro de la última tendencia. La novedosa fórmula lanzada por la firma estadounidense Juice Generation apuesta por el carbón vegetal activado, uno de los mayores absorbe...
Pese a su aspecto negruzco y poco saludable –el petróleo tiene mejor pinta–, el zumo de carbón se ha convertido en el último grito de las rarezas desintoxicantes. Tras un 2014 cargadito de batidos verdes y zumos de propiedades casi mágicas, el nuevo año sigue la estela depuradora del anterior. Las espadas siguen en alto y los paladares suspiran un consternado 'ay' ante lo que les espera si deciden subirse al carro de la última tendencia. La novedosa fórmula lanzada por la firma estadounidense Juice Generation apuesta por el carbón vegetal activado, uno de los mayores absorbentes naturales que existe. Si bien conocíamos su prescripción en forma de cápsulas o pastillas, hasta ahora nadie se había atrevido a convertirlo en un suculento brebaje.
Desde el pasado diciembre, los neoyorquinos pueden disfrutar del zumo de carbón en cualquiera de los trece establecimientos que la cadena Juice Generation tiene en la Gran Manzana. Incluso se puede adquirir en lugares tan exclusivos como Bloomingdale's, a ocho euros el botellín más pequeño. El secreto de la bebida se sustenta en los ingredientes que potencian las virtudes de la sustancia azabache: el limón, la lima, el ágave y el agua alcalinizada. El resultado es una especie de limonada renegrida que ya suma miles de adeptos. No hace falta ser un lince para intuir quién se ha convertido en la embajadora más comprometida. En efecto, la gurú del wellness Gwyneth Paltrow.
Hace pocas semanas la actriz estadounidense lo recomendaba en Goop, su particular cajón de sastre virtual que lo mismo reflexiona sobre su propia separación –consciente, naturalmente– que ofrece recetas veganas. Aunque ella apostaba por otra firma que también acaba de lanzar la misma idea, la californiana Juice Served Here, que usa una receta un poco diferente enriquecida con arcilla. Antes que Paltrow, la célebre bloguera Annie Atkinson hizo lo propio en un post en su página She is in the glow. Entre las dos han conseguido que el zumo de carbón sea tomado en consideración por los fans de la práctica de la depuración.
La bloguera Anabel Atkinson y la actriz Gwyneth Paltrow, responsables de la popularización del zumo de carbón.
Instagram (@anabel_atkinson) / Getty
Las propiedades del carbón vegetal activado son de sobra conocidas por los amantes de las terapias alternativas. Desde tiempos inmemoriales se le han atribuido virtudes para eliminar sustancias tóxicas del cuerpo humano, desde composiciones farmacéuticas a restos de metales pesados. Cabe aclarar que no hablamos del carbón normal que se obtiene de maderas calcinadas, sino de carbón procedente, por norma general, de la cáscara de coco. Este se obtiene tras someterlo a temperaturas extremas con agua, con el fin de que se oxide. Es digestivo, por lo que también se emplea para las flatulencias y la halitosis provocada por los jugos gástricos, por ejemplo.
Esta moda se suma a todas las que ya conocimos en 2014 en la familia de las bebidas detox. El famoso batido verde –hecho a base de espinacas, kale, pepino o manzana, entre otros– dio paso al zumo de arcilla, basado en la práctica de la geofagia –hábito morboso de comer tierra o sustancias similares no nutritivas–. Todo comenzó con unas declaraciones de la actriz Shailene Woodley, que aseguró que la ingesta de barro es maravillosa porque "el cuerpo no lo absorbe y suministra una carga negativa que se adhiere a isótopos negativos". Vamos, el no va más. Lo mismo pensaba la también actriz Zoe Kravitz, quien para poder perder nueve kilos para su papel en la película The road within, optó por beber arcilla. Nada que ver con otras de las superbebidas estrella de 2014, el Bulletproof Coffee o el café a prueba de balas, una mezcla de café, mantequilla y aceite de coco. Mágico para sus seguidores, pues "mantiene el cuerpo en un estado de cetosis –perfecto para quemar grasas– y tiene cero toxinas", según su inventor, el ingeniero Dave Asprey.
Los amantes de los zumos y batidos saludables tienen su propio libro de cabecera, cuya autoría no podía corresponder a otra persona que no fuera el inventor del zumo de carbón, el dueño de Juice Generation, Eric Helms. 237 páginas para 100 recetas que constituyen el paradigma del bienestar más absoluto. Su título, The Juice Generation: 100 Recipes for Fresh Juices and Superfood Smoothies. Esta obra, que ya se ha convertido en un superventas, ofrece trucos, pautas de alimentación e incluso retos de varios días para combinar zumos y ponerse estupendo. Hilary Swank, Naomi Watts, Edward Norton, Blake Lively o Michelle Williams ya lo han leído, según el autor. Además, libro está prologado por Salma Hayek. Desde luego, así no parece difícil mantenerse sano. Siempre que uno esté dispuesto a ir a la mejor tienda de productos ecológicos, pagar una fortuna por ellos, lavarlos, cortarlos, mezclarlos, triturarlos… y limpiar la cocina tras la escabechina de hortalizas.
Zumo de carbón de Juice Generation y portada del ‘best seller’ de la firma.
Instagram (@juicegeneration)