Estos son los rostros de la cultura Cosplay en España

Con motivo de la primera Eastpak Cosplay Convention, se congregaron en la capital algunos de los personajes más aclamados de este fenómeno arraigado en Japón, cuyos imaginarios creativos han dejado su impronta de forma determinante en la moda y la cultura pop.

Algunos de los asistentes a la primera edición de la Eastpak Cosplay Convention, celebrada el pasado 20 de marzo en Madrid.

De la seductora druida Fearne Calloway, reconocible por su tiara de flores y la túnica vaporosa, a la guerrera Byleth Eisner, el personaje de Fire Emblem que siempre luce una lustrosa cabellera en azul esmeralda. Un paseo por la cuenta de Instagram de Ana María Sanz Estébanez, más conocida como Luzbel d’Auvergne, su alias en el mundo de cosplay desde hace 10 años, da un atisbo de las mil y una caras que esta madrileña comprende en su propia persona bajo un derroche inagotable de imaginación. Esta artesana y artista del...

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De la seductora druida Fearne Calloway, reconocible por su tiara de flores y la túnica vaporosa, a la guerrera Byleth Eisner, el personaje de Fire Emblem que siempre luce una lustrosa cabellera en azul esmeralda. Un paseo por la cuenta de Instagram de Ana María Sanz Estébanez, más conocida como Luzbel d’Auvergne, su alias en el mundo de cosplay desde hace 10 años, da un atisbo de las mil y una caras que esta madrileña comprende en su propia persona bajo un derroche inagotable de imaginación. Esta artesana y artista del make up que se introdujo en el cosplay en 2015 decidió enfocar su pasión por el arte hacia el universo de la réplica y los disfraces de videojuegos, el anime y las películas de ciencia ficción. “Llevo 10 años en el mundillo trabajando para eventos por todo el país. España es de los países que más trofeos acumula en competiciones internacionales de cosplay, tenemos muchos artistas que hacen cosas increíbles y el sector está mucho más normalizado y profesionalizado”, explica a SMODA.

Luzbel, al igual que otros cosplayers locales como Wonderous Joan o Zafyx, ha sido uno de los rostros reconocibles en la primera Eastpak Cosplay Convention, celebrada el pasado 20 de marzo en la capital. Con motivo de la presentación de su nueva campaña Built to Resist, inspirada en la cultura cosplay y las comunidades LARP (Live Action Roleplay), la firma insigne por sus mochilas y maletas congregó a lo más granado de esta escena, cuyos imaginarios creativos han dejado su impronta de forma determinante en la moda y la cultura pop.

La cosplayer Luzbel d’Auvergne con una versión glam y modernizada del personaje de League of Legends, Evelynn KDA.Meitu

Para los que no estén familiarizados con la materia, el fenómeno cosplay, palabra que aglutina los términos costume y play (”interpretar disfrazado” en castellano), alude a una actividad en la que sus participantes, los cosplayers, se visten con trajes y accesorios para representar personajes ficticios. Esta subcultura arraigada en Tokio, surgida durante los primeros mercados del cómic de Odaiba en los años 70 – cuando los asistentes empezaron a disfrazarse de sus personajes favoritos–, encuentra sus modelos a seguir en la fantasía y la ciencia ficción, los videojuegos o el género manga.

Pero la visión del personaje que compone el cosplayer no es una mera imitación, sino que imprime su propia personalidad. El trabajo de Luzbel, donde no falta la impresión en 3D, la posticería, texturas hiperrealistas complementadas con circuitos de LED y animatrónica, mucha caracterización –y también improvisación– es un claro ejemplo de la obra de arte en la que puede llegar a convertirse este tipo de trajes. “Una nunca se aburre cuando escoge un proyecto nuevo. Las obras de ficción en las que se fija un cosplayer suelen ir ligadas también a la moda que inspira al autor, por lo que son dos cosas que se retroalimentan. Autores como Tite Kubo (autor de Bleach), Naoko Takeuchi (Sailor Moon) o Hirohiko Araki (Jojo’s Bizarre Adventure) son enamorados de la alta costura y la moda urbana, y visten siempre que pueden a sus personajes con modelos de esta industria. Luego sus versiones, estilo e imitaciones vuelven a ser reinventadas por cosplayers y las marcas, y así el ciclo se completa”.

La teatralidad y la imaginación se dieron cita en numerosos looks durante el evento de Eastpak.

El flechazo con la moda es mutuo. Desde la alta costura con las propuestas casi siempre teatrales en manos de Viktor &Rolf o Iris Van Herpen, a tendencias virales que aterrizan en suelo urbano –la última y más potente de todas, el fenómeno coquette–, la industria de la moda también se retroalimenta de una subcultura que según un estudio realizado en 2023, arrastra a 10 millones de personas por todo el mundo y mueve 4.800 millones de dólares al año. " El sector del LARP, más performático que el cosplay que consiste en jugar partidas de rol donde el tablero y los personajes se traen a la realidad y sin depender tanto de la apariencia del personaje, es un movimiento que está influyendo mucho en la moda y la decoración. La prueba son estilos como el cottagecore o fairycore que están saliendo a la calle sin considerarse disfraz”, puntualiza Luzbel, que para el evento de Eastpak eligió una versión glam y modernizada del personaje de League of Legends, Evelynn KDA.

El cosmodel y empresario Wonderous Joan con un look de inspiración vikinga diseñado por él mismo.

Joan Ivars, más conocido en el mundo del cosplay como Wonderous Joan, es cosmodel y dirige su propia marca Hephaestus Cosplay Forge desde hace seis años. Uno de los talentos más valorados de la escena que para la ocasión recreó un look de inspiración vikinga diseñado por él mismo. “Se basa sobre todo en uno de mis personajes recurrentes de cosplay, Geralt de Rivia, protagonista de la saga The Witcher, que interpreto oficialmente en el juego de rol en vivo de esta franquicia”, explica. Al igual que Luzbel, Joan tiene claro que la cultura cosplay ya ha encontrado su lugar en nuestro país, aunque no esté aún a la altura de mercados como Japón o Colombia. “Pese a ser un movimiento aún incipiente en España, el cosplay en terreno nacional está experimentando un crecimiento exponencial año tras año, con un mayor número de cosplayers y eventos asociados al movimiento, aunque aún nos encontramos a años luz de países como Japón”.

“Ahora ya no hay miedo a vestir diferente o a ser diferente. La moda ha ayudado mucho. Es genial que llevar peluca sea cada vez más normal”, apunta Adelina Pérez Pardo, quien se esconde tras el alterego cosplay de Zafyx. Esta streamer verificada en Twitch y amante de la programación y la vestimenta no normativa, desde pequeña soñaba con ser una de esas personas que visten como quiere sin importarle las opiniones de los demás. En esta comunidad ha cumplido su sueño. “En esta ocasión me he vestido de setita, acorde con el dresscode de fairy coquette. Es super divertido simular ser uno de tus personajes de anime o videojuegos favoritos, te comportas y vistes como tal”, revela.

Zafyx y su visión de cuento del estilo coquette.

En esa faceta liberadora que abre una puerta a un mundo que permite mostrarte como realmente quieres ser visto, reside la gran atracción de la cultura cosplay. “Es un refugio para miles de identidades distintas, te permite explorar sus caras poco a poco a través de personajes, quedándote con un cachito de cada uno de ellos para conocerte mejor. Un día puedes probar a ser más valiente, otro más coqueto o extrovertido…”, concluye Luzbel. Vivir múltiples vidas en una. El sueño de cualquiera.

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