La concertada pide que sus colegios pregunten a los profesores si harán huelga

Es una carta de Escuelas Católicas, la patronal de los centros concertados religiosos, a sus 2.000 centros en España. La presidenta, Inmaculada Tuset, envió el 20 de marzo instrucciones a todos los colegios para organizar la jornada de huelga del 29 de marzo. Entre otras cuestiones, les pide que abran como “un día ordinario” y que hagan una consulta a sus profesores sobre si secundarán o no los paros. Esto último es “i...

Es una carta de Escuelas Católicas, la patronal de los centros concertados religiosos, a sus 2.000 centros en España. La presidenta, Inmaculada Tuset, envió el 20 de marzo instrucciones a todos los colegios para organizar la jornada de huelga del 29 de marzo. Entre otras cuestiones, les pide que abran como “un día ordinario” y que hagan una consulta a sus profesores sobre si secundarán o no los paros. Esto último es “ilegal y puede coaccionar” a los empleados, según un experto laboralista. El sindicato  UGT ha pedido a la patronal religiosa que rectifique y amenaza con acudir a la justicia si no lo hace.

Tuset reclama por escrito a los centros que fijen los servicios mínimos del día 29 para lo que, añade, “sería conveniente hacer una consulta a los trabajadores y a sus representantes sobre si secundará la huelga o no”. Si no se espera un “gran efecto”, estima que “ni siquiera” serán necesarios esos mínimos “al disponer de suficiente personal para que los alumnos sean atendidos” en el centro. Pide que la empresa (el colegio) designe las personas que deben permanecer ese día al cuidado de las aulas. Los designados “están obligados a acudir a su puesto de trabajo ese día”.

“Esa consulta es ilegal y puede coaccionar”, considera el abogado laboralista Luis Zumalacárregui, que recuerda que hay sentencias que condenan este tipo de actuaciones. “Los mínimos se deben fijar con antelación y sin esos datos”, añade. “La clave es la intencionalidad: si la consulta es para designar mínimos se puede justificar, pero si tiene otras intenciones, vulnera el derecho a huelga”, considera Jesús Lahera, profesor de Derecho del Trabajo de la Complutense.

"No queremos coaccionar a los trabajadores para que no secunden la huelga, se trata d euna consulta no vinculante ni obligatoria para una mínima organización", responde Luis Centeno, miembro de la asesoría jurídica de Escuelas Católicas, que asegura que esta misiva es "similar" a la que han enviado en convocatorias anteriores. 

En principio, las comunidades autónomas deben acordar los servicios esenciales, entre los que se encuentran los colegios, para el día de la huelga. Los servicios mínimos pactados para los colegios en la Comunidad de Madrid, por ejemplo, incluyen al director del centro y a parte del equipo directivo, según el acuerdo de mínimos ratificado por el Gobierno regional madrileño y los sindicatos CC OO y UGT.

FETE- UGT, federación de enseñanza del sindicato, ha manifestado su rechazo por la nota de la patronal de los concertados religiosos. Considera que la petición de una consulta entre los profesores es “un piquete empresarial”. UGT pide a Escuelas Católicas “sentarse con los sindicatos convocantes para pactar en el ámbito de las comunidades autónomas los servicios mínimos correspondientes” y les reclama que no los designe “unilateralmente” con cualquier otro criterio “independientemente de las previsiones que se puedan tener de seguimiento”. Según Centeno, el sindicato "nunca ha dicho que quería pactar unos mínimos" aunque admite que la patronal tampoco les ha convocado para ello.

La carta de la patronal de la concertada añade más abajo que la huelga “es un derecho de los trabajadores que no puede dar lugar a sanción alguna” y ofrece un cálculo de los descuentos previstos por secundar el paro. La misiva termina con una “valoración patronal”. Consideran que una huelga “siempre es el último recurso de protesta” que Escuelas Católicas no comparte “máxime cuando todo indica que tiene unos objetivos claramente políticos”.