El ultra André Ventura presenta su candidatura “antisistema” a la presidencia de Portugal
El líder de Chega aspira a pasar a la segunda vuelta en las elecciones que se celebran en enero
El líder de extrema derecha André Ventura contenderá por la presidencia de Portugal en las elecciones de enero próximo. Ventura enarbola un discurso de mano dura contra la inmigración y se presenta a sí mismo como un as...
El líder de extrema derecha André Ventura contenderá por la presidencia de Portugal en las elecciones de enero próximo. Ventura enarbola un discurso de mano dura contra la inmigración y se presenta a sí mismo como un aspirante “antisistema”, a pesar de que pertenece al sistema político parlamentario desde 2019, cuando logró la primera acta de diputado para Chega, fundado ese mismo año, y que desde hace cuatro meses es el líder de la oposición que negocia medidas con el Gobierno. “No tenemos otra forma de derrotar el sistema si no es presentándome”, aseguró.
Será la segunda vez que concurre a la carrera a la Jefatura del Estado (lo hizo en 2019), pero en esta ocasión lo hace con varios vientos a favor. Uno es el internacional, donde la fraternidad populista dispone cada vez de más poder. Y otro es doméstico: los portugueses, que parecían resistirse a la ola extremista, han consolidado el partido de ultraderecha como una fuerza que puede aspirar al poder.
En mayo pasado Chega se convirtió en la segunda fuerza parlamentaria en las elecciones legislativas. En este tiempo, André Ventura trató de construir una imagen de alternativa de gobierno del actual primer ministro Luís Montenegro, al frente de un ejecutivo de coalición conservadora que no tiene mayoría absoluta.
En paralelo, el líder ultra trató de encontrar un candidato a las elecciones presidenciales, que se celebrarán el próximo 18 de enero, que asumiese las principales banderas de su formación. Y tenía un favorito que no estaba en sus filas pero al que siente cercano: el ex primer ministro del Partido Social Demócrata, Pedro Passos Coelho, que fue su valedor en el pasado mientras Ventura militó en la formación de centro derecha y que en algunas intervenciones públicas ha mostrado una cercanía a postulados de Chega en asuntos como la inmigración.
Contra la inmigración
En una intervención ante la prensa sin derecho a preguntas, Ventura admitió que no logró convencer a Passos Coelho ni a otros candidatos y que se presenta forzado. “El sistema intentó que tuviéramos un candidato débil y yo nunca permitiré que Chega tenga un candidato para perder”, afirmó.
Su candidatura, indicó, pretende combatir la “inmigración descontrolada”, una materia sobre la que parece radicalizarse cada vez más como demostró este domingo en Madrid donde elogió “la caza al inmigrante” que se vivió en Torre Pacheco (Murcia). La denuncia de la corrupción será el otro tema capital de su estrategia política.
Chega es un fenómeno político insólito en la democracia portuguesa por la rapidez de su crecimiento, pero en estos seis años de vida no ha logrado afianzar liderazgos al margen de su líder. Ventura es su mayor activo en cada cita electoral. En las últimas elecciones logró un resultado histórico, con 60 diputados, que le permitieron dar el sorpasso al Partido Socialista.
Su objetivo para las elecciones en las que se elegirá al sucesor de Marcelo Rebelo de Sousa al frente de la Jefatura del Estado es pasar a la segunda vuelta y demostrar que el apoyo a su proyecto no ha sido coyuntural. “Si pasamos a la segunda vuelta será la consolidación de un movimiento político nunca visto en este país”, subrayó.
Además de Ventura, hay numerosos candidatos presidenciales en una liza que todavía podrá incorporar nuevos aspirantes. El mejor posicionado en las encuestas es el almirante en la reserva Henrique Gouveia e Melo, que compite con Marques Mendes (centro derecha), António José Seguro (socialista), António Filipe (comunista), João Cotrim de Figueiredo (Iniciativa Liberal) y Catarina Martins (Bloco de Esquerda).