Margarita Robles: “Es esencial que la misión de la ONU en Líbano continúe”
La ministra de Defensa advierte de que “solo y exclusivamente Naciones Unidas” tiene potestad para decidir sobre la continuidad o no de los cascos azules en el país
Ante la escalada en las hostilidades entre Israel y las milicias proiraníes de Hezbolá en Líbano, 16 ministros de Defensa de la Unión Europa han mantenido este miércoles una videoconferencia para evaluar la situación, especialmente la de la misión de mantenimiento de la paz de Naciones Unidas (Unifil, por sus siglas en inglés), que España lidera desde 2022 de la mano del general Aroldo Lázaro. “Es esencial que Unifil continúe”, ha remarcado Margarita Robles al salir de ...
Ante la escalada en las hostilidades entre Israel y las milicias proiraníes de Hezbolá en Líbano, 16 ministros de Defensa de la Unión Europa han mantenido este miércoles una videoconferencia para evaluar la situación, especialmente la de la misión de mantenimiento de la paz de Naciones Unidas (Unifil, por sus siglas en inglés), que España lidera desde 2022 de la mano del general Aroldo Lázaro. “Es esencial que Unifil continúe”, ha remarcado Margarita Robles al salir de la reunión a puerta cerrada. Además, la titular de Defensa española ha lanzado un mensaje al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que hace días pidió la retirada de la misión: “Tiene que quedar muy claro que solo y exclusivamente el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas puede tomar decisiones en relación con esta misión”.
La preocupación por la seguridad de los cascos azules allí desplegados crece cada día, sobre todo después de que algunas de sus bases fueran atacadas por el ejército de Israel. Italia, por ejemplo, empezó con una posición muy dura respecto a la permanencia de sus nacionales en el país, que está siendo cada día escenario del enfrentamiento entre las milicias de Hezbolá y los soldados israelíes, con presencia ya en el sur de Líbano. La propia misión denunció el pasado domingo que fuerzas israelíes entraron por la fuerza en una de sus bases.
El primer ministro israelí mantiene que Hezbolá estaría utilizando las posiciones de la Unifil como punto de lanzadera de sus cohetes contra territorio israelí. Según fuentes militares, Israel hace fuego de contrabatería utilizando su artillería contra el punto de salida de los cohetes de la milicia libanesa “poniendo a la gente [de la ONU] en peligro”. Por este motivo, Netanyahu ha pedido a los cascos azules que se retiren lo antes posible. “Para Israel, Unifil es un problema”, sostiene la misma fuente, en contacto permanente con la misión.
Ante esta situación, los ministros de Defensa de los 16 países europeos que se han reunido este miércoles son claros: “Que se protejan las instalaciones de Unifil”, ha remarcado Robles, quien ha pedido también el cese de las hostilidades y un alto el fuego “inmediato”.
La ministra Robles, junto a sus homólogos de Francia, Italia, Austria, Croacia, Finlandia, Grecia, Irlanda, Letonia, Países Bajos, Polonia, Alemania, Estonia, Hungría, Malta y Chipre han conversado para “poner en valor la situación”, según ha informado la titular de Defensa española, y lanzar un mensaje de unidad y apoyo a la misión de Naciones Unidas. Existe unidad total, al menos en el seno de la UE, para que la misión internacional permanezca, apunta una fuente de Defensa. “Nadie más que la ONU puede tomar decisiones sobre esta misión. Permaneceremos juntos en Líbano”, ha señalado Robles.
La ministra de Defensa ha aprovechado una vez más para mostrar su “orgullo” hacia el contingente español desplegado en el sureste del país árabe ―unos 650 efectivos― y ha valorado que la misión es “esencial para la desescalada del conflicto y la ayuda a la población civil”.
La presencia del contingente español en Líbano está muy bien valorada por la población civil, especialmente aquellos que viven en las inmediaciones de la base Miguel de Cervantes, en la localidad de Marjayún (en el sureste del país), según varias fuentes militares. La permanencia de la misión, por tanto, es importante para mantener una “presencia” y cierta “reputación” de Naciones Unidas en medio del conflicto, pese a que en el contexto actual de máxima tensión ―y en el que en ocasiones, las bases de la ONU se están viendo atacadas―, los militares pasan una buena parte del tiempo en el interior de sus búnkeres.