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Así es el día a día de un preso ruso en una cárcel de Ucrania

En el mayor campo de prisioneros rusos de Ucrania, los internos dividen su tiempo entre trabajo, tiempo libre y quienes han resultado heridos en el frente se recuperan de sus lesiones

El pabellón hospitalario es nuevo y cuenta con aparato de rayos X, ecógrafo, consulta dental y psiquiátrica. Numerosos presos han sufrido amputaciones y aquí tratan sus heridas. Lola Hierro
Aiden solo ha conservado los pulgares. Tuvieron que amputarle el resto de dedos debido a la congelación. Es una lesión muy habitual entre los soldados que combaten a temperaturas bajo cero en el invierno de Ucrania.Lola Hierro
A la derecha, Vlad, mercenario de 25 años, junto a otros tres presos en una habitación del pabellón hospitalario del mayor campo de prisioneros de guerra rusos, en el oeste de Ucrania, el 25 de julio de 2024.Lola Hierro
Muchos prisioneros presentan discapacidades fruto de las heridas sufridas en el frente y necesitan muletas y sillas de ruedas en su día a día. Lola Hierro
Los prisioneros de guerra pasan parte de su tiempo libre en patio de la cárcel. Todos llevan uniformes de color azul y solo se les permite fumar en zonas habilitadas. Lola Hierro
Uno de los trabajos que se pueden realizar es la fabricación de muebles de jardín. En un par de semanas, los internos aprenden a trenzar el ratán. Lola Hierro
La confección de árboles navideños es otra actividad laboral, así como la fabricación de palets. Los presos cobran unos 25 céntimos de euro al día por su trabajo.Lola Hierro
Presos trabajan en las cocinas, fregando después del turno de almuerzos. Ellos tienen que encargarse de preparar la comida y lavar todo los cacharros después.Lola Hierro
Los reos aguardan en fila a recibir una orden para marchar hacia el comedor. El pasillo en el que están tiene carteles a ambos lados con imágenes de héroes y personalidades históricas de Ucrania.Lola Hierro
Los prisioneros acceden al comedor en fila india. Los funcionarios de prisiones explican que no son muy habladores, suelen estar tranquilos y sumidos en sus pensamientos. Lola Hierro
Un preso mira un mapa de Ucrania mientras marcha hacia el comedor. En esta prisión se les habla en ucranio, suena el himno nacional y los libros de la biblioteca también están en lengua ucrania. Lola Hierro
En el comedor, los reos se sientan de cuatro en cuatro y solo se levantan cuando el funcionario de prisiones les da permiso. En ese momento, los cuatro se tienen que poner en pie a la vez, recoger los platos y decir en voz alta: “Gracias por la comida”. Lola Hierro
El menú de los prisioneros es borsch (sopa de remolacha típica de Ucrania), carne con puré de patatas y ensalada de col. Lola Hierro
Los presos tienen un pequeño campo de fútbol de arenilla y una zona cubierta donde hay pesas y barras para ejercitarse. Lola Hierro