Macron acuerda con Biden la vuelta de su embajador en un primer gesto de distensión

Los dos presidentes, que han hablado este miércoles por teléfono, se reunirán en octubre para tratar de superar la crisis de los submarinos

Emmanuel Macron y Joe Biden, el 14 de junio pasado durante una cumbre de la OTAN en Bruselas.Brendan Smialowski (AP)

París y Washington quieren reparar los puentes torpedeados por la crisis de los submarinos australianos. Los presidentes Emmanuel Macron y Joe Biden han conversado este miércoles por primera vez desde que, hace una semana, París denunciara la “ruptura de confianza” que, afirma, supuso el acuerdo secreto anunciado el 15 de septiembre por Estados Unidos para proporcionar a Australia submarinos pese a que Francia había firmado co...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

París y Washington quieren reparar los puentes torpedeados por la crisis de los submarinos australianos. Los presidentes Emmanuel Macron y Joe Biden han conversado este miércoles por primera vez desde que, hace una semana, París denunciara la “ruptura de confianza” que, afirma, supuso el acuerdo secreto anunciado el 15 de septiembre por Estados Unidos para proporcionar a Australia submarinos pese a que Francia había firmado con Canberra un contrato multimillonario para ello. En la conversación telefónica, los mandatarios han acordado el inicio de un proceso de “consultas en profundidad” para restablecer la confianza mutua, que deberá consolidarse con un encuentro de ambos el mes que viene.

Macron y Biden “se reunirán en Europa a finales de octubre para alcanzar puntos de entendimiento y conservar todo el dinamismo del proceso” de consultas abierto tras la conversación de este miércoles, según un comunicado conjunto del Elíseo y la Casa Blanca, que subraya que la llamada se produjo a petición del mandatario estadounidense.

Como muestra de buena voluntad, Macron ha decidido el retorno “la semana que viene” de su embajador en Washington, Philippe Etienne, al que llamó a consultas el viernes, en una inusual muestra de la gravedad de la crisis. El Elíseo “aún no ha tomado ninguna decisión” sobre el retorno a Canberra de su embajador en Australia, convocado igualmente el viernes.

Etienne será el encargado de liderar por la parte francesa el “intenso trabajo” por delante para volver al estado de las relaciones antes de que estallara una crisis que “se habría podido evitar” si se hubieran realizado “consultas abiertas entre los aliados sobre cuestiones de interés estratégico para Francia y sus aliados europeos”, agrega el comunicado. Esta última aclaración responde a una demanda de París. Según había indicado el Elíseo, el presidente francés, que hasta ahora no se ha manifestado públicamente sobre el asunto, había aceptado la conversación a condición de que Biden le proporcionara “aclaraciones” convincentes sobre el pacto con Australia y le presentara “medidas concretas” para superar la grave “ruptura de confianza” que a juicio de París ha provocado el caso de los submarinos.

Según París, Macron no estaba dispuesto a conformarse con meras promesas de Biden, quien en las últimas horas se ha reunido en Nueva York y Washington con el primer ministro australiano, Scott Morrison, y el británico, Boris Johnson, respectivamente, reforzando aún más los lazos de la nueva entente anglófona.

París exigía a Washington asumir “la importancia estratégica del compromiso francés y europeo en la región del Indopacífico”, así como el “pleno reconocimiento” de la “necesidad de reforzar la soberanía europea, así como el compromiso creciente de los europeos de su defensa y seguridad”. También esperaba que Washington reconociera el “compromiso común en la lucha contra el terrorismo”. La respuesta de la Casa Blanca ha sido explícita: “En el marco de la lucha conjunta contra el terrorismo, EE UU se compromete a reforzar su apoyo a las operaciones antiterroristas en el Sahel lideradas por Estados europeos”. No ha habido referencia expresa a Francia, que en junio anunció la retirada de sus fuerzas de Malí en pro de un operativo más amplio en la región con otros socios europeos.

“El presidente Biden ha reafirmado la importancia estratégica del compromiso francés y europeo en la región del Indopacífico, manifestado en la reciente divulgación de la estrategia de la UE para la región”, continúa el comunicado, con varios guiños a Bruselas. “EE UU también reconoce la importancia de una defensa europea más fuerte y más capaz, que contribuye positivamente a la seguridad transatlántica y global y es complementaria de la OTAN”.

La diplomacia telefónica ha incluido una llamada del primer ministro británico, Boris Johnson, a Macron para pedirle tranquilidad. Desde Washington, donde se encuentra de visita oficial, el británico bromeó sobre el enfado del inquilino del Elíseo. “Creo que es hora de que nuestros queridos amigos de todo el mundo se tranquilicen sobre todo esto [la crisis de los submarinos] y me den un respiro”, afirmó en tono jocoso.

Francia contaba con el decidido apoyo de Alemania -a diferencia de España, de perfil en esta crisis- para plantear exigencias concretas a Biden, sustanciadas en la declaración de intenciones que representa este borrón y cuenta nueva en las relaciones bilaterales. Pero gestos como la cancelación de una reunión multilateral de EE UU y varios aliados europeos, Francia incluida, en los márgenes de la Asamblea General de la ONU en Nueva York, no ayudan. La reunión se ha cancelado por problemas de agenda, según fuentes estadounidenses. Tampoco se contempla un cara a cara entre los jefes de la diplomacia de EE UU, Antony Blinken, y Francia, Jean-Yves Le Drian, con ocasión de dicho foro. Ambos prevén intercambiar impresiones este miércoles en una reunión de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad, pero no hay previsto ningún encuentro individual, según el Departamento de Estado.

Sigue toda la información internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.

Más información

Archivado En