El canciller de Uruguay renuncia en el inicio de la presidencia temporaria de su país en Mercosur
Enrnesto Talvi comunica que no quiere ser “un obstáculo” al deseo del presidente de nombrar un nuevo ministro de Exteriores
Ernesto Talvi duró solo cuatro meses en el cargo. El canciller de Uruguay presentó este miércoles su renuncia mediante una carta que entregó al presidente Luis Lacalle Pou y publicó más tarde en redes. En el texto, dejó traslucir que su salida, ventilada en la prensa local desde hace semanas, no ha sido en los términos que esperaba. “Tal como se lo manifesté oportunamente”, escribió Talvi a Lacalle Pou, “mi intención era seguir en la Cancillería hasta fin de año durante la presidencia ...
Ernesto Talvi duró solo cuatro meses en el cargo. El canciller de Uruguay presentó este miércoles su renuncia mediante una carta que entregó al presidente Luis Lacalle Pou y publicó más tarde en redes. En el texto, dejó traslucir que su salida, ventilada en la prensa local desde hace semanas, no ha sido en los términos que esperaba. “Tal como se lo manifesté oportunamente”, escribió Talvi a Lacalle Pou, “mi intención era seguir en la Cancillería hasta fin de año durante la presidencia pro témpore del Uruguay en el Mercosur”, que inicia este jueves. El sucesor de Talvi será el hasta ahora embajador de Uruguay en España, Francisco Bustillo, un diplomático de carrera muy cercano a Lacalle Pou y de buenas relaciones con el presidente de Argentina, el peronista Alberto Fernández.
La salida de Talvi era solo cuestión de tiempo. Su gestión estuvo marcada por diferencias cada vez más profundas con el equipo que lo acompañaba en la cancillería y una política de moderación hacia Venezuela que chocaba con la mano dura de Lacalle Pou. Desde el llano, Talvi siempre sostuvo que el Gobierno de Nicolás Maduro era una dictadura, pero una vez convertido en ministro fue más cauto y promovió el diálogo con Caracas. Semanas atrás, en una entrevista con el diario El Observador, Talvi dijo que ahora que era canciller poco importaba su opinión personal hacia Venezuela. “Este canciller no va a decir en este rol esa palabra [dictadura] y lo que yo piense respecto del régimen que gobierna Venezuela dejó de ser relevante en el momento en que asumí este cargo. Basta con mirar lo que pensaba cuando no era canciller, entonces ya van a saber lo que pienso”, dijo.
La prensa local reveló además discusiones con sus colaboradores, al tiempo que se enfriaba la relación con Lacalle Pou. Talvi no era un soldado del presidente, y así se lo hizo saber. Como candidato a presidente por el conservador Partido Colorado, obtuvo el tercer puesto en la primera vuelta de las elecciones generales de 2019. Su apoyo fue clave para que Lacalle Pou, del Partido Nacional, venciese finalmente en segunda vuelta al Frente Amplio, un gesto que el nuevo Gobierno retribuyó con la cancillería. Tras cuatro meses de desgaste, Talvi presentó la renuncia para no ser “un obstáculo” en la elección del nuevo ministro, según dijo en su carta de renuncia.
Talvi ya había manifestado su intención de volver al ruedo político, como líder del Partido Colorado. Pero no se esperaba que su salida coincidiese con el inicio de la presidencia temporal de Uruguay en el Mercosur, el bloque que también integran Argentina, Brasil y Paraguay. El ministro participó este miércoles de la reunión de cancilleres del grupo que se celebró de manera virtual y debía acompañar el jueves a Lacalle Pou en el encuentro, también virtual, de jefes de Estado. “Como canciller me resulta muy difícil jugar el rol de líder político. El líder político juega en toda la cancha”, había dicho Talvi el domingo pasado, anticipando sus intenciones.
La prensa uruguaya adelantó que el reemplazo de Talvi será Francisco Bustillo, actual embajador en Uruguay. Bustillo, de 60 años, es un hombre de carrera muy cercano a Lacalle Pou. Su presencia en la cancillería puede suponer además una mejora en las relaciones entre Uruguay y Argentina, dos socios que hoy están ubicados en las antípodas ideológicas. Bustillo fue embajador en Buenos Aires entre 2005 y 2010 y forjó una amistad con el presidente Alberto Fernández, por ese entonces jefe de ministros de Néstor y Cristina Kirchner. Bustillo honró esa cercanía en septiembre del año pasado, cuando recibió a Fernández en su residencia en Madrid durante la gira que el argentino realizó por Europa como presidente electo.